quatre

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JaeHyun estaba recostado en su cama aburrido, aunque se había acostumbrado a su soledad.

Cuando el celular estaba vibrando, ignoró por unos segundos aquel aparato. No quería saber de nadie, sólo que se tratara de DoYoung.

El tono de celular estaba volviendo loco a JaeHyun. No soportaba el ruidoso y maniático tono de llamada que molestaba a JaeHyun.

Así que tomó su celular para ver de quién se tratara, cuando vio el nombre del pelinegro llamando por Hyun, contestó con un toque la llamada para DoYoung.

JaeHyun estaba llorando al acabar de hablar con DoYoung. Escuchar su voz lo había confortado que hasta lo extrañaba más de lo que deseaba.

Esperaba ansiosa mente adentró del departamento a que llegara el chico pelinegro de piel blanquezca.

JaeHyun no se quería imaginar que tantas cosas le podrían pasarle a DoYoung a la trayectoria a su departamento. Como si lo pudieran asaltar o que le vayan y le quieran hacerle otra barbaridad a su conejo.

Se asomaba por la puerta que da afuera a la calle a esperar si había rastro del pelinegro de su... Ahora se sentía estúpido, JaeHyun ya no sabía que era el ahora para DoYoung. Que va a pasar realmente con los dos desde que lo comience ahora ver a los ojos.

Que le dirá ahora, ¿todavía podrá usar apodos? o tendrá que guardarle un respeto. JaeHyun sintió una presencia que reconocía a lo lejos.

Los suspiros de DoYoung se escuchaban por toda la oscura y nublesca calle de su barrió. Se alegró y a la vez se deprimió por verlos después de unos largos meses en persona, cara a cara. La boca se le secaba de tan sólo mirarlo, no tenía ni idea de que decirle para que no se incomodara ninguno de los dos.

Como es de recordar, la sonrisa de DoYoung al llegar agitado por irse corriendo de la casa de su madre hasta los departamentos donde estos dos compartían hogar, era una gran alivió de JaeHyun. Tener esa sonrisa de goma que sólo le pueden a él sonreír lo ponía alegre que cualquier otra cosa que se pudiera tratar.

– Veo que no has comido. – Preguntó DoYoung mirando la polera enorme que traía el menor y si, JaeHyun había bajado demasiado de peso por no soportar las odiosas noches que no lo dejaban dormir por no tener a lado al mayor de cabellos oscuros que ahora lo tiene enfrente de él.

Y porque JaeHyun es pésimo para cocinar, y no soporta la comida de afueras. Prefiere la comida hecha por él mayor.

– Estuve en dieta, no es para tanto. – Bufó avergonzado el menor, también era tan malo en mentir.

DoYoung tomó la mano del menor llevándolo al ascensor del departamento con todo y sus cosas.

Al subir DoYoung se recargo en un extremo de las paredes del lugar pequeño, sus manos pasaron por sus oscuros cabellos. Seguía agitado aún, JaeHyun no podía dejar de ver a DoYoung en ese modo tan seductor que posaba.

Su lengua acalorada que salía de su boca haciendo tales facciones fuera sensuales. JaeHyun pasó saliva de lo incómodo y estorboso era mirar a DoYoung siendo tan sexy.

Llegaron a su pisó, como siempre JaeHyun mostraba su lado caballeroso a DoYoung ayudándolo a llevar sus maletas al departamento.

– JaeHyun... Yo quería... – Cuándo JaeHyun y DoYoung se encontraban en su amado hogar, el mayor no se contuvo y admitió su error.

– Yo... Soy el culpable de todo. No tú, tú no tienes que ver con mis celos odiosos. No puedo creer que puedas soportar a una persona tan tóxica como yo. No me mereces, tú mereces algo mejor que esta porquería.

JaeHyun fue directo a abrazar al de cabellos oscuros azotan dolo por detrás de la puerta.

– No digas tal estupidez DoYoung. Me has enseñado que no eres tal porquería, tu eres brillante un esplendor siendo como eres, tal vez tus celos son él problema pero se pueden arreglar. – JaeHyun de eso beso los labios rojizos de DoYoung después del largo período de estar uno separado del otro.

El entorno de los dos jóvenes adultos se convirtió cálido. Todo el departamento se comenzó a acalorar de amor de los 2 hombres. Ya ninguno de los dos sentía pendiente, soledad o problemas de insomnio.

– Recuerdas cuando dijiste aquella estupidez de que te ibas.

– Nunca me fui, regresé recuerdas. Tú me dijiste, este no es un adiós, baboso ♡.

Nuestros corazones que se conectaron uno por uno

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Nuestros corazones que se conectaron uno por uno

Nuestros corazones que laten el uno hacia el otro

Es en este momento que deseamos tener el mismo sueño

 Replay  (PM 01:27)

fin ♡.

don't say goodbye ━ jaedoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora