Entre la espada y la pared

Un día no puede ser normal

– Claro, señora, ¿Qué tipo de favor necesita?

– La verdad es que necesito ir a hacer las compras para la cena y Ry-chan está dormido, me sentiría más segura si pudieras cuidar de él mientras vuelvo, ¿Te importaría?

– Sería un gusto, señora, seguro y no tarda en despertar y yo lo animaré en lo que usted llega, yo cuido de él, usted haga sus compras tranquila.

– Aaaaww, no puedo esperar el día en que te cases con mi hijo. ❤️

– jejeje, usted si que es tan carismática y divertida.

– Bueno, volveré en media hora, si necesitas algo como un traje de la sex shop o unos condones puedes llamar a mi número.

– Yo me aseguraré, gracias, señora.

– Está bien, ¡Adiós!

♠NARRA ADRIEN ♠

La señora Callaghan se marchó en su auto rumbo al supermercado, luego de que desapareciera de mi vista desde la ventana del segundo piso, escucho una voz.

–¿Ya se fué mamá?

– ¡Ryan, despertaste, bello durmiente, apenas iba a despertarte con un beso. ❤️

– ....... Ni... Se te... Ocurra.

– Jajaja, tranquilo, tu madre dijo que compraría algunas cosas para la cena, mientras, ¿Quieres hacer algo?

– De hecho ya que estamos a solas, quisiera contarte algo, espero recuerdes de qué se trata.

– En realidad no lo recuerdo, explícame qué sucede.

Ryan se incorporó sobre su cama y se encogió de piernas.

– Bueno, la noche anterior escuché a papá hablar por teléfono con alguien, la llamada fué extraña, hablaba sobre habérselo pasado muy bien y que sus excusas al llegar tarde a casa siempre le funcionaban, fué entonces que me escuchó y tuve que irme rápidamente a mi habitación.

– ¿Escuchaste algo más?

– No, después de eso contesté tu mensaje.

– Entiendo, bueno, si de verdad te interesa saber si tu padre oculta algo trata de vigilarlo un poco más, después podrás contarme y llegaremos a una conclusión.

– De acuerdo. – contestó Ryan –

El teléfono de la casa comenzó a sonar, Ryan y yo bajamos rápido a contestar.

–¿Diga?

– ¿Adrien? Soy Madeleine, ¿Ry-chan ya despertó?

– Sip, Está aquí conmigo.

– Oh, oh, ooooooh, por dios, perdona, ¿Los interrumpí? Espero estés siendo gentil con mi pequeño uke, no le des tan duro, es su primera vez.

– Maldición, ¡Mamá! ¡Estoy aquí y puedo oirte! ¡Deja ya de conspirar en contra mía!

– Mi pequeño uke, puede que la primera vez duela pero dile a Adrien que en mi cajón hay unos sobres con lubricante que compré especialmente para ustedes.

– ¡¿Estás escuchándome?!

– Llegaré en unos minutos más, pueden hacerlo donde gusten, sólo limpien su desastre, hehe~

♠NARRA RYAN♠

¡Es el colmo con mi madre! ¡Adrien no para de soltar carcajadas! ¡Hasta parece que se orinará de la risa!

– Descuide, señora, no haremos ningún desastre.

Adrien cuelga la llamada y se gira hacia mi.

– Tu madre realmente quiere que te...

– ¡Ni se te ocurra decirlo!

Adrien nuevamente se echó a reír.

– Jaja, bien, entonces, ¿Qué hacemos mientras llega tu madre?

– No lo sé, juguemos a algo o veamos alguna película.

– Lo de la película pinta muy bien, ¿Quieres ver una de terror?

– ¿No crees que ya tuve suficiente con lo que pasó hoy?

– Oh, cierto, jaja, lo olvidé, anda, no hará daño, ¿O quieres ver más Yaoi? Digo, tu madre está súper emocionada con eso.

– Vale, ya, ¿Qué película veremos?

– Veamos... ¡Esta! Viernes 13, anda que son más asesinatos que terror, estoy siendo generoso.

– Está bien, la pondré.

Puse la peli y nos sentamos en el sofá de la sala a verla mientras comíamos papas y bebíamos una soda.
Pasada un poco más de la media hora llega mi madre con sus compras.

– ¡Hola, chicos, ya llegué!

– Si que has tardado, mamá, ¿Sucedió algo?

– Nada en especial, la fila para pagar era algo larga, aparte había tráfico.

– No te preocupes, mamá.

Mi madre voltea a vernos poniendo una cara algo perversa mientras su mano estaba posada bajo su mentón.

– ¿Y bien?

– ¿Qué? ;-;

– ¿Lo hicieron?

– ¿Qué cosa?

– Yo sé que tú sabes.

– ¿De qué hablas?

– 👉👌

– Mamá...💧

– ¿Y bien? ¿Cómo lo hicieron? ¿Dónde lo hicieron? ¿Cuánto lo hicieron?

– ¡Mamááááá!

No puedo creer que me avergüence de esa manera y más frente a Adrien, no sé qué piensa él realmente.

– Bien, chicos, empezaré a preparar la cena, ustedes pueden seguir viendo su película.

– ¿Segura no necesita ayuda, señora?

– No, muchas gracias, Adrien.

– Está bien, vamos, Ryan.

Adrien y yo nos volvemos a sentar en el sofá y desde aquí podemos escuchar el ruido que se hace en la cocina por mi madre.

Pasados unos 6 minutos llega alguien, es mi padre...

Hola, queridos lectores (a)
Sé que he desaparecido un buen de tiempo por unos asuntos, incluso creí haberme decidido a ya no continuar con la historia, seguido pensaba en que mi historia es mala, pero intentaré darle un poco de emoción, sean cual sean las visualizaciones seguiré escribiendo, espero disfruten de esta historia, los quiero un montón. ❤️