Cuando te perdí lloré , no lloré físicamente, lloré de verdad, de la manera que más duele... lloré con el alma.
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Camino descansado por este lugar tan sombrío, tan apagado, dejando el humo de este cigarrillo mezclarse con el viento del frío invierno. Localizo mi destino y apago el cigarro solo para no faltarte el respeto.
— Hola mi amor... — sonrío leyendo tu nombre en ese pedazo de piedra— Son... son tus favoritas— te hablo dejando el ramo de girasoles sobre el pasto.
Miro hacia el cielo, sintiendo el frío en mi rostro, sintiéndome así de nuevo, sintiendo este marchito invierno que solo me ha dejado con recuerdos de ti partida. Aquel día, en el hospital, dejé todas mis debilidades de lado por correr hasta tu encuentro, rogando porque no murieses... pero no fue suficiente. Al llegar, solo pude ver a tu madre en el pasillo, tendida en el suelo con nada mas que un llanto desgarrador. Y mi caso no fue diferente, minutos después tras tu partida, me encontré llorando dolorosamente abrazado a tu madre en los pasillos de aquel hospital.
Me sentía confundido, hasta que tu madre confesó que tu moriste de leucemia, no pudieron tratarla a tiempo debido a tu depresión y eso fue lo que te carcomio por completo esos últimos tres meses. Aún me pregunto, porque carajos no confiaste en mí? Ahora solo quiero pensar que no dijiste nada para no herirme, pero tal vez no sabías que tu sufrimiento también era mío. Me encuentro llorando por ti Yang Mi, una vez más sollozando en tu tumba con el alma en pedazos, porque aunque te prometí ser fuerte... Mi alma no puede aguantar tanto dolor.
Logro llegar a mi casa con la vista llena de agua, sin poder creer que ya no estás, y mientras lleno la tina te pido perdón, perdón por no ser suficiente, perdón por depender de ti, perdón por querer morir... Vacío el frasco de píldoras en mi boca sin dejar de llorar, sin dejar de sentirme débil. Y me sumerjo en la tina, con las pocas fuerzas que me quedan y espero a que estas malditas píldoras me duerman por completo.
Porque esto es lo que he querido hace meses, dormir, dormir y no despertar jamás, no si no es contigo...
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