La Vida No Es Una Eleccion

3.pasillos

Entrando a clases en un viernes, las actividades escolares son comunes, solo me falta una clase y seré libre un fin de semana, solo para mí, ya quiero poder estar sola un momento, al salir de clases cruzó miradas con el chico de la librería al parecer estudia aqui, o eso ara, siento ese escalofrío igual al que tengo cuando despierto casi todas las mañanas, cada mañana con ese mismo sueño, muevo un poco la cabeza, odio recordar esas cosas.
Sigo caminando y mi amiga, más bien compañera Ximena me ve en los pasillos y corre a saludarme con una enorme sonrisa.
-hola aki!! A donde vas. Dile una excusa no seas dura con ella.
-Me voy a casa ya no soporto estar en este ambiente tan hostigante lleno de personas fastidiosas. Claro eso estuvo perfecto tonta
- O está bien, gracias por acompañarme por el libro, el cumpleaños de mi primo se celebrará el lunes, por si quieres ir me avisas, bye.
-Bye, yo te aviso.
Y seguí caminando por los pasillos hacia el estacionamiento, me dirijo hacia mi auto, la verdad no sé qué auto sea, solo sé que es negro algo viejo, sin mal interpretaciones, funciona perfectamente pero es algo antiguo, de camino hacia mi casa pongo algo de música para pasar más rápido estos 15 minutos de camino, el día de hoy hay algo extraño en el ambiente, siento,
como si me siguieran, como si algo malo estubiera a punto de pasar, estoy muy paranoica hoy, solo es eso, bajo del auto tomo mi mochila, aún tengo el presentimiento de que algo pasará, entro a mi pequeña y cómoda casa dejo la mochila en el suelo y camino con el palo que dejó al lado de la puerta hacia mi habitación.
-¿ hay alguien ahí?. Claro tonta el asesino te dirá si estoy en tu cuarto casi termino de doblar tu ropa. Escucho pequeños ruidos provenientes de mi habitación, abro lentamente sin hacer ruido, al terminar de abrir no había nada, pfff que tonta casi muero de un susto por nada, me acuesto en mi cama cierro los ojos y suelto el palo.
-bueno si hubiera habido alguien me abría podido defender. Digo en la misma posición, cuando siento pequeñas patas sobre mi, abro rápidamente los ojos y tengo un pequeño zorro arriba de mi. Primero me asusté pero después de todo solo es un pequeño animal perdido.
- quien eres tu pequeño? . Dije para tomarlo suavemente entre mis manos, no era una cría pero supongo que tampoco un adulto. - ¿De dónde has salido?. Le digo viéndole a los ojos, son extraños parecen verde olivo o algo así, buen creo que tendrás que salir pequeño. Eso dije pero pues la realidad es que ahora está acostado al lado de mi en mi cama.
-buenas noches. El o ella solo me volteo y volvió a acomodarse.
Blanco es lo que puedo ver, estoy solo parada en medio de un campo blanco, empieza a dar vuelta todo, y a tomar colores tan bonitos, ¿Dónde estoy?¿ Que es esto? Me preguntó para mis adentros, y comienzo a caminar.
-¿A donde vas?. Pregunta una voz gruesa detrás de mi.
-no lo sé. Digo volteando encontrándome con un hombre de ojos color verde extraordinariamente penetrantes
- y¿ por qué caminas entonces?. Vuelve a preguntar, no sé qué decir o que hacer solo camino unos pasos hacia él.- no te acerques más. Seguí caminando y estando suficiente cerca estire mi mano.- no lo hagas y por supuesto trate de tocarlo con un dedo que calló directo a una de sus mejillas y caí caí a un pasillo lleno de puertas todas distintas, genial ahora que es esto decidí abrir una tras otra para encontrarme con más pasillos, esto no me gusta, aterrada y con una sensación que no sabría decir que es comencé a correr hasta llegar al final donde había una puerta negra con una cadena y algo me dijo que esa era la correcta.
Y desperte sin saber dónde estaba ni que hacía ni que hora era solo sé que estaba despierta.
Tras haber caminado por toda la casa, me sentí tranquila, solo era un sueño