A tu lado

2 0 0
                                    

En medio de la noche con la luna en su punto mas alto, justo donde estas dos almas se encontraron con anterioridad, ahí Anna encontró a la joven Amelia llorando por razones que no podía entender en ese momento, pensó en acercarse para hacer algo por detener su llanto pero no pudo pensar en nada, solo pudo observar mientras las lagrimas recorrían su cara, cuando se decidió a intentar hablar con Amelia esta la vio, al ver a esta invitada no deseada trato de dejar a un lado su llanto para secarse las lagrimas y hablar, pero no pudo lograr su cometido, incluso entre lagrimas y con una voz totalmente temblorosa dijo:

-¿Que quieres?

-Nada, solo pasaba de casualidad

-Pues entonces vete, no tengo ganas de ver tu cara

-No quiero, quiero ayudarte si estas pasando por un momento doloroso, así que...

-¿Que puede hacer alguien como tu?

En ese momento Anna se sintió totalmente impotente ante tal situación, pensando como poder ayudar recordó, cuando dos personas aparecen en escena para complicar la situación

-Parece que sigues siendo una llorona sin remedio

En medio de su llanto la cara de Amelia se torno molesta y disgustada por la simple presencia de aquellas dos personas, aunque no entendiendo de todo la situación Anna pregunta de quienes se tratan estos invitados, a lo cual ellos responden:

-Gusto en conocerte, yo soy Saul y ella es Janeth, somos las hermanas de esta pequeña llorona

-Siento si es descortés, pero ¿Saul no es nombre de carácter masculino?

-Puede que sea verdad, pero es el nombre que fue puesto en mi por mis amados padres, trata de no prestarle mucha atención

-¿Por que están aquí?

-Para ver un espectáculo sin precedentes

-Creo que es hora de irnos-Dice Janeth con voz provocativa 

-Cierto, por poco lo olvido, te deseo lo mejor en tu matrimonio

-Parecen algo únicos en cierto sentido-Agrega Anna después de la partida de aquellos dos

-Porque siempre tienes que estar ahí para enterarte de mi vida privada y soy tratada como una niña por mi familia-Con un tono muy irritado por parte de Amelia mientras pone fin a su llanto

-No es mi intención, solo quiero ser mas cercana, quiero entender lo que guardas en tu corazón

-No me hagas reír, no somos niñas que creen que todo se soluciona hablando, así no funciona el mundo

-Pero, no es mejor ver el mundo de esa forma

-Creo que cierta persona creció en un ambiente muy acogedor y sin tener la mas mínima idea de la verdad que oculta este mundo

-¿Por que...?

-Si tu insistes tanto, tendré que dejártelo en claro, no quiero nada contigo, ni tu compasión ni tu amistad y mucho menos seguir tratando con tu presencia

-¿Por que te estas mintiendo a ti misma, por que no dejas de alejar a todo aquel que intenta acercase a ti?

-Eso no es de tu interés

Nuevamente Anna solo empeoro las cosas para lograr su cometido, alejando cada vez mas a la que en ese entonces no sabia lo estrecho de su relación, aunque mas que eso, había algo mas que ocupaba su mente, las palabras de Saul "Te deseo lo mejor en tu matrimonio", si eran ciertas esas palabras, las lagrimas de Amelia pueden ser ocasionadas por ese compromiso que probablemente no fue hecho con su consentimiento, una vez pasado algunos días sin saber nada de Amelia, Anna haciendo todo lo posible para encontrarla sin tener éxito, ocasionalmente logra enterarse del rumor por parte de Verónica, el cual menciona que Amelia dejara la escuela para irse al extranjero para cumplir su papel como pareja para unir a su familia con otra de un prestigio incluso mayor que la suya, incluso si solo eran rumores, era todo lo que tenia, aunque parecía imposible contactar directamente con ella, un día recibe una carta para un encuentro junto al estanque de la escuela al finalizar las clases, no ponía quien la escribía pero para Anna era una luz de esperanza, una vez ahí con su corazón a punto de detenerse vio a una persona totalmente inesperada, era Amelia con una cara algo decepcionada:

-Así que para eso me dijeron que viniera, esas entrometida

-Perdón, de que estas hablando

-Mis molestas hermanas mencionaron que si venia aquí, tendría una oportunidad de cancelar este compromiso, fui ingenua al creer semejantes palabras, sera mejor que prepare mis cosas para el viaje

-Escucha lo que tengo que decir, por favor-Casi gritando con un todo desesperado

-Parece que alguien como tu no aprende después de tanto tiempo que no tiene nada que ver aquí

Al oír esas palabras Anna no pudo hacer nada mas que abrazar con fuerza a Amelia:

-Suéltame, o llamare a alguien

-Perdón, esto es todo lo que puedo hacer por ti

-Déjame ir, de que estas hablando

-No tienes que hacer todo por tu cuenta, esta bien apoyarse en otras personas, esta bien llorar cuando duele

Para la sorpresa de la desesperada Anna, esta quedo impactada por ver el rostro indefenso de Amelia que parecía estar a punto de llorar:

-Por favor confía en mi, yo estaré a tu lado cuando me necesites

-En serio, eres una gran tonta e infantil en todos los sentidos

-No tienes que ir tan lejos...

Justo en medio de esa conversación Amelia empezó a soltar lagrimas a la par que se reía a carcajadas por todo lo que estaba pasando, lo cual hizo que el corazón de Anna se quedara tranquilo por ver esa hermosa sonrisa, viendo a lo lejos se encontraba la madre de Amelia que había arreglado todo:

-Espero que esto te ayude a recuperar esa sonrisa que perdiste hace mucho tiempo




Dos caminos un destinoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora