27 Junio, Seúl, Corea.
El hombre iba a quedarse y observar mientras Baekhyun se calcinaba igual que su café negro.
Baekhyun alzó la mirada de su menú y, cruzando el pequeño comedor, le vio allí sentado, ni a seis metros de distancia. Era el hombre de sus sueños -o mejor dicho, de sus visiones. Técnicamente, sólo era una visión. Se lo repetía una y otra vez. Baekhyun estallaba en llamas mientras él lo observaba. Sonriéndole.
—¿Ves algo que te guste? —Preguntó Luhan, el único camarero de servicio en el comedor.
Sólo llevaba trabajando en el Velvet's Diner un par de meses, pero había algo en Luhan que hacía que Baekhyun confiara en el hombre lo bastante como para compartir cosas que ninguna otra persona viva sabía, incluyendo las visiones de Baekhyun sobre su propia muerte.
—El cocinero tiene el día libre, así que todo lo que tenemos es estofado, pollo asado y carne asada. Elige tu porción.
Al otro lado de Baekhyun , su compañera de comedor, la señorita Irene, se alzaba sobre sus botas de vinilo rojo. Sus ancianos hombros apenas sobrepasaban la mesa. Sus agarrotadas manos agarraban la lámina del menú, la cual se sacudía tanto que Baekhyun no estaba segura de cómo podía leerlo sin que se moviera más lentamente.
—¿Qué tal está el estofado? —Preguntó la señorita Irene.
Luhan era una bajito veinteañero, con un cuerpo de muerte y un cerebro a juego. Qué estaba haciendo sirviendo mesas en Seúl y viviendo en su coche, era un total misterio para Baekhyun -uno que Luhan se negaba a resolver sin importar cuántas veces se lo preguntara. Le había ofrecido a Luhan quedarse con él hasta que encontrara un lugar, pero Luhan dijo que no traería problemas a los pies de la puerta de Baekhyun cuando obviamente ya tenía bastantes con los suyos propios.
Luhan se inclinó hasta que los mechones de su cabello rubio platino amenazaron con quitarle un ojo a la señorita Irene.
—Se salvaría de comer la res atropellada hace dos días, lo cual es lo que supongo que está usando Ji-sub para hacer el estofado. Se marchó antes de que empezara a preguntar sobre ello. Es un hombre escurridizo.
La señorita Irene palideció un poco.
—Definitivamente el estofado no. Tomaré la carne asada.
Luhan hizo un guiño y lo escribió en su libreta de apuntar las órdenes.
—¿Qué hay de ti, Baekhyun ? ¿Qué puedo traerte hoy?
Baekhyun intentó centrarse en su menú mientras lo sostenía en alto para escudar su rostro de modo que el Hombre de la Visión no pudiera verlo. Sus manos temblaban, haciendo que las palabras le resultaran borrosas. Ya estaba al borde del pánico. Si él lo pillaba observándolo, estaba seguro de que sería su completa perdición.
Baekhyun quería gritar a Luhan que lanzara la cafetera de café humeante en su regazo y huyera. En vez de eso, luchó contra su creciente pánico por una oportunidad de aprender algo más acerca del hombre con la esperanza de escapar de la visión.
Se hundió en su asiento e intentó fingir que todo estaba bien, lo cual hacía de maravilla. Baekhyun tenía un montón de práctica en fingir que todo estaba bien.
—No estoy seguro —dijo Baekhyun para obtener más tiempo, esperando que sus manos dejaran de temblar con tanta fuerza para que pudiera leer el menú.
Contra su mejor juicio, hizo el menú a un lado de modo que pudiera echar un rápido vistazo. Quizás se había imaginado que era él.
No. Era el Hombre de la Visión. En carne y hueso.
YOU ARE READING
ARDIENDO VIVO (CHANBAEK)
RandomEllos son los Centinelas... Tres razas descendientes de antiguos Guardianes de la Humanidad, cada una posee habilidades únicas en su batalla por proteger la humanidad contra sus eternos enemigos-- Los Synestryn. Ahora, un guerrero debe luchar contr...