La Chica Del Orfanato

Capítulo 3- Rubia Falsa y Egocéntrica

Escuche la puerta de mi habitación abrirse, y mecanicamente, como si fuera un robot abrí los ojos y me sente en la cama, mire al frente y era Greta quien la había abierto.

— Eres tu —Dije adormilada y me tire de nuevo hacia mi almohada.

— Rápido, ¡vistete! —Dijo desesperada y senti algo caer sobre mi.

— ¿Para que? —Cuestioné.

Mi voz salio ronca, sí, aun tenia sueño. Me levante y la vi moviendo mi ropa -La cual estaba colgada en un pequeño tubo al cual llamamos "closet"- de un lado hacia otro.

— ¡Hoy es el día de donaciones!, ¿Acaso nadie lo recuerda? —Me respondio euforica, supongo que ha tenido que hacer esto unas 50 veces hoy.

¡Oh si! el día de donaciones, ugh. El día de donaciones, es una vez al año y es un "evento" que organizan varias empresas para aportar dinero al orfanato, "aportan dinero para apoyar a los pobres niños del orfanato", humm, ¡NO!, ellos solo dicen eso para que vean "sus bondadosas almas", cuando en realidad, ¡Solo quieren aumentar sus ventas!, ¿Y, como lo hacen?, diciendo que "el 50% de sus ganacias irán para ayudar al orfanato", pero no, no nos dan ni el misero 5%. Por eso es algo que odio. Solo nos utilizan.

— Ten, ¡Vistete rapido! —Dijo arrojandome unas prendas de vestir y luego salio de mi habitación.

Lo unico bueno -Diría yo- es que cada cuarto tiene su propio baño y, ¡Gracias a Dios!, ya no tendre que compartir mi baño. Fui y me di una ducha rápida para luego vestirme, mire la ropa que me había dado Greta. Un jean ajustado, una camisa sin mangas rosa chicle y unos zapatillas negras. Lo tome y me lo coloque, luego fui a mi "peinadora" -Si es que se le podia llamar así, y no es que me queje, porque como ya dije, es mejor que vivir bajo un puente- tome mi cepillo y, comensé a peinar mi cabello, cuando ya estuve lista salí de mi habitació y fui escaleras abajo donde estaban todos reunidos.

—Al fin bajas —Me regaño Greta, y yo solo susurré un "perdon".

Mire a mi alrededor y todo estaba decorado, las mesas del "comedor" habian sido sustituidas por cientos de sillas, todas ocupadas por personas importantes y algunas por los niños del orfanato, en todo el centro había un cartel gigante en el cual se leía "Industrias Mackensy", Oh si, se me había olvidado, este año era el turno de Industrias Mackensy, de organizar todo el evento. Detalle cada persona, todos con elegantes trajes y vestidos. A mi derecha había una señora de unos 30 tal vez, era rubia y no lograba distinguir muy bien el color de sus ojos, pero supongo eran azules, llevava un elegante vestido Beige, junto a ella estaba sentado un señor, de unos 30 y tantos, su pelo era castaño, tal vez un poco mas oscuro que el mio y sus ojos eran verdes, llevava puesto un traje igualmente elegante, sobre sus piernas llevaba a una pequeña niña de unos 5 años, la cual tambien llevava un elegante vestido purpura, supongo era hija de ambos, ya que se parecen tanto entre sí. La señora rubia parecia mirar todo con desden y desaprobación, aunque cada vez que alguien pasaba por su lado le sonreía, como si este fuera su lugar favorito.

¡Falsa!.

Por otro lado, al señor no parecia molestarle nada, se diría que más bien estaba a gusto allí sentado, junto a su pequeña hija y su esposa. Pobre señor, supongo que debe ser gritado unas cien veces al día por aquella rubia desdeñosa.

Decidí entrar al "comedor", no había desayunado nada así que fui directamente hacia una mesa que estaba al fondo de la habitación, mire todo lo que había sobre ella y tome una chupeta.

Sip, un buen desayuno.

Me sente en unas sillas que estaban a unos metros y me quede mirando a todas las personas, minutos depués alguien se sento en la silla vacia junto a mi.