Uno de esos tantos días donde vivía extasiada de amor, entre besos y abrazos, comencé a sentir ruidos de maquinas, como si estuvieran respirando, susurros a mis oídos de su voz y roce de cuerpos ardientes sobre el sofá de mi casa, pero el sonido se volvía mas fuerte, y en mi visión desaparecía su cuerpo de atleta y aparecía un lugar lleno de luz, luego de muchos forcejeos para intentar enfocar mi vista, vi su rostro excitado de aquel chico que tanto amaba, dijo algo; pero no lo pude escuchar, no podía entender ni una palabra de lo que me estaba diciendo, no comprendía lo que pasaba, su cara se volvió una de preocupación y entre a un lugar oscuro y ahí comencé a sentir esa voz que tanto conocía, esta gritando, por su tono, era uno de preocupación
- Despierta, pequeña.
Abrí los ojos, que por alguna cosa me pesaban bastante, estaba en una cama y alado mío, mis tíos, era una sala blanca, llena de luz y peluches. Mis tíos me informaron que había sufrido un accidente y que estuve en coma durante casi dos semanas, los peluches que llenaban la habitación, eran por cada día sin abrir los ojos. Habían tubos saliendo de mi cuerpo, el sonido de las maquinas era algo aterrador. Trate de hacer un esfuerzo para recordar lo que había pasado de verdad y recordé que ese día luego de salir de la heladería y ver a ese chico en la esquina estaba cruzando la pista sin despegar la vista de mi helado, y en mi descuido un carro se fue contra mí, todo mi cuerpo fue tirado cinco metros mas allá, fractura de un brazo, ocho puntos en la cabeza y una pequeña contusión, aparte de los golpes y moretones, fue lo único que sufrí. Paso un mes más, antes de poder salir del hospital, cuando lo hice, en la acera de al frente ese chico el cual fue culpable de mi accidente estaba caminando agarrado de la mano con otra chica, por un momento me imagine que esa chica era yo, pero pronto recordé lo que de verdad había pasado y sin decir nada mire al cielo feliz de haber podido sobrevivir.
marea :D
