Promises | Meanie

02

 So come and get your everything, tonight.

Diez meses habían pasado desde la partida de Wonwoo. Y todo transcurrió
como debía ser, Mingyu lo superó eventualmente. Con la llegada de él, el
amor de su vida.

Le sonrió al verlo tan feliz en esa mañana. Sólo tenían un mes juntos, pero lo amó antes de siquiera conocerlo.

—¿Quién iba a decir que después de quedar tan destrozado tú serías capaz de enseñarme a amar de nuevo? —suspiró—Bueno, creo que es tiempo de que lo sepa, ¿no crees?

Tomando el sobre salió de su apartamento para dejarlo en el correo.
Esperaba que él tomara bien esta noticia, quería que Wonwoo supiera que había encontrado el amor nuevamente y esta vez era correspondido.

Múnich, Alemania.

—Señor Jeon, llegó un sobre para usted.

Wonwoo no levantó la vista de sus planos, solo asintió.

—Gracias, Chan. Déjalo en el escritorio.

El chico se acercó y lo dejó encima del mueble para después retirarse.

Estaban en preparación para construir un nuevo edificio, así que estaba a
tope con el trabajo. Las horas volaron cuando finalmente su estómago le
exigió un descanso y una comida.

Tomó el teléfono pidiéndole a Chan, su asistente, que le ordenara algo de
comer. En lo que llegaba su comida se dispuso a seguir con su trabajo hasta
que tocaron la puerta, era Chan con su comida.

—Ponla en el escritorio, por favor. Y espero que también hayas traído algo
para que tú comas.

—Claro, señor Jeon. Pero, si me lo permite lo comeré mientras termino mi
trabajo. No quiero terminar tan tarde hoy.

Asintiendo le permitió a su asistente que continuara con su trabajo. Se
alejó del restirador dejando esos planos por la paz, al menos hasta que
terminara de comer.

Se sentó en la silla del escritorio, abriendo la bolsa preguntándose qué le
habrá traído esta vez Chan para comer. Y cuando lo descubrió sintió una
punzada en el corazón.

Ramen.

La última vez que comió ramen fue en la casa de Mingyu. Sonrió al
recordarlo, esperaba que fuera igual de bueno.

Mientras comía recordó el sobre que había llegado hace rato y lo acercó
para abrirlo. Viendo la etiqueta vio que venía de Corea... No traía nombre
del remitente. Solo en letras rojas un gran "CONFIDENCIAL". Que extraño...

Terminó su ramen y tiró toda la basura. Se dispuso a abrir el sobre, tenía
curiosidad al respecto.

Dentro del sobre se encontraban tres hojas y un sobre más pequeño, del
tamaño de una fotografía. Tomó la primera hoja y se dio cuenta que era una carta, así que comenzó a leerla.

Querido Wonwoo:

Espero te esté yendo de maravilla en tu nueva vida. Yo no podría estar 
mejor, y todo es gracias a ti.

El día que te fuiste sufrí el más horrible dolor y he de decirte que tardé en superarlo, pero eventualmente lo hice.

Y fue cuando lo conocí o al menos sabía que iba a llegar a mí. La espera me hizo darme cuenta que no podría odiarte por dejarme, no fue culpa tuya sino de las circunstancias. Aun así, soy feliz porque con tu partida volví a
amar y esta vez soy correspondido. Sé que él me ama, aunque todavía no me lo diga, sueño con el día en que lo oiga de su adorable boquita.