Cierto es que en la vida me había faltado de nada, nací en una familia acomodada gracias al trabajo de mi padre, y sí, por eso pude pagarme mi carrera de arqueología y una vez terminaday con muy buena nota tube la oportunidad de ir a trabajar a una expedición a egipto durante un año y lo cierto es que lo hubiera alargado más si no fuera por que el trabajo de mi padre en la CIA ocasiono que unos hombres intentaran secuestrarme dos veces.
Y aqui me encontraba de nuevo, en casa de mis padres en la habitación que tiene recuerdos por cada rincón de la niña rubita con tirabuzones que saltaba por todo el jardín, de la adolescente con ganas de salir de fiesta, conocer gente nueva y encontrar el amor y sobre todo de la entusiasta universitaría que no hacia más que llenar la habitacion de pequeñps fosiles, de muestras de expediciones de mil lugares diferentes y de millones de libros sobre egipto. Y depues de haber logrado realizar mi sueño, un año deùes me encontraba encerrada aquí y con un guardaespaldas que por cierto, es el de mi padre, por que el que esta encargado de mí se encuentra en una misión en libano no puede reincorporarse hasta que no termine.
-Pues por mí como si nunca apareciera.-protesto en voz alta miestras me levanto de la cama enfuruñada y entrando al cuarto del baño- no aguanto esto más, tengo casi 26 años, con una vida que me encantaba, libertad y hacía el trabajo de mis sueños. Y ahora me encuentro aquí, a miles de kilometros y sin poder hacer un movimiento sin que mi custodio me controle.-Me miré en el espejo y sentí como si se me encendiera una luz, y lo decidí, hoy se iba a acabar todo esto. Me duche lo más rapido que pude y colocandome la toalla al rededor del cuerpo fui al armario de roble y escoji unos pantalone spitillos claros algo rotos, un jersey marrón de lana y unas botas marrones, estube tentada a salir por la ventana como en las peliculas pero he de admitir que a lo intente hace tres meses y desde entonces tengo un hombre las 24 horas del día debajo de la ventana. Me dispuse a salir al pasillo y ahí estaba él
-Buenos días fernando ¿Están mis padres en casa?-le pregunte mientras bajabamos a la cocina
-No señorita Lopez, salieron temprano
-Gracias fernando.-Nada más entrar en la cocina el olor a pan tostado inundo mis fosas nasales y no pude mas que sonreir, como adoraba a carmen. Era nuestra cocinera desde hace muchos años y recuerdo que siempre que tenia tiempo me encantaba pasar las tardes en la cocina con ella aprendiendo a cocinar, gracias a ella las cenas que organizaba en casa con mis compañeros de excabación acababan siendo un existo.
-Buenos días carmen, gracias a tí merece la pena salir del cuarto-me hacerque a ella y la besé en la mejilla
-Hay mi niña que zalamera eres. Ahí te he dejado tu desayuno.- termino de colocar el zumo al lado de mi plato y se sento en la mesa conmigo mientras doblaba los paños.
-Carmen, no lo aguanto más tu sabes que siempre he necesitado mi espacio y fernando es el mejor de veras y se que es su trabajo pero me mata todo esto, y entiendo los motivos de mis padres para organizar todo este despliege pero tengo 25 años, he luchado mucho para terminar la carrera y tener la oportunidad de hacer la expedición y no veo justo que tenga que sacrificar todo eso.
Carme aparte de mi madre era una de las personas que mejor me conocia y sabia como me sentia ahora mismo y dejando de lado los paños me agarro la mano y me levanto la barbilla para que la mirara.
-Cariño mio, no sabes cuanto te entiendo y se lo que es que tenias una vida allí, un futuro muy prometedor porque eres la mejor pero era imposible que tu padre por muchos contactos que tenga pudiera protegerte alli, y tienes razón no es justo que dejes tu futuro por estar aquí encerrada pero es por tu bien, han sidos dos intento de secuestros, dos intentos que podrian haber salido bien y tu no estar aquí y ni tus padres ni yo queremos que le pase nada a nuestras preciosa chica y tarde o temprano todo esto se solucionara y volveras a continuar con tu vida aquí, allí o donde tu quieras. Pero tienes que comprender y poner de tu parte, una cosa así no se puede tomar a la ligera.
Carme era como un balsamo de tranquilidad y paz para mi, pero aun así las dos sabíamos que no iba a dejarlo pasar así como así y que era como una bomba de relojería apunto de estallar amenazando con llevarse todo lo que hubiera a su alrededor.
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Por ti
RomanceCarla por fin verá realizado su sueño después de terminar la carrera y tener la oportunidad de realizar una excabacion con la que soñó desde que empezó a estudiar. Pero su tiempo allí se verá truncado por gente por la que su padre tendrá problemas y...