( 10) - Cinco segundos

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7 de septiembre

Jungkook se despertó con los labios de The Monster sobre los suyos.

Abrió los ojos al sentir la presión sobre sus labios observando el rostro deseoso sobre él. Recordó su acuerdo con Namjoon para reprender sus deseos, sin embargo, el estado somnoliento lo alejó de su sentido comun al sentir la lengua de The Monster y, deseoso, envolvió sus brazos alrededor del mayor. No esperaba que se lo permitiera, pero lo agradeció. Podía sentir la mitad del cuerpo de The Monster descansando sobre él, con el brazo apoyado junto a su cabeza.

-Buenos días.- Habló en voz baja en los labios de Jungkook, alejándose de su boca y pasando a su mandíbula.

-Definitivamente.- Respondió Jungkook, un poco entrecortado por la forma en que la lengua y los dientes del mayor estaban jugando repentinamente en su cuello. Sacó su pierna de debajo de la manta y la envolvió alrededor del tobillo de The Monster, uniéndonos más firmemente.
-¿Me puedes despertar así cada día?-

-Mjm...-Murmuró el mayor. Bajó la mano para agarrar la pierna de Jungkook, sus largos y delgados dedos se envolvieron alrededor del muslo del joven dejandolo sin aliento.
-Aunque parece que no me necesitas mucho.- Se apartó para sonreírle al más joven mientras su mano subía por el muslo acariciando el cuerpo del menor para agarrar la cadera desnuda de Jungkook y apretarla.

-Corrígeme si me equivoco, pero estabas usando esos pantalones para dormir ayer, ¿verdad?- Hizo un gesto con la cabeza hacia el suelo donde estaba el sucio pijama de algodón.

Jungkook se sonrojó, pero era difícil no avergonzarse cuando los dedos de The Monster se amasaron lentamente en su trasero. Parecía que quería devorar a Jungkook en ese mismo momento.
-Es lo mejor para ti.- Respondió en voz baja y jaló al mayor hacia abajo.
Obedeció, presionando sus jugosos labios contra Jungkook y lamiendo todo en su camino hacia la boca del más joven. Sabía a pasta de dientes y enjuague bucal, con los rastros más débiles de jugo de naranja. Hizo que Jungkook se mareara de deseo, aunque ¿cuándo no? Todo lo que hacía el mayor lo enloquecía y lo hacía querer sellar sus labios en un beso interminable. Bueno, tal vez si, porque había muchas otras cosas para las que él quería usar su boca.

Se apartó del mayor, mirando a sus ahora oscuros ojos marrones. -Quiero chuparte.- Dijo con naturalidad.

The Monster levantó una ceja, dándole una mirada un poco desconcertada. -¿De Verdad?-

Jungkook asintió y presionó su pecho, empujandolo para que se sentara. -Sí, muévete.- Pero The Monster no se movió ni una pulgada y Jungkook frunció el ceño

-¿Qué? ¿No quieres que lo haga?-

-Créeme, lo disfrutaría mucho.- Dijo, con los ojos fijos en la boca de Jungkook antes de mirarlo a regañadientes a los ojos. -Pero Namjoon llegará tarde al trabajo si no nos vamos ahora y no podemos permitirnos tener miradas adicionales hoy.-

-Me estás evitando...-Murmuró Jungkook. -Bien.- Dijo más fuerte. -Entonces vete.-

El mayor juntó sus labios una última vez, mordiendo y tirando del labio inferior de Jungkook con sus dientes mientras se alejaba. -Habrá más oportunidades, pequeño. Eso te lo puedo asegurar.-

-Sólo vete.- Suspiró Jungkook cuando The Monster se puso de pie. -Tengo que estudiar de todos modos.-

-Aprende bien.- Dijo con un guiño antes de irse. Jungkook lo vio irse e intentó ignorar su erección. Él realmente necesita estudiar para esa noche.

The Monster había dejado la información que tenía en la mesa de café la noche anterior para que Jungkook pudiera familiarizarse con su "primera presa". Era una hoja de información detallada sobre la víctima. Todo, desde los lugares a los que le gustaba ir, hasta la frecuencia con la que se retrasaba en sus facturas. No tenía idea de cómo obtuvieron la información, pero fue extremadamente útil. Jungkook no podía confiarse ahora. Nunca se perdonaría a sí mismo si estropeara algo y metiera a The Monster o Namjoon en problemas. O peor.

A Strom Blowing Up Your Horizon [NamKook]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora