Entre la espada y la pared

◇El comienzo de una historia◇

Otro día cualquiera en mi ciudad, la misma rutina de siempre, levantarme a hacer mis cosas y prepararme para asistir al Instituto, aunque era lo mismo, no estaba harto de ello, me agrada ser puntual.
-¡Ryan, el desayuno está listo!
-¡enseguida bajo, mamá!
-Buenos días, hijo. Exclamó mi papá.
-¡Buenos días mi lindo hijo!
Mamá al verme siempre me abraza, besa mi cabeza y alborota mi cabello.
-¡mamá, recién termino de peinarme!
-¡Cariño, siéntate en la mesa, como ya he anunciado antes, el desayuno está listo!
-Solo apurate y sirve de una vez.- exclamó mi padre.
Mi padre es algo duro con mamá.
-Dejame ayudarte mamá.- me dirigí a la cocina a ayudarla a servir la comida.
-Gracias, cielo, no tienes que ayudarme Ry-chan.-
-¿Ry-chan?- volteé a ver a mi madre algo confuso.
-¡oh! ¡es que he empezado a ver anime shoujo y shonen, así  que decidí que desde hoy te llamaría asi! ¿no te parece lindo?-
Decía mi madre muy alegre.
Yo seguía algo confuso con mi madre pero al final asentí con que me llamara así.
Una vez servido el desayuno, mi madre se dirigió a la mesa a poner el plato frente a mi padre.
-Olvidalo, Madeleine, se me hace tarde, me voy.-
Seguido de estás palabras de mi papá, se puso de pie y se marchó hacia su trabajo.
Al irse papá pude notar como mamá se entristecia un poco por las palabras de papá.
Yo me acerqué  a ella y la abracé.
-No te preocupes por eso, mamá,  comamos juntos, anda.- le sonreí para que no se sintiera mal.
-Gracias, Ry-chan.- mi madre también me abraza mientras soba mi hombro.
-¡bueno, comamos, hijo!-
Dijo mi madre volviendo a recuperar su ánimo mientras se sentaba en la silla.
Empezamos a comer la especialidad de mamá por la mañana, panqueques de frutas con batido de moras.
Amo comer con mamá,  es muy divertida y animada. Aunque cuando está triste o afligida a mi me gusta animarla.
Luego de tomar el desayuno mamá se iría a su trabajo, es empresaria, aunque tiene un trabajo ocupado siempre tiene tiempo de sobra para dedicarse al hogar, es muy cariñosa, ¿pero que digo? ¡se va a hacer tarde para ir a la escuela!
-¡Gracias por el desayuno, mamá, me tengo que ir a clases, adios!-
Dije levantándome de la mesa y dirigiéndome hacia la puerta, cuando volteo veo a mi madre hacer una seña en particular... apuntando su mejilla con su dedo índice.
-Mama, ¿no estoy ya grande para eso?...
-¡Ry-chan, te olvidas de algo,  sabes que no te marcharás  hasta que lo hagas!-
¿es en serio? Esto me avergüenza un poco, rayos, sino no me dejara marcharme.
-mama...- hago mi último intento por salvarme...
-Ry-chan .- vuelve a apuntar su mejilla.
Un sonrojo leve se asoma por mis mejillas y me acerco a mamá, le doy un beso en la mejilla.
-ya me voy, mamá.- me alejo nuevamente.
-¡Ten un buen día, cariño!- se despide con su brazo alzado.
Salgo de la casa corriendo, no espere que se hiciera tan tarde, el Instituto queda a 5 minutos, debo apresurarme.
No soy conocido por mi buena suerte, mientras corría al doblar una esquina  lo último que recuerdo que sentí era dolor.
Me tropecé con alguien, mi cara quedó restregada, por el suelo, que gran forma de empezar el día.
-auuu.- me quejé mientras me levantaba.
-¿estás bien?- me pregunto una voz amable pero sería.
-s-si, lo siento, no fué mi inten...-
No acabe de terminar mi frase cuando el chico me interrumpió.
-a juzgar por tú uniforme,  vas al Instituto, ¿verdad?-
-¿eh? ¡oh, si! ¿tú también vas?-
-hoy es mi primer día, me dirigo hacia allá.-
-ehh, si gustas podemos irnos juntos, no me molestaría en absoluto.-
¿Que es esto? No suelo ser así de amable con alguien, excepto con mi madre claro.
¿pero con un hombre?

¡Hola, soy Fujoshi_Queen203! Y ésta es el primer capitulo de "Entre la espada y la pared", subiré dos capítulos a la semana, que serán los lunes y viernes, y si mi presupuesto lo permite subiré capítulos otros días también, bueno, eso es todo queridos lectores, espero que disfruten de la historia, ¡bye, bye!♡