Capitulo 5

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Davina Kova

"entonces tú serás el guardián, espero no sepas mi secreto...no quiero perderte"

Cuando vi quienes eran los chicos que iban a ser los prefectos, me di la vuelta, estaba algo molesta por el hecho de que fuera el, ni siquiera dije nada, solo me di la vuelta y comence a caminar pero mi hermanastro me detuvo tomando mi brazo, lo voltee a ver desafiante y me solto  - ¿Qué haces? A ¿Dónde vas? – pregunto preocupado evidentemente por mi reaccion 

- A los dormitorios, ya vi lo que quería - dije sin más 

- Pero, hermana -

- Simplemente quería saber quiénes iban a ser –

- Davina, ¿Cómo amaneciste? Espero que podamos tener un momento para hablar – dijo Logan Zinguethe, tomando mi brazo – ya sabes no hemos tenido tiempo para nosotros –

- Yo no tengo nada que hablar contigo Logan –

- Pero yo contigo si – arrogante como siempre, el vampiro con aires de grandeza, siempre se ha creido que es lo mejor de este mundo, claramente es un hombre que lo elogiaron muchisimo, tiene un cuerpo trabajado, ojos verdes claro, un cabello ondulado castaño oscuro, un rostro pulido por dioses griegos pero un ego que hace que todo lo bello fisicamente descrito hagan que te den ganas de vomitar de solo saludarle. 

- Creo haber sido clara – dije al dirigirle la mirada llena de enojo

 - Si alguien ve tus ojos, van a creer que eres vampiro enseguida – susurro a mi oido con cautela 

- ¿Qué? – dije asustada y vi hacia los lados 

- Si, tus ojos se han vuelto rojos, necesitas sangre ¿no crees? – dijo burlon viendome 

- Ah... no será la tuya – dije con nervios zafando mi brazo de su agarre

- Ya te veré rogándome por la mía – arrogante 

- Tonterías – dije al reírme tenuemente y me retire de ahí rodando los ojos.

Cuando ya estaba en mi dormitorio entró mi hermano, recargándose en la pared me observaba y yo solo solte un suspiro viendo aun por la ventana, estaba sentada en el sillon y desvie la mirada a mi libro sin verlo no queria escuchar sus regaños ni sus consejos. 

- ¿estás de acuerdo con los guardias? – solto viendome serio 

- No... - dije sin animos 

- ¿Por qué? Es solo un humano, no tiene valor alguno –

- No entiendo, no puedo olvidar esa mirada – digo viendo por la ventana mientras solo veía como el sol bajaba por las montañas.

- Tienes que hacerlo y enfocarte en encontrar al príncipe pura sangre, sino tendrás que quedarte con ese Zinguethe –

- Lo sé, pero no me importa así pasen diez mil años diré que no lo he encontrado –

- El problema es que creo que no podrás hacer eso –

- ¿Qué? – me giro viéndolo con los ojos abiertos como platos, no puede decir que se me esta acabando mi tiempo es imposible.

- Acaba de llegar esto, no te lo había dado pero sí es importante –

- ¿Qué dice? –

- Toma – me da el papel, mientras que desdobló la carta con miedo.

"señorita Kova, tenemos que informarle que el tiempo se le está agotado, por orden de los Zinguethe y los Damocles usted debe casarse con el joven Logan Zinguethe, le queda solo 1 año, si no encuentra al pura sangre no le quedará opción"

- Tu padre me ha traicionado – dije molesta poniendo la carta a un lado de mi y viendo al piso

- ¿Qué? – se sorprendio por mis palabras 

- Aprobó que me retirarán mi petición – estaba furiosa.

- Hermana, no creo que pase algo malo –

- Eso es lo que espero, no quiero que Logan tome la sangre de los Kova, su madre mato a mi padre, luego mi madre, su supuesto suicidio, que en realidad fue ella –

- No puedes asegurar nada – dijo con seriedad mientras se hincaba tomando mi mano con cariño

- Si, entiendo, pero no puedo evitar el odio en mi – se me hacía nudo el estómago de enojo.

- Lo sé, pero no podemos hacer mucho, solo esforzarnos en encontrar al pura sangre –

- Sí, bueno vamos tenemos clase –

- Si –

- Crees que ya haya chicas de nuevo como el año pasado – dije con una leve sonrisa

- Si, vienen a verme todas – dijo con arrogancia mientras caminábamos hacia las puertas de nuestro dormitorio.

- Jajá, sigue soñando –

Cuando salimos, vi que todas las chicas estaban gritando el nombre de mi hermano, el de Logan, el de Dorian Schnelle, un chico de Grecia que era bastante atractivo, un cuerpo demasiado tonificado, ojos azul claro, labios bastante besables, me rio viendo que también Andrew Bolgobethy de Rusia estaba coqueteando con una que otra chica, negué con la cabeza y me encontré a mi primo, venía desde Suiza y ya tenia sus fans a pesar de ser su primer semestre, Matthew Linar, seguimos caminando por el pasillo para llegar a los salones, negué escuchando todos y cada uno de los comentarios, a todos los chicos de la clase nocturna los amaban las chicas de la clase celestial. Pero era demasiado entretenido como les gritaban cosas como "los amamos" "por favor sé mío" "eres perfecto" "te amo Dorian" era algo genial... ya que les agradaba que dijeran esas cosas pero no les gustaba demostrarlo, solo alguno que otro vanidoso las ilusionaba. Al salir yo vi que Dagen estaba ordenándose a las chicas que se acomodan en las orillas ya que estaban solo aventándose para gritarles a los chicos, en eso también voltee a ver a la otra guardiana quien era esa chica Ariana quien me miraba llena de rencor. En eso vi como alguien empujo de más y Dagen cayó al suelo, yo me acerque y le dije:

- ¿te encuentras bien? –

- Ah... si, gracias Kova –

- No me llames por mi apellido, llámame por mi nombre, te doy mi permiso – dije al darle la mano para ayudarle a pararse

- No puedo perder el respeto con alguien a quien apenas conozco, no quiero ser un igualado – contestó sin darme la mano y senti un hueco en el estómago ante su comentario tan frio

- No te preocupes Dagen -

- Lo recordaste... - sus ojos mostraron cierta ilusion 

- Si, ¿Cómo olvidar el nombre de una persona tan linda? –

- Gracias señorita, quiero decir Davina–

No te preocupes, adiós-

- Adiós –

- Estando en el salón de clases, vi cómo se ocultó el sol y luego Tara dijo:

- No sé ¿Por qué le hablas a ese humano? – acercándose a mi lado con brazos cruzados sobre el pecho

- Es solo un humano prima – replicó Matthew con los pies en la mesa y viéndome con una sonrisa sorna. – tengo hambre – agregó.

- El sol ha caído, ya es hora que el telón se levante para la noche de los vampiros – dije sin apartar la vista de la ventana y nuestros ojos se hicieron rojos, todos en el aula se veían con ciertas ganas de saciar su sed y yo me incluía entre ellos.

- Hm,hm como me encantan esas palabras hermana – añadió Tara sonriendo

- Lo sé, las noches nos pertenecen a nosotros los inmortales - finalizó viendo hacia el atardecer y sonrio con malicia viendo en el reflejo mis ojos rojo brillante. 

MUCHAS GRACIAS A TODOS POR LEERME DEJEN SUS COMENTARIOS ESTA HISTORIA SIGUE GRACIAS!!! <3


Blood DinastyDonde viven las historias. Descúbrelo ahora