Capítulo 9

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Kaven:

Rin,ring,ring

El sonido de la alarma resonaba en mis oídos. Mi humor estaba por el piso y mi cabeza duele por la falta de sueño, y no consigo la forma en que mis piernas se muevan para levantarme de la cama. Luego de estar 15 minutos en mi mundo, arrepintiéndome una y otra vez por la mierda que le hice a Em ,opté por levantarme de la cama, bañarme, cepillarme los dientes,  vestirme y finalmente me peiné un poco. Al terminar bajé las escaleras para desayunar.

Buenos días hijo-dijo mamá sonriente mientras preparaba desayuno

Buenos días-dije tratando de sonar lo más normal posible para que mamá no sospechara que algo había ocurrido. Como no tenía hambre, opté por comerme una manzana. Luego cogí las llaves del auto y conduje hasta la escuela.

Em:

Hoy me levanté súper temprano. Estaba dispuesta a saber que le pasaba a Kaven. No iba a dejar que una tonta pelea arruinara la amistad tan especial que habíamos creado. Al levantarme de la cama, me bañe, me cepillé los dientes, me puse unos shorts con una camisa de tirantes guindando y mis vans azules. Me hice una trenza francesa y bajé a desayunar. Como mamá aún no estaba despierta, por lo temprano que era, preparé un desayuno rápido, cogí las llaves del auto y conduje hasta la escuela.

Ay Kaven lo que te espera-dije en mí interior decidida de averiguar lo que le había pasado ayer

Kaven:

Al llegar a la escuela, me estacioné y observé mi reflejo en el espejo del auto. Hoy mí aspecto es horroroso, tenía grandes ojeras bajo mis ojos, el pelo estaba bastante alborotado y mí cara se veía más pálida de lo usual. Bajé del auto apresurado para no tropezarme con Emely en el camino, pero el universo hoy estaba en contra mío y lo único que sé es que en menos de un minuto ya estaba en el piso. 

Em:

Al llegar a la escuela desde el auto pude visualizar a Kaven bajándose del auto apresurado. Corrí hacia él y le brinqué encima para cumplir mí misión. Kaven hablaría conmigo le guste o no.

Kaven:

Desconcertado aún por la caída, pude ver a una Emely desquiciada encima de mí. Mis ojos se abrieron como plato, y de verdad no puedo creer a esta chica. La hecho a un lado, la trato como si fuera basura, y aún así aquí esta ella, brincándome encima dispuesta a averiguar información y hablar con una persona que no la merece.

¡Ahora mismo me vaz a explicar porque me trataste ayer como una misma mierda y por que estabas tan nervioso Kaven Scott! ¡Y es ahora!-dijo todavía encima de mí y con una cara de niña molesta que simplemente me hizo olvidar por un momento todo y solo me dio felicidad verla siendo tan ella. Emely es simplemente grandiosa. Después de unos minutos de pensamientos bobos sobre la chica que se encuentra literalmente en mí, me acordé de todo el suceso de ayer e intenté safarme de su agarre, pero me tenía totalmente acorralado. No tenía escapatoria.

Habla!-gritó mirándome fijamente a los ojos, y otra vez me quedo anonadado por ella, por sus ojos. Emely tiene esos tipos de ojos que sientes que puedes mirar por horas y no te cansarías. Me acuerdan mucho al mar, muchas veces el mar es tranquilo y suave, y otras veces es intimidante y exigente. Ahora mismo los ojos de Emely son intimidantes, como ese mar salvaje que arrolla todo a su paso. Respiro hondo y aclaro mis pensamientos.

Hablaré si dejas de aplastarme. ¡No creas que pesas diez libras!-dije exasperado

Ok, pero solo sí me prometes que no correrás- dijo enarcando una ceja

Ok lo prometo-dije disimulado pero con la intención de no cumplirla. Sí quiero proteger a Emely, no puedo hablarle-me repito a mí mismo

En cuanto me soltó, salí corriendo como desquiciado por toda la escuela.

El chico nerdDonde viven las historias. Descúbrelo ahora