Capítulo 6

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Sin Adam, sin Ethan, sin Louis... ¿Qué se supone que hiciera ahora? Que tedioso era estar sola. Ethan estaba con Blair, Adam con la estúpida de Eleonor y Louis... pues con su soledad era feliz.

Empuje fuertemente las puertas de la cafetería, seguramente habría pocas personas, pero nunca estaba de sobra llamar la atención, al menos no para mí.

Perfecto, No podía ser más perfecto. Adam sentado sobre la mesa sujetaba a su Barbie por la cintura mientras la devoraba por completo. Decidí ignorarlos, caminé hasta una de las últimas mesas, no estaba de humor para ver las asquerosidades que el 'Par de enamorados' hacían.

Saque mi celular ¡no tenía nada que hacer! A los cinco minutos me aburrí de los juegos precargados en mi móvil, así que saqué una hoja y un par de marcadores para comenzar a distraerme. Comencé a escribir en la hoja mi nombre una y otra vez, entre corazones, estrellas, flores y otras formas abstractas la hoja blanca comenzaba a llenarse.

-¿Pero qué...? — fue lo único que alcance a decir al momento que me arrebataron la hoja, haciéndome rallar la mesa.

-¿Qué es esto? — preguntó Louis mientras se sentaba frente a mi viendo la hoja que prácticamente había arrancado de mis manos.

-Primero, ¿qué demonios te ocurre? — era mi turno de usar la indiferencia —. En segundo ¿qué no era que no me querías cerca de ti? — fruncí el ceño al ver su rostro divertido —. Y tercero, no te importa — de la misma forma como lo había hecho él le arrebate la hoja.

-Nada, aun te quiero lejos de mí y no sé, puede que si me interese — contesto en orden cada una de mis preguntas.

-¿De verdad te interesa algo sobre mí? — pregunté bajando la hoja para después recargarme en la mesa.

-No — sonrió hipócritamente —. Pero al imbécil de Adam le enfurece verme cerca de ti — volteó sobre su hombro para ver hacia donde estaban los 'tortolos'.

-Oh vamos Louis — reí —. Deja de inventar escusas para estar cerca de mí — sonreí —. No las necesitas, sé que te gusto — le guiñe un ojo, no tardaría en explotar.

-¿Qué? — soltó una carcajada —. Por favor, solo quiero provocarlo y así tener un motivo para partirle la cara — tomó la hoja nuevamente para examinarla.

-A sí que quieres provocarlo... — repetí y él asintió —. Yo te ayudo — dije poniéndome de pie, caminé hacia él quien me miraba extrañado sin entender lo que planeaba. Lo tome de la mejilla y me acerque a él uniendo nuestros labios. Estos se mezclaban tan suavemente, tan dulcemente. Era increíble lo que provocaban en mí sus perfectos labios. Me separe lentamente sus ojos se abrieron, no podía mentirme. Lo disfrutaba. Sonreí al momento que nuestras miradas se conectaron, di un corto beso sobre sus labios antes de tomar mi bolsa para dirigirme hacia la salida de la cafetería.

Como era de esperarse, todas las miradas se posaban en nosotros, algunas me seguían a mí y otras seguían observando a Louis quien seguía sentado en la mesa. Sentía la fuerte mirada de Adam sobre mí, pero como hace unos instantes decidí seguir ignorándolo.

Volteé sobre mi hombro para ver hacia donde estaba Louis. Tomo la hoja con cierto enojo y también comenzó a caminar hacia la salida. No debía detenerme, si lo hacía tal vez me reclamaría y todo se iría a la basura.

Caminaba a toda velocidad por los pasillos, haciendo caso omiso a sus llamados. Tenía que salir lo antes posible de ahí, tenía que escapar de su camino ahora mismo.

Logre salir del edificio sana y salva, seguramente querría asesinarme por haberlo besado delante de otras personas. Volteé hacia atrás y cuando creí que se había cansado de seguirme lo vi salir corriendo por la puerta. Demonio. Los tacones me impedirían a toda costa huir. Sin embargo, lo intente comencé a correr por los jardines del campus. Corría todo lo que mis piernas me permitían, tal vez si corría por algún tiempo, se cansara y lo olvidara. Pero a quien engaño, ese hombre era uno de los mejores del equipo. Tardo menos de un minuto en alcanzarme, me tomo por la muñeca para tratar de detenerme y con un fuerte tirón me atrajo a su cuerpo, pero ante un estúpido movimiento mío terminamos en el piso. Termino tirado en el césped conmigo sobre él. Su ceño estaba fruncido y me miraba con enojo. Rápidamente me puse de pie para volver a huir, pero este me tomo del tobillo haciéndome frenar de golpe clavando uno de mis tacones en la tierra. Louis comenzó a reír al verme ante tal dilema, ahora yo furiosa movía con fuerza mi pie tratando de salvar mi zapato, pero era inútil. Tire con toda la fuerza posible logrando sacarlo, pero sin el tacón. Y debido a la fuerza que había utilizado termine cayendo nuevamente sobre él quien no paraba de reír.

Contigo Todo Es Diferente (Adaptada)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora