Capitulo 22

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Davina Kova


No dije nada en todo el camino, estaba seria viendo el paisaje solamente, pensando en esos ojos claros, me había dolido tanto el pecho, suspiro y cuando llegamos a la mansión, mi padrastro me solicito a mí junto con los otros en el estudio, camine primero hacia dentro viéndolo sentado frente al escritorio y solo me veía con una mirada molesta, levante la mirada restante y solo solté un suspiro cruzando los brazos. - ¿Para qué me querías ver? – fui cortante
- Voy a ser claro contigo Davina–
- ¿Qué hice esta vez? – me rio viéndolo y el golpea la madera del escritorio pero no me intimido, no demostraría debilidad.
- No me interrumpas por favor. Quiero saber ¿Por qué el tal Dagen Cavalier esta tan al pendiente de ti? – abri los ojos como platos cuando saco el tema y solo vi a un lado bajando los brazos
- Es mi amigo, además de que es el prefecto de la academia – le quito importancia
- No pregunte que era de ti o que hacia ¿Por qué está interesado en ti? También ¿Por qué razones estaba saliendo con tu prima Aqua? – aprieto los labios, estuvo investigándome, sabía que estaba siendo espiada.
- Por lo mismo que yo... - Aqua iba a decir que le gustaba pero yo la interrumpí levantando aún más la voz firme.
- Yo asumo toda culpa, no sabemos las razones de los actos del humano, pero si hubo algún mal acto, me hago culpable, y quiero recibir el castigo de los involucrados – dije yo, llena de seriedad y molesta, tenía el presentimiento que lloraría, pero lo resistí.
- Entiendo – dijo mi padrastro serio viendo a mi prima y luego a mí, sentado en el escritorio
bien entonces ¿Cuál es el castigo? – lo vi arrogante levantándole la mirada
yo digo que comparta su sangre con nosotros – dijo Anna su novia de mi padrastro al acercarse por detrás de él.
- Qué mal por ti Anna, mi sangre no es bebida por nadie – le dije con enojo, odiaba que se metiera en lo que no le importaba
- Bueno siempre hay una primera vez – me sonrió con arrogancia y entrecerré los ojos "imbécil"
- Anna, por favor, guarda silencio – dijo Gregory irritado – no hare eso, va en contra de mis principios; pero bueno, tu castigo será que no podrás volver a salir de la mansión, ni siquiera a cazar, hasta el día que tengas que volver a la academia – dijo sin más y solo asentí
- Entiendo –
- No tomaras más que las píldoras – seguía indicándome restricciones pero no le daría la satisfacción de que me estaba afectando lo que decía.
- Muy bien, así será entonces – digo con seriedad
- Si puedes irte – movió la mano con un ademan, pero no era su sirviente
- No pensaba preguntarte – me rio dirigiéndome a la puerta. Cuando camine a la puerta Aqua me iba a decir algo pero solo la vi a los ojos y se guardó sus palabras.
- Estando en mi habitación, mis cosas ya estaban ahí, yo me recosté en la gran cama que tenía una colcha de terciopelo con otras telas tersas como esa. Estaba tan cómoda, en eso tocaron la puerta, me levante y dije "ADELANTE" camine a la mesa donde me senté en un sillón de piel fina, en eso vi que era Aqua yo me quede sentada tomando una de las piezas de ajedrez sin verla pregunte - ¿Qué quieres aquí? –
-- Solo vine para hablar – dijo con amabilidad sentándose en el otro sillón tomando una ficha para seguir el juego
- No tengo nada que hablar contigo – susurro quitando su peón que me había puesto en frente
- Pero yo contigo si – dijo molesta – quiero que me disculpes, por mi culpa ahora tienes que cargar con un castigo que me pertenecía también – apretó la ficha que iba a mover y vi como en el mármol cayo una gota mientras ponía una ficha, la torre.
- Por favor, no trates de justificarte, ya se hizo y no me voy a retractar, de hecho si me hubiese dicho que no volviera a la academia creo tampoco me hubiera opuesto – digo con sinceridad moviendo otra ficha, mi rey.
- Pero si en realidad lo quieres, ¿Por qué harías eso? – susurra mientras mueve su caballo.
- Entre más cerca este de él, mas es la tentación que tengo por morder su cuello – digo firme retirando su caballo
- Entiendo – quita mi torre.
- No, no entiendes, a lo que me refiero es que lo amo, no tienes una idea del cuanto siento por él – estaba molesta, destruí la ficha que me faltaba para hacer jaque mate, la vi a los ojos y comprendió mi enojo, le afronte las cosas de una manera fuerte, en eso sentí como el vidrio de la ventana se partió
- No puedo decir nada entonces, lo siento, con permiso que pases buena noche Davina – dijo levantándose y viéndome
- Solo vete – indique señalando la puerta con fastidio, no quería seguir con esto. Cuando ella se fue me quede sentada, no podía pensar bien, estaba triste, no quería nada, nada simplemente quería la muerte, el problema era que eso jamás iba a pasar.

Blood DinastyDonde viven las historias. Descúbrelo ahora