Meramente Instinto『 Omegaverse 』

『 𝑬𝒙𝒕𝒓𝒂 𝑰𝑰 』

El ruido de la motocicleta era odioso, aún para Craig que, era quien la manejaba en dirección al lugar que tenía que llevar a quien se aferraba a él y no dudaba siquiera en frotarse contra su espalda, como una forma de pedirle silenciosamente que expulsara sus feromonas para lograr tranquilizarse antes de que llegaran a su destino: ex Laboratorio Genético de South Park; actualmente, Laboratorio especializado en tratar las dolencias y fallos de las categorías existentes. 

Craig estaba tranquilo luego de mucho tiempo, y es que, de manera involuntaria, cuando Kyle y Stan contaron su situación al grupo hacía más de dos meses, no pudo quedarse quieto y buscó la forma en que por lo menos el embarazado pudiera tener calma en esas circunstancias donde no podía siquiera alterarse; sabía bien que no era su problema, pero eso no pareció importar cuando se enfrentó con la gorda pelirroja para sacar las cosas de Kyle al ayudar a Stan, ni aún cuando ésta en una medida desesperada llamó a la policía para sacarlos de la casa. Kyle había decidido irse a vivir con Stan, y por suerte, la familia de éste –más bien, lo que restaba-, lo aceptaron con gusto y agradecieron enormemente que él fuera el Omega del primogénito Marsh, porque era el único que podía hacerlo entrar en razón; también logró que ingresara a un centro de rehabilitación para tratar su alcoholismo, aunque eso también se debía a la pequeña que crecía en el vientre del Omega pelirrojo. 

Detuvo el vehículo en frente un gran edificio blanco, fuera de la ciudad, en el que estaba permitido estacionarse, en el que, si no se tenía conocimiento, perfectamente podría ser confundido por un hospital cualquiera, y quizás lo era, aunque realmente se especializaba en otra área de la salud, experimentos en su mayoría. Esperó a que Tweek se bajara, y él, se quedó ahí, observando cómo se quitaba el casco y sus rebeldes cabellos se hacían más rebeldes de lo que ya eran al estar libres, y le daban un gracioso aspecto de recién despertarse; escuchó claramente como el rubio se quejó por esa situación y la risa nasal no se hizo esperar.

— ¿A qué hora terminará tu sesión?— acabó por preguntar, intentando ignorar el escalofrío que tuvo en el cuerpo cuando Tweek le había dado una mirada filosa como advertencia.

— Dentro de dos horas, más o menos— dijo, dejando el casco entre sus piernas, teniendo que sacar su celular para usarlo como espejo, porque se negaba a entrar con esas fachas con el psiquiatra.

— ¿Tan guapo es tu doctor que te empeñas en arreglarte?

— ¿Celoso?

— Para nada— Craig se encogió de hombros, teniendo que apagar el motor, porque ya estaba creyendo que la conversación se extendería más de lo esperado, y sólo era una corazonada.

— Eres tan fácil de leer, Tucker.

— ¿Oráculo estará aquí?

— Lo sabía— se rió Tweek, ocasionando que Craig desviara la mirada y se relamiera los labios, teniendo que sacarse el casco de la cabeza, porque por culpa de su reciente vergüenza y otro tipos de emociones, la pantalla se había empañado, delatándolo sin esperarlo— si, ella estará aquí, pero descuida, no parece tener interés en mí, al menos no en un sentido romántico.

— Tu ciclo es irregular... y has tenido suerte que siempre te llegara en nuestro departamento.

— Oh, vamos— suspiró, acomodándose el casco bajo el brazo tras haber guardado su celular en su bolsillo y haberse asegurado que su cabello estuviera más manejado— tengo mis supresores en tabletas y una inyección si es que llegara a ocurrir algo de urgencia, pese a mi categoría no soy ningún debilucho, perfectamente puedo volarle los dientes a alguien de un puñetazo sí es que llegan a propasarse. Además, como dijiste, es irregular, puede que suceda, como puede que no.