A Través De La Ventana ||C.V. Y TÚ||TERMINADA||

Capítulo 10 "Descubierto"

—¿Es normal que seas tan bella? —Dijo Christopher, haciéndome sonrojar

—Pues tu no te quedas atrás, eres muy guapo —Dije mientras sonreía, el me dejó ver su perfecta dentadura con una sonrisa

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Paso un mes y Christopher venía todas las tardes que podía a mi casa, hablábamos, comíamos, veíamos películas juntos

Todo iba de maravilla, hoy, Christopher y yo jugábamos monopoly, mientras yo restregaba mis propiedades en la cara de Christopher, escuché un claxon

Me levanté con rapidez y cuando estaba apunto de asomarme por la ventana, Erick entro con rapidez

—¡Mamá y papá están aquí! —Dijo Erick, entre en un pequeño episodio de pánico, mire a Chris y el rápidamente corrió hacia mí closet

—Escondete, no salgas y no hagas ruido —Dije en susurró audible, Christopher no dijo nada

Escuchamos la puerta abrirse, Erick y yo corrimos hacia la planta baja a recibirlos

—Hola mamá y papá, ¿Que hacen aquí temprano? —Dijo Erick un poco nervioso, si nuestros padres se enteran de que Christopher estuvo aquí, nos matan

—No había mucho trabajo hoy, así que decidimos llegar temprano para cenar y pasar un rato con ustedes —Dijo mi padre, pero entonces mi madre se puso seria y comenzó a oler

¡El perfume de Christopher!

Apesar de desinfectarse y cambiarse, el olor a su perfume se queda impregnado en el, un delicioso olor a colonia masculina

—¿Traes nueva colonia, Erick? —Dijo mi