Prólogo

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Ha pasado tiempo, desde que he estado sintiendo esta sensación, como si pudiera ser capaz de hacer algo más grande que yo.

"Oye ayúdame a mover este cuerpo ¿no Kayn?"

"Si, en un momento"

Tal como escucharon mi nombre es Kayn. Y antes de que piensen mal por estar moviendo un cadáver bueno, yo soy forense, en otras palabras examino muertos nada del otro mundo.

"Uf, ya está, gracias"

Este es mi compañero, su nombre es Madison. Un nombre raro de donde yo vengo si me lo preguntan. Con respecto de donde yo provengo bueno, solo les diré que hablamos español. No introduciré mucho a mi colega ya que, morirá pronto.

"Bueno te toca abrir las entretelas" dijo mi colega preparando sus guantes.

"Aquí voy" tomé el bisturí y comencé a abrir el tórax. Esta vez era una mujer. Mediana edad, pelo castaño, caucásica, sin tatuajes, de nombre Martha. Causa de muerte, tres puñaladas en el estómago.

"Bueno Martha. Se una buena chica y no te resistas" corte desde sus dos hombros hasta su plexo solar, y luego hacia abajo en dirección a la ingle.

"Cuidado con la cañería"

"Lose, lose, cuantas veces crees que echo esto...muy bien, listo"

En cuanto termine esa frase, un hombre con una gran gabardina entro muy ruidosamente a la sala seguido de una enfermera.

"Señor no puede estar aquí. ¡alguien seguridad!" la chica intentaba detener al hombre, pero solo conseguía ser ignorada y ser puesta a un lado.

"¡Donde esta! ¡donde esta!" el hombre reclamaba desesperado, y por su mirada diría que no estaba en sus cabales.

"Disculpe, ¿le puedo ayudar?" madison respondió a las exigencias del hombre con una calma que me sorprendió, yo por mi parte estaba muy tenso, estaba sosteniendo el bisturí firmemente. Algo me olía mal y no era Martha.

"Le dije, ¿Qué sí le puedo ayudar?" el hombre volteo con una mirada desenfocada.

"¡Ustedes malditos que le han hecho! ¡Martha mi Martha! ¡MONSTRUOS!"

"¡ENFERMERA LLAME RÁPIDO A UN GUARDIA!" Madison exclamo y el hombre se abalanzo sobre él. Durante el fragor de la escena escuche un traqueteo familiar. El hombre arremetió con su brazo derecho a madison varias veces, solo puede escuchar sus quejidos y se desmorono en el suelo.

"¡¡¡HAAAAAAAAA!!!" la tonta enfermera seguía ahí parada como una idiota, al menos su grito debe llamar la suficiente atención. Por otra parte, gabardina homicida estaba consolando al cadáver de la mujer. ¡Es un maldito lunático como mierda entro aquí, me cago en la seguridad pública de los hospitales y en todo lo que representan!

"Martha mi amor ya acabo todo shhh" estaba aterrado, tenía mis manos en el aire con el bisturí fuertemente agarrado. Por alguna, pero maravillosa razón no me había notado, tenía que alejarme o terminaría como Madison. Camine lentamente hacia atrás, pero la diosa fortuna siempre fue una maldita conmigo y choque con mi mesa de utensilios. 

"Mierda" musite, pero ya era demasiado tarde.

"¡TU!" el mal nacido me vio con ojos inyectados en sangre y sonó ese traqueteo familiar otra vez, era un maldito cúter.

"¡¡ALEJATE!!" movía mi bisturí erráticamente como un imbécil, sabía que no tenía oportunidad si esto se convertía en una lucha cuerpo a cuerpo, sabia boxear, pero no con jodidos cuchillos.

"¡¡TU, TU LE HICISTE ESTO A MI MARTHA¡¡"

"¡¡QUE TE HAGAS HACIA ATRÁS DESGRACIADO!!" se me estaba acercando, pero estábamos causando mucho alboroto, era cuestión de tiempo para que llegara seguridad. Con un poco de suerte, puede que salga de esta solo con un trauma y diabetes tipo dos.

