Capítulo 5

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~Martina~

La respuesta de mi boca sale disparada como bala dándome una mala jugada.

Yo: dale -respondo y lo observo sonreír

Ponzio: bueno veni -me hace señas para seguirlo.

Al llegar al auto Ponzio me abre la puerta del lado del acompañante, le digo "que caballero" para luego ambos reír.
 Las manos me sudan y tengo palpitaciones bastante aceleradas.
Desde que lo vi caminar hacía mi me sentí extraña, pero él era extraño. O probablemente la extraña sea yo.

Sube del lado del conductor y me pide mi dirección. Luego nos quedamos en un silencio un poco incómodo o por lo menos para mi, ya que me empiezo a sentir culpable, aunque no debería pues no estoy haciendo nada malo.

Ponzio: querés poner musica? -pregunta

Yo:bueno, prendo la radio? -poner música alivianaría el ambiente

Ponzio: dale -Me mira- prendela

Observo el perfil de Leonardo, está serio, puedo observar su precioso cabello en cantidad, sus pestañas,su nariz perfectamente proporcionada, sus labios y el pequeño arco de cupido que ellos formaban. Tenia barba de hace unos días y un lado de sus ojos se asomaban una pequeñas arrugas.

Leonardo era un hombre "grande" pero muy hermoso. Inevitablemente recuerdo mis sueños, que vergüenza, me sonrojo a mil. Para que describir lo que pasaba allí.

Ponzio: y hoy que haces? Trabajas estudias?-pregunta

Yo: no trabajo, si estudio. Publicidad y marketing, pero no tenia que cursar por suerte

Ponzio: que bueno, sos de aca vos?

Yo: no, o sea si de la provincia, pero un pueblo bastante lejos de aca... muy rara vez vuelvo

Ponzio: ah mira, yo soy de Santa Fe, pero si vuelvo, más que nada por mis viejos viste-me dice y me da mucha ternura.

La realidad es que Leonardo me atrae mucho y lo tengo que aceptar, de ser lo contrario no estaría soñando con el, y no me pondría nerviosa cada vez que lo veo. Supongo que es algo normal que les pasa a muchas.
Debo tomarlo con calma. Además el tiene esposa y yo novio. De todas formas él debe verme como una niña.

Mis manos van hacía el estéreo y enciendo la radio. A través de el comienzan a salir algunas publicidades y luego suena Prófugos de mi banda favorita Soda Stereo.

Señor por qué me haces esto? Pregunto internamente a Dios.

Ponzio: es un temazo -me mira sonriendo

Yo: si, mi favorito -le sonrio

Ponzio: llegamos -dice luego de un rato que se había pasado volando entre charlas. Leonardo me había enseñado fotos de su hija, omitió a su mujer. Le incomodaba hablar de ella por lo visto, quizás estaban mal, no se.

Yo: gracias por traerme leo -le sonrió, desabrocho mi cinturón y me giro para saludarlo

Ponzio: no agradezcas de verdad

Yo: -le sornio- bueno, nos vemos entonces -iba a abrir la puerta para bajar del auto pero su voz me detiene

Ponzio: esperá, antes de que bajes quiero decirte algo -Me mira serio

Yo: si, qué? -Lo miro atenta

Ponzio: sos muy linda Mar - mi mente queda en blanco y mi cuerpo estático durante unos segundos que parecen ser una eternidad- tranquila solo dije lo que pienso -dice al verme en esa situación

Yo: -Me río intentando disimular mis nervios- esta bien, gracias Leo -le digo y ahora si abro la puerta para bajar- de nuevo gracias por traerme

Ponzio: no hay porqué -me sonríe y nos acercamos para saludarnos. El deposita un beso suave a un lado de la comisura de mis labios que me eriza la piel. Bajo rápido de su auto y me meto al edificio. Sin mira atras entro al ascensor. Suspiro y me miro en los espejos de este, me doy cuenta que estoy rojisima. Inconscientemente sonrio.

Intento no volver a mirar mi reflejo en el espejo. Salgo y entro a mi departamento, pongo a cargar el celular y comienzo a despojarme de la ropa para luego meterme a la ducha. Al principio helada pero luego bien.
Me quedo sentada en el piso de la bañera, con el agua cayendo sobre mis hombros. En completo silencio, sólo era audible el sonido del agua.

No quiero pensar pero es inevitable. Julian daba vueltas en mi cabeza como reloj.

No se cuanto tiempo estuve debajo del agua, pero al salir luego de cambiarme y secarme el pelo busco el teléfono que aún seguía  apagado. Cuando lo enciendo varios mensajes comienzan a llegar, muchos de llamadas perdidas. Todo junto y a la vez me llega una llamada. Atiendo sin ver.

Yo: hola

Julian: gorda al fin me atendes, paso algo? -pregunta

Yo: juli... No paso nada, me quedé sin carga en el celu y me fui a bañarme -explico

Julian: me di cuenta porque no te llegaban los whats, estaba muy preocupado.

Yo: perdón mi amor, pasa que fui al final a buscarte porque no me había llegado el mensaje, y bueno tardé hasta venir a mi casa y me bañe y todo eso

Julian: bueno, querés que te busque así dormimos juntos esta noche? 

Yo: prefiero que no -digo sintiendo un vacío en el alma- es que estoy muy cansada -miento- y para que nos vamos a ver si ya me estoy durmiendo

Julian: Segura?  -pregunta

Yo: si... nos vemos mañana mejor

Julian: bueno, te voy a extrañar

Yo: yo también gordo -me angustio y algunas lagrimas comienzan a deslizarse desde mis ojos- bueno nos vemos...

Julian: hasta mañana mi vida, te amo -me dice dulce

Yo: yo también te amo -suspiro- hasta mañana -digo, corto la llamada y lloro con libertad.

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⏰ Última actualización: Apr 03, 2019 ⏰

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