Diario De Una Oveja Arcoiris

VII. El noviazgo

VII. El noviazgo

Comenzare diciendo que nuestro noviazgo fue uno muy largo y lleno de altibajos, pero poco a poco, rascaremos hasta llegar al fondo de lo que esa frase encierra.

Uno de nuestro primeros recuerdos felices fue cuando cumplimos 2 meses, pues significaba todo un triunfo personal, ya que como saben en el pasado nos habían separado antes de eso, a pesar de que habían pasado más de dos años y que su familia no vivía aquí, sabíamos que no debíamos cometer los mismos errores que la primera vez, no volveríamos a tener ese exceso de confianza e inocencia que nos hizo pensar que la gente no se mete en lo que no le importa, por lo tanto optamos por ser muy discretas, solo unas cuantas personas conocían nuestra situación, la mayoría amigas mías y aunque en su escuela había mucha gente gay debido a la naturaleza de su carrera, le tomo mucho tiempo abrirse con ellos, pues de alguna manera las experiencias en el pasado la habían vuelto una persona desconfiada.

Sin embargo, después de un tiempo, ella comenzó a abrirse un poco con algunos de sus compañeros y por fin pudimos salir en bola a los antros gay que estaban de moda en aquel momento; conocimos prácticamente todos, desde los más rasposos, hasta los más fresas; muchos de los cuales ya no existen y dicho sea de paso como se extrañan.

Aquel Penélope en donde nunca faltaba edecanes que regalaban bebidas, que tenía los baños mixtos y donde una goga de más de sesenta años vestida de Drag Queen regalaba condones subida en una tarima, todo un concepto innovador y casi circense, El Blush, que luego se convirtió en el primer Living en donde se rumoreaba que incluso cantantes famosas habían ido a su zona VIP, o el Anyway con sus tres pisos de diversión para todos los gustos y sus shows de travestis, cargados de humor, o el Taller con su ambiente rudo pero su horario madrugador, o el BOX aquel enorme lugar donde ponían la mejor música para bailar, y que tenía un día especial para mujeres, y como pasar por alto el tradicional Cabaretito, (cabaremiau, kebaratito, Cabaretongo) uno de los primeros lugares gay de la ciudad, que llegó a tener hasta cuatro lugares diferentes; un lugar que es el ejemplo perfecto de lo que quiere decir, entre más corriente más ambiente, un lugar a donde muchos prometen no volver pero tarde o temprano regresan, un lugar sencillo, con precios accesibles y buena música en donde personas de todos los estratos sociales se conocían y cruzaban sus historias y que hasta la fecha persiste a diferencia de todos los demás.

¡Ah!, que buenos lugares había antes; si no los conocieron sinceramente de lo que se perdieron, si sí, seguramente en estos momentos se han llenado de nostalgia, actualmente, sigue habiendo un par de buenos sitios, pero ese tiempo fue especial para todos aquellos que lo vivimos pues formamos parte de la historia y del bum de los nuevos lugares pensados para las personas que formábamos parte de la diversidad sexual.

Puedo afirmar sin temor a equivocarme que buena parte de mis mejores recuerdos datan de esos días; joven, guapa, fuerte, y sin preocupaciones importantes, en un mundo en dónde todavía era seguro salir a la calle hasta perder la razón y sin gastos fuertes, qué más se puede pedir, éramos ella y yo un par de enamoradas en la flor de vida, con un montón de sueños, un montón de energía, muchas ganas de estar juntas y el deseo interminable de coleccionar recuerdos, vivencias, y experiencias; la ciudad y su vida nocturna nos pertenecía, y gracias a la música de aquellos ayeres nos transformamos y empoderamos de apoco escuchando cientos de canciones que marcaron ese periodo y que todavía se escuchan en algunos de los lugares actuales.

Los Dj's hacían mezclas mágicas en donde podían combinar música de Kabah, OV7, Thalía, Gloria Trevi, Mónica Naranjo y Jeans, para luego seguir con Madonna, Cher, Pink, Cristina Aguilera, y Britney Spears, e incluso mezclar todo con música electrónica, como offer nissim, y muchos mas, "las coreografías veían la luz"... ¡Go go go! .