6. Platicas efímeras.

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Me hablaste.

Tenías una larga e infinita fila de personas detrás de ti desde el momento que pisaste este lugar, no obstante me elegiste a mí.

Me hiciste sentir especial.

Y no solo fue una vez.

Hiciste una bella costumbre, una costumbre que me deja impaciente, me deja esperando su llegada, roba mis pensamientos.

Tú me robas los pensamientos.

Siempre hablamos de cosas sin sentido, conspiraciones, posibles finales de; películas, Series, libros y comics, y algunas veces de temas de importancia.

Dios.

Me cautivas  tanto y tienes muchas cosas para hablar, que cuando  tenemos nuestra costumbre, las pláticas se hacen efímeras.

Casi puedo sentir los minutos pasar como segundos.

¿Sabes?

Dicen que lo bueno es rápido y si no lo sabes apreciar se pierde en tus pensamientos.

No quiero perder ni un segundo  de esta sensación.

No quiero perderte a ti.

Memorias de un chico enamorado © ✔️Donde viven las historias. Descúbrelo ahora