21 [Sebastian]

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–¡OYE!–grite fuerte

Las luces comenzaron a parpadear y la música se volvió más movida, la gente se golpeaba entre sí, debido a sus movimientos y con ello a mi tambien

Sebastian se perdió entre el mar de personas, pero pude alcanzar a ver como salía, en la salida de emergencia

Tomé mi celular y le mande un mensaje a Taylor, que se preparará.

Con todo el esfuerzo que hice para evitar estar todo golpeado, pude salir. La brisa de la madrugada me golpeó y se sintió bien, me sentí tranquilo.

Aunque no por mucho, aún tenía que solucionar este problema.

Comencé a caminar hasta que vi su espalda, sabía que era el. Camine más rápido y le tome fuertemente del hombro, haciéndolo voltear.

–¿Que le sucede?–era un joven

–Lo siento–me disculpe rápidamente quitando mi mano de su hombre–Lo confundí con alguien más.

El joven me miro feo y vocifero algo para si mismo, negó con su cabeza y se fue.

¿Como pude dejarme engañar tan fácil?

Grey, Sebastian esta en la cárcel, y el no saldrá por un largo tiempo...

Se pronto mi celular sonó, vi que era Taylor.

–Señor, tengo a la senorita Steele

–Esta bien, pasa por mi–respondi–Estoy atrás de la disco.

Colgué y en el poco tiempo que transcurrió, pude notar que un auto de color negro con ventanas polarizadas estaba cerca de mi.

Cuando Taylor estuvo donde yo, subí rápidamente en los asientos traseros.

–¿Señor sucede algo? –preguntó el seriamente

–Arranca, hay un auto siguiendome–respondí mientras veía a Ana inconsciente por el alcohol

Taylor arranco rápidamente, y yo volteaba a ver si nos seguían.

Efectivamente, el auto negro seguia siguiendonos.

–Señor, ¿lo llevó...? –preguntó Taylor

–Vamos a tener que perderlo.

Seguimos por las calles más transitadas, pero era inevitable. El auto seguía atrás.

–Es imposible perderlo–dijo Taylor

–Aún podemos hacerlo, pasa por la calle que cruza los antros, hay que volver por donde venimos.

Taylor manejo de nuevo de regreso, no respetaba los señalamientos, mi plan era que nos parara algún oficial y así poder perder al chistosito que nos seguía.

Hasta que Taylor se pasó el alto, escuché la sirena de los policías.

Mi plan había funcionado. Nos detuvimos en una calle poco transitada, específicamente del lado izquierdo, vi que el auto negro se detuvo unas cuadras atrás.

El oficial le hizo preguntas a Taylor, yo seguía observando el auto.

Taylor se bajó del coche y el auto avanzó, lentamente pasó por la calle y pude verlo.

Sebastián viéndome con unos lentes oscuros, no mostraba ninguna emoción pero intérprete lo que pensaba en ese momento...

Tarde, pero lo pagaras.

La Bailarina y El Dominante {1} (TERMINADA)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora