Me encontraba en el mismo lugar, pero esta vez, estaba sola. No recordaba nada, pero un fuerte sentimiento de deja vu me tenía intranquila.
La casa en la que me encontraba era vieja y parecía que en cualquier momento se caería, pero lo más escalofriante no era solo el silencio, sino que todo se veía en blanco, negro y rojo.Sangre.
"Alguien ha sido asesinado" fue lo que pensé, pero las manchas eran muy pequeñas... Bueno, no tan pequeñas.
Mi cuerpo se sentía liviano, tanto así que lo sentía flotar. Tuve un mal presentimiento, algo me decía que era mejor no hablar.
De pronto, sentí que algo venía. No escuché pasos, ni una voz, ni vi alguna sombra, pero sí sentía una presencia, era como una presión sobre mis hombros que cada vez se hacía más y más pesada.Me estaba buscando.
Trate de alejarme lo más rápido posible hasta que la presión disminuyera. Sin darme cuenta, llegué a un patio en donde había un depósito viejo. "Protégenos" resonó una voz en mi cabeza; era la de una niña muy bonita. Comencé a recordar y su apariencia se volvió clara como el agua. Pero aún así no entendía cuál era la razón por la cual me encontraba allí. Solo sabía que tenía que protegerla, que yo era lo único que le quedaba.
Porque ella estaba sola.
La presión en mis hombros aumentó repentinamente. Aquella cosa me había encontrado y venía con toda velocidad hacia mí. En cuestión de segundos, la cosa ya estaba en frente mio.
Me quedé estática.
Me miraba fijamente; no tenía cara, ni siquiera tenía forma. Era un bulto enorme de oscuridad ardiente, con solo una boca en la parte de arriba y varios ojos rojos que parecían estar secos. De su boca salía un líquido negro y algunos de sus dientes se le caían.
Noté como no paraba de crecer y comencé a llorar del miedo. No quería estar ahí y aún seguía sin entender por qué, pero esa niña era todo para mí, así que sin darme cuenta ya me encontraba parada firme con los brazos abiertos."No vas a pasar"
.
.
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"No la vas a tocar"
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"No mientras yo esté aquí"
Y en ese momento recordé. Había pasado tanto tiempo desde que vine a este lugar. Me sentí ligera de nuevo, me llené de coraje y me limpié las lágrimas. El monstruo mostró sus dientes, apretándolos para mostrar su enojo, tomó impulso desde la enorme altura que había conseguido y procedió a comerme. En ese preciso instante, el portal se abrió de nuevo bajo mis pies, pero justo antes de que me llevara salté hacia atrás y esquivé al monstruo. Corrí hacia el depósito; saqué a las dos criaturas y las empujé hacia el portal. La niña me miró por última vez, extendiendo su mano como si tratara de alcanzarme, pero el portal se cerró. Mi trabajo estaba hecho, pero aún tenía que lidiar con esa cosa.
El monstruo comenzó a agitarse y por un momento parecía como si llorara también. Lentamente, se derretía en una sustancia negra. Se extendió hasta quedar debajo de mis pies. No entendía qué pasaba, hasta que lo sentí.
Dolía, asfixiaba, ardía...
Estaba entrando por mis pies, por mis venas, se expandía por todo mi cuerpo, aún lo escuchaba llorar; quería que parara. Mis lágrimas ya no eran transparentes y comencé a vomitar, hasta que quedé inconsciente.━━━━━━━━━▲━━━━━━━━━
- ¿Qué piensa, doc? -le pregunté a mi psicólogo.
- Mmm... Tal vez es tu subconsciente -respondió él-. Me habías contado que tu padre era alcohólico, y que cuando estabas pequeña murió por depresión, pero antes de eso siempre te insultaba y te echaba la culpa por la muerte de tu madre, y tenías que cuidar de tu hermano por tu cuenta. Tal vez sea tu subconsciente tratando de proteger a esa niña que sufría tanto. Lo diste todo con tal de que ya no sufrieras, porque sabes cómo se siente, porque esa eras tú.Miré por la ventana. Al otro lado de la calle, divisé a una joven muy linda paseando a un bebé en su coche. Ella me devolvió la mirada y me dirigió una sonrisa pura y llena de bondad.
- ¿Usted cree, doc?
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Shorties!
Historia CortaUna simple compilación de historias cortas. ¿Quién sabe? Un día puede que veas una historia de fantasía, otro día comedia y así. Todo estara basado en como me siento o cosas que pasan en mi vida. O tal vez... ¿Un sueño?