Me acuesto sobre mi ataúd, ya es costumbre para este punto, no lo pienso mucho, escucho el sonido de la máquina, aquella que inyecta ese horrible veneno, me hace sentir cansado y nauseabundo todos los días, me hace que me piquen los ojos y sienta dolor en todo el cuerpo.
Pero también el mismo me sana, no me hace efecto toda vía o al menos no el letal, eh sentido como hace que mis huesos duelan y mi piel se llene de manchas, siento que no me perdona, el sonido de la máquina nunca para me intoxica, siento que necesito ir más rápido vivir a toda prisa y quizás así lo deje de oír,lo eh echo , eh tratado de correr de ese horrible sonido pero nunca desaparece si no lo traigo yo en mi bolsillo alguien más lo trae en su manos en su ante brazo , en las paredes la máquina sigue ahí sonando y me muestra los días antes de la dosis letal , pero no será hoy , hoy el veneno solo me ah debilitado hasta sentir que no puedo mover las piernas que mis ojos me pesan, que quizás ya sea mi hora, el ataúd se va cerrando frente a mi, trato de moverme de parar que lo cierren sobre mi pero no puedo mi cuerpo no me responde solo veo caer la oscuridad ante mi ....
Hasta que de la nada terminó en el cielo o en el infierno enfrentado a mis peores pesadillas o mis fantasias mas salvajes lo disfruto en serio ese breve momento en el que estoy muerto en donde parece que ya hice todo y solo queda la fantasía o la tortura, no hay nada más liberador , ah veces la orina detiene el veneno pero mi cuerpo la drena y al poco tiempo vuelvo a caer en el ataúd , pero siempre odio que la fantasía se acabe con ese !zummm ! ¡Zummm ! De la máquina todas las mañanas, .solo me recuerda que aún no muero que aún el veneno no ah decidió darme ese golpe fulminante y esa es la peor maldición para mí porque interrumpe mi descanso eterno
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Cuentos cortos por miguel 9513
Short Storyuna recopilación de historias e ideas que hago a diario , todas muy curiosas