"¡¡MUERE MONSTRUO!!" o eso pensé, el tipo se dejó ir hacia a mí.

Mi cuerpo ya tenso lo hizo aún más, grité de forma patética y moví el bisturí con toda mi fuerza hacia su rostro. Mi intento de plan era rebanarle los ojos, si esto llegaba a suceder. Es mejor dejar ciego a alguien en un intento de homicidio que intentar matarlo y pasar por un largo juicio.

Si tan solo no hubiera sido tan ingenuo. Mi arma paso limpiamente por su frente hacia su ojo derecho y siguió por toda su mejilla, luego me tomo del brazo sabía que debía hacer lo mismo para evitar el arma, pero apenas si podía pensar, cuando lo note ya tenía el cúter clavado en mí. Sentí un piquete en el estómago. Apreté los dientes hasta hacerlos rechinar cuando lo removió, solo para volverlo a insertar, ya no tenía fuerzas y dejé de luchar. Cuando sentí la tercera puñalada ya estaba en el suelo, podía oír varias pisadas acercándose, el maldito se estaba preparando para terminarme cuando de repente.

"¡¡¡TIRE EL ARMA Y ARROJESE AL PISO!!!" era seguridad, demasiado tarde imbéciles. Sentía como me desangraba muy rápido, intentaba realizar presión, pero apenas si tenía fuerzas.

"¡¡¿QUIEN?!!" apenas si pude ver como el tipo se giró a confrontar a seguridad.

"¡¡TIRE EL ARMA, AHORA!!" ¡dispárenle de una buena vez no van a matar a nadie que ya esté muerto, estamos en una maldita sala de autopsias! Eso pensaba mientras me aferraba a la vida, y mi vista se hacía cada vez más borrosa.

"¡¡QUE TIRES EL ARMA AHORA¡¡"

"¡¡NO, NO DEJARE QUE NADIE TOQUE A MI MARTHA!!" solo pude oír pisadas huecas, mi mente estaba a punto de desvanecerse, pero antes de eso. 

¡¡¡BANG, BANG, BANG¡¡¡

Estaba, estaba despierto, ya no sentía dolor y mi cuerpo apenas si lo sentía, no oía ni veía nada todo era una perpetua nada grisácea ante mí, me mire a mí mismo tenía la misma ropa cubierta de rojo de hace un momento, revise mi estómago, pero no tenía nada, absolutamente nada, ni siquiera mis propias cicatrices, algo estaba mal y estaba entrando en pánico.

"¡HOLA ¿HAY ALGUIEN AQUÍ?!" grite a la nada, pero no hubo respuesta, así que intente moverme de ahí, corrí por lo menos cinco minutos y me rendí era como estar en una caminadora eléctrica, sentía que no me movía en absoluto de donde estaba.

"Acaso, ¿estaré muerto?" dije en voz baja.

"Análisis completo, estado, apto," una voz que podría describir como femenina resonó de repente en todo el lugar.

"¡¿QUIEN ERES?! ¡¿DONDE ESTOY?! ¡¿QUE ESTA PASANDO?!" pregunte al aire mirando en todas direcciones buscando algo, lo que sea.

"sujeto de prueba número siete billones de gúgol treinta ocho tricentillones novecientos cincuenta y nueve bicentillones......" Perdí el hilo en esa cifra absurda, me asusté al principio, pero sea lo que fuese no creo que me responda nada si al menos no la dejo terminar; y así se la paso repitiendo cantidades ridículamente altas por al menos una hora o más, la verdad no sabría calcular el tiempo en este lugar, se siente que pasa muy rápido todo y al mismo tiempo no, es como si no avanzara. La voz seguía sin detenerse primero pensé que me volvería loco de tanta cifra, pero me acostumbre con el tiempo, aunque si lo hice en realidad. ¿Cuánto ha transcurrido desde que estoy aquí? no, no, no, ¿han sido horas? si, no días, talvez más, no concéntrate Kayn.

"Dos"

De un momento a otro la voz se detuvo en ese último número, me sentía inquieto, me puse alerta, ¿que estaba por pasar?

Cross-Verso:Mundo NinjaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora