Tienes que convivir con ellos, son tus primos vienen desde Linköping - mamá volvió a insistir.
Mamá, ayer no quise salir por una razón, no quiero verlos ni mucho menos conocerlos, eso ya lo hicimos tiempo atrás -le recordé haciendo una mueca-, así que no, de mi habitación no voy a salir, a menos que sea una emergencia -sentencié algo enfadada
Pero Alexa!-vociferó renegando ante mi antipatía por ver a la familia, ya me pisaba los talones en dirección a mi habitación, también conocida como mi santuario.
Te lo dije - reiteré antes de cerrarle la puerta.
Solo te digo una cosa, mañana van a venir tu tía y tus dos primos y si no llegas a salir te vas a quedar castigada. Sin salidas, sin celular, ni nada de amigas me entendiste? amenazó, yo solo bufé y me tiré en mi cama
Maldición. Bueno, solo saldré..los saludaré, y listo. No es gran cosa, ¿verdad?
Al otro día
Abrí los ojos temprano, me levanté, me duché y pasé el rato viendo televisión hasta que llegó mi tía con mis primos. Consideré huir a mi santuario pero luego recordé la amenaza de mi madre y que sin problema alguno la cumpliría, así que mejor me fui al patio a sentarme junto con mi hermana Alcancé a escuchar voces antes de salir, distinguí tres por lo cual fruncí el ceño extrañada, no recordaba tener más de una prima y mucho menos que el otro fuera hombre, tal vez sea porque es considerable el tiempo que tenemos sin vernos, mi único recuerdo de él es de una cena familiar y eso es de años.
Por el rabillo del ojo vi cuatro figuras pero únicamente me centre en dos Zara -mi prima-, es una adolescente de 15 años; cabello corto y castaño, de baja estatura, piel blanca y un poco llenita, siempre viste de negro, a mi parecer es muy rara y no puedo decir que me cae bien.
Luego está Simón quien creo que así se llama, cabello rubio, piel blanca, ojos hermosamente azules, una sonrisa muy pero muy encantadora. Mierda ese es mi primo? Suspiré mientras me ponía en marcha de nuevo. Me senté al lado de Sophy -mi hermana y le informé que la visita tan esperada había llegado.
A ella pareció no molestarle pero tampoco dio saltitos de alegría. La entendía, nosotras no éramos muy cercanas a los familiares de mi madre y mucho menos con los de mi padre, siempre estábamos nosotras tres y ya, así que mi interés por querer avivar la convivencia con parientes que no trataba era muy poco, sin embargo, haría el esfuerzo, solo porque mamá lo pidió, y vaya que lo hizo.
Entonces ¿ qué dices ?, ¿ entramos ? -torcí el gesto al proponer aquellas ideas a mi hermana.
Hay que esperar a que mamá nos llame mejor-movió las cejas arriba y abajo, yo sonreí y asentí con la cabeza.
Buenísima idea hermanita-suspiré esperando al glorioso llamado que por cierto, estaba tardando mucho.
Ya los viste?-curioseó
Más o menos, antes de venir aquí pude verles de reojo-me erguí.
Ha pasado mucho tiempo desde que nos vimos.
Suspiro
Verdad que sí? Pf, pensé que estaba siendo algo dramática pero ya vi que no-dije aliviada.
Ella se rio levemente sacudiendo la cabeza.
¡Chicas!-ahí estaba, el mismísimo canto del ángel que estaba esperando-que se note mi sarcasmo por favor.
Ahí está nuestra señal para salir corriendo me puse de pie de un salto.
Sophy sonrió negando y me arrastró adentro obligándome a tener resignacion.
Antes de entrar a la sala de estar tomé una gigantesca bocanada de aire. Comencé a sentirme nerviosa y no supe por qué, incluso así mis pies se siguieron moviendo hasta que tuvimos a dos pares de caras con los ojos puestos en nosotras.
Tragué saliva dificultosamente cuando mi mirada se paseó por los cuatro, casi me atraganto cuando miro al último.
Hola -Sophy fue la valiente que saludó.
Hola- Simón saludó con un poquito más de entusiasmo del que de seguro mi cara mostraba
Comencé del lado izquierdo y saludé a mi tía Megan solía venir a casa, se la pasaba viajando todo el tiempo hasta que conoció a su difunto esposo quien murio cuando iban en un crucero de vacaciones; mi tía tuvo suerte al sobrevivir, la mayoría de las personas habían muerto. Su difunto esposo la dejó embarazada... supongo que de Zara, o de Simón, en realidad, todavía no tengo muy clara la historia. Zara siguio, me recibio con la misma emocion que yo.
Luego saludé a mi primo amablemente porque a él pareció no malestarle mi presencia a diferencia de su hermana ya me caía bien.
Hola -dije con una sonrisa extendiendo mi mano, hubo algo que me inquietó en cuanto la tomó
Hola Alexa-me saludó mirándome a los ojos sin haber soltado mi mano .
En cuanto mi madre se fue a la cocina con mi tía, fijé mi mirada en la chica de sonrisa toda falsa que Simón tenía a un lado, hasta ahorita me había dado cuenta de que no eran cuatro pares de ojos sino cinco.
Y ella es - interrogué confundida
Oh, ella es... Ximena, mi novia -él respondió presentándomela
Mucho gusto-ella intervino sin haber quitado la sonrisa tan falsa de su tan falso rostro. Diablos.
Que hipócrita -Igualmente -zanjé seria
Bueno, yo voy con tu mamá Amor - la tal Ximena le hizo saber a Simón con su irritante voz chillona, le dio un beso en la mejilla y se fue contoneándose exageradamente
¿De dónde había sacado a esa plástica ? Parecía la típica chica popular del instituto, que tenía más silicona que piel propia, de seguro una hueca más.
iVamos al patio?-indiqué el camino
Vamos-asintió, me ofreció su brazo y de nuevo ese algo de hace rato apareció, hice como si no hubiera pasado nada y ambos salimos al pequeño patio Sophy al parecer, intentaría interactuar de alguna manera con Zara.
Le deseé suerte con aquello porque de seguro la iba a necesitar.
ESTÁS LEYENDO
Amor Prohibido (Simon Söderberg y Tu)
Fanfic"Quiero decir que me miraste de verdad...con un par de ojos que eran como estrellas. Me atrapaste así como así. Y la verdad es que algo me revoloteaba por dentro, vaya que sí. Un aleteo como de mariposas que me subía por dentro del estómago. Me atra...
