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-Creo que esta vez nos pasamos no crees Nam? –Comentó un cabizbajo Yoongi que caminaba a lado de un pensativo Namjoon-.

-No lose Yoongi, pero debemos de tener más cuidado con las cosas que hacemos ¿de acuerdo? Lo que debemos de hacer ahora es venir con más calma o esperar a los chicos fuera de la escuela.

-Creo que tienes razón, bueno... ya vallamos a clase –comento seriamente mientras se encaminaban a su respectivo salón de clases-.

Ellos no podían entender por qué existían personas que pudieran dañar a chicos como eran Jin y Jimin. Los antes mencionados han sobrevivido a muy difíciles acciones que se han presentado en sus vidas, por ejemplo, soportar el bullying por parte de la gran mayoría de sus compañeros al saber de sus orientaciones sexuales, Jimin por su parte antes de conocer a su hyung había estado recibiendo abusos y golpes por parte de su padre, no soportaba el hecho de que su único hijo fuera un marica y que le profanaran su culo. Jin era otro caso, el mayor siempre fue una persona realmente dulce y humilde, sin dar crédito a que muchos chicos y chicas querían lo peor para el, en la secundaria y preparatoria sufrio comentarios negativos sobre su cuerpo y eso lo obligo a entrar en una extrema dieta que consistía solo en pechugas de pollo y eso provoco una desnutrición.

Pero su salvación llego en un momento que ellos no esperaban y que fue una bomba que altero sus corazones y mentes, sin embargo, no confiaban en que ellos se acercaran sin tener malas intenciones, Yoongi y Namjoon debían entender que esas dos personas estaban muy heridas y que confiar en una persona externa que no fuera su única compañía iba a ser difícil. Intervenir en el curso de una vida es muy pesado, sobre todo cuando entran de manera violenta y dura en su existencia, para Jin, Namjoon llegó en un momento correcto, sin embargo, no podía confiar tan fácilmente en el aun cuando los defendieran de unos matones que no tuvieron piedad para insultar a el y al pequeño de mejillas regordetas que era su único amigo en toda esa maldita escuela.

Para Jimin, Yoongi fue su sol en un momento de tormenta extrema, llegó para iluminar su vida pero tenía que entenderlo y buscar que no lo dañara como el resto de individuos que lo rodeaban, iba a ser un camino difícil, sin embargo ellos podían mejorar y dejar entrar poco a poco a dichos chicos a sus corazones.

En otro lado, se encontraban dos omegas concentrados en terminar sus trabajos que les había puesto el profesor de ciencias, ambos estaban concentrados en realizar los problemas y que cuadraran los resultados, el profesor estaba distraído en leer un libro o contestarte a la chica que había conseguido por internet para ligar que estaba muy fuera del contexto de su salón, los compañeros de Jin y Jimin no se hicieron esperar para molestarlos, comenzando con el menor de ellos. Minseok aventó varias bolas de papel directamente a su cabeza distrayéndolo de lo que estaba haciendo, eso molesto a Jin.

-¿Qué haces marica? ¿Por qué no nos haces un favor y te largas de aquí? –rieron los demás y Jin no pudo soportarlo y se giró a decirles algo-.

-Por qué mejor no se callan y se van a la mierda junto con su asqueroso líder Minseok –soltó con desprecio mirando como todos enfocaban con la mirada a Jin, mientras que el profesor seguía en sus laureles-.

-Nadie pidió tu asquerosa opinión maldito marica, tu junto con el cachetón deberían de largarse de aquí mientras aun tengan dignidad –se levantó de manera silenciosa avisando que probablemente habrían problemas-.

-Yo no te tengo miedo Minseok, al contrario, te tengo lastima. Jamás querrás admitir que te gusta Jongdae –reí quedadamente mientras todos enfocaban con la mirada al chico de cabello negro que destilaba un aura de rabia pura-.

-Eres un maldito... -tomo de la camisa a Jin para elevarlo, sin embargo el profesor ahora fue que se dio cuenta de la situación-.

-Joven Minseok, quisiera por favor ir a la oficina del director y explicarle lo que le acaba de hacer a su compañero Seokin? –lo miro con acusación y enfoco ahora a Seokjin- joven Seokjin, usted también tendrá que ir a la oficina del director a contar su punto de vista así que vallan.

Con un semblante de molestia y otro de ira, ambos chicos salieron del salón para ir a la oficina de director y entablar una conversación acerca de lo que había pasado en presencia del profesor que más que estar pendiente estaba en las nubes pensando en el próximo polvo que tendría esa noche.

-¿Cómo... como sabes que me gusta Jongdae? –Habló en voz baja el chico que iba a lado de Jin-.

-Es muy obvio Minseok, todos los días vas y lo observas de lejos cuando está en la práctica de música y jamás le hablas o siempre que te lo encuentras le das la vuelta, ¿Crees que no te haces notar? –dijo Jin siendo obvio en las palabras que empleo para el uso de la referencia-.

Cuando ambos llegaron a la oficina, se sentaron en las sillas de afuera esperando que el director los atendiera, sin embargo, en el momento en que iban a entrar después de varios minutos, un chico salio de la oficina con el rostro decaído y triste.

-No vuelvas a hacer esas cosas Jongdae, golpear a tus mayores te traerá problemas, además, no debes meterte en asuntos que estan totalmente fuera de tu jurisdicción. –dijo un hombre mayor de cabello canoso-.

-Pero director, ellos se atrevieron a insultar a esa persona, no pude quedarme de brazos cruzados –pronuncio de manera enojada-.

-Lose joven Kim, pero no quiero que se vuelva a meter en problemas por favor, ahora retirese a su salón, pueden pasar chicos –el director entro y seokjin tras el dejando a Minseok afuera mirando sonrojado al otro chico, este le sonrio de vuelta y se fue por el otro lado-.

Alrededor de 40 minutos pasaron entre las discusiones del chico de cabello obscuro y Seokjin en donde narraban los hechos dependiendo de su punto de vista y digamos que el director estaba comenzando a perder la paciencia, sin embargo, solo castigo a Minseok. Ambos salieron de la oficina después y cada quien tomo un rumbo diferente. Seokjin caminaba hacía la salida para encontrarse con Jimin que le tenía su mochila ya lista para irse a su casa, más no esperaba ver a aquel chico de piel morena esperando por el en la puerta de la entrada.

-Hola Jin, ¿Quieres ir conmigo a tomar un café?

Decir que Seokjin estaba más que feliz por esa invitación sería una blasfemia y claro que aceptaría con tal de estar toda una tarde en compañía de ese hermoso chico de hoyuelos.

Namjoon y Jin tenían una cita.

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HOLA!!! LO SE CUANTO TIEMPO DE NO PASARME POR AQUÍ NO?

ENNNNN FIN! Ahora tengo un poco más de tiempo para escribir ya que tengo prácticas y no he tenido demasiado trabajo, así que digamos que estoy feliz!

Espero y les guste el nuevo cap, tratare de actualizar más seguido♥

mariiaRUSH

Be my Boyfriend -Namjin-Where stories live. Discover now