Capítulo 3

1.4K 93 16
                                    




POV JULIANA:

Me encontraba en mi habitación luego de un largo día, hoy había trabajado desde muy temprano aun con los regaños de mi mamá encima, ya que ella sigue teniendo esa idea de que yo lo que debo hacer es ir a la escuela, pero no puedo quedarme de brazos cruzados cuando la veo a ella trabajar para mantenernos y a Valentina enviarnos el resto de dinero que nos hace falta, ya era momento de que organizara mi vida poco a poco y lo principal era empezar a trabajar.

Ayer hable con Val luego de casi tres semanas sin saber nada de ella, no puedo explicar todo lo que causa en mi vida con solo una llamada, pude haber tenido un día del asco pero el simple hecho de saber sobre ella o escuchar su voz hace que mi día gris y oscuro se convierta en uno de color, es como ese sentimiento que te produce tomar café por las mañanas o un helado luego de un día caluroso.

Mamá no sabe sobre nuestras llamadas por qué quedamos en no tener ninguna clase de comunicación hasta que todo fuera seguro, claro que Val se negó rotundamente a esto debido a que no podría ayudarnos de ninguna forma por lo que llegamos al acuerdo de que Panchito se encargaría del dinero y de mantenerme informada sobre cómo estaba Valentina y a Val sobre cómo me encontraba yo, duramos así como los primeros días pero no me bastaba con la información que me daba Panchito así que de alguna forma logre conseguir un celular prestado para marcarle a Val.



Flashback



-¿Bueno? – escuche su voz y una sonrisa se implantó en mi cara inmediatamente - ¿Quién habla? Si no me dice ahora cortare la llamada – reí ante aquella amenaza – estoy hablando en serio.

-Val soy yo.

-¿Juliana? – juro que casi pude escuchar la sonrisa que hizo al pronunciar mi nombre, muy parecida a la que yo estaba teniendo justo ahora.

-No, habla Lucho – solté la risa que me aguante para poder decirlo.

-Muy graciosa Juliana – la escuche reír – pero eres una tonta, no puedes llamarme de la nada y alterar todos mis sentidos sin previo aviso – suspire, como extrañaba que Val me digiera cosas así.

-¿Preferías que le dijera a Panchito primero? – Sonreí – es muy lindo escucharte de nuevo – susurre.

-Por supuesto, así me preparaba mentalmente para controlar mis emociones al escucharte – la escuche reír, era el sonido más lindo que existía, mejor que el sentimiento de escuchar la canción de tu artista favorito por primera vez – yo también extrañaba tu voz y estoy muy feliz ahora gracias a ti – sonreí como idiota – espera un momento, ¿Cómo es posible que me estés llamando?

-Digamos que me escape y conseguí un móvil en alquiler – sonreí – necesitaba saber de ti, ¿Cómo estás? ¿Cómo va todo con la universidad y tu familia? ¿Lucho te dejo en paz? ¿Cómo te sientes con la restricción del alcohol?

-¿No te faltaron más preguntas? – la escuche soltar una risita – estoy muy bien ahora que te estoy escuchando, las cosas en la universidad están igual, con mi familia seguimos teniendo muy poca comunicación entre nosotros – suspiro, las ganas que tenía por abrazarla y decirle que todo estaría bien no me entraban en el cuerpo – Lucho ha mantenido las distancias pero no pierde ninguna oportunidad para seguir fastidiándome y te prometí dejar el alcohol así que con eso si voy muy bien aunque me ha costado mucho – sonreí por esto último, en verdad me hacía sentir bien que Val estuviera dejando el alcohol, sé que eso podría tomarle mucho trabajo pero confió y estoy segura que tiene toda la fuerza de voluntad necesaria y el autocontrol para dejarlo.

I lied (Juliantina)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora