Poemas

Historias de vida

Un día se replanteo que le dolía, que le había pesado por mucho tiempo.

Un día se sentó frente a frente, sin el velo de fantasías que solía cubrirle sus ojos. Un día sintió que no era vida, que su obligación y su agradecimiento debía ser viviendo con alegría.

Nada era como lo había pensado, no había formado la familia que soñaba, ni si quiera había encontrado el hombre de sus sueños, ni tampoco se sentía plena con ella misma.

Años atrás era mendiga del afecto, pedía amor, se arrodillaba hasta conseguir las migajas que la gente acostumbra a dar por amor.

Era un ser tan indefenso, tan frágil, era tan blanda, sus sentimientos tan grandes y profundos. Estaba sola en un mundo que no conocía, ella sabia de cuentos de hadas, de cuentos de amor con finales felices, con gente que siempre estaba dispuesta a ser cada día mejor.

Ella conocía muchas cosas, pero se olvido de crecer, y conocía cosas de niños, debía ser adulta, estaba en un mundo de adultos, las heridas eran heridas mortales; las muertes eran muertes, los dolores se sentían de verdad, no sabia de eso solo amaba sin limites a pesar de su propia vida, sin pensar el costo de su propia vida.

Acariciaba las paginas de su vida día a día, le daba forma, jugaba a que mañana iba a ser mejor, pensaba en que un día el ser amado la viera con los mismos ojos que ella lo miraba, la sutil mirada del amor.

Necesitaba tan poco, pero tan grande era su necesidad de ser amada con la pureza de una flor, quería ser tratada como los pétalos de una rosa, acariciada con la ternura que demanda sus corazones.

Cuanta necesidad.

Amaba sin pensar, entregaba son saber a quien todas sus ilusiones, deseos... sentimientos enormes.

Tenia tanto miedo.

En su corta vida experimento grandes dolores, que la hirieron de muerte, pero tenia un ángel, que la acompañaba, nunca fue cociente de ello, pero nunca estuvo sola. Alguien le acariciaba el cabello antes de dormir y le susurraba canciones que la dormían dejándola en un profundo sueño.

Como poder explicar lo que en ella existía. Era ternura, caricias, cielo, tempestades, desviaros. Era una mezcla de amores y cielos, de olvidos. Como decir con palabras algo que solo se siente con el alma. Esa era ella, casi intangible, casi etérea.

Quería estar hecha de una sola idea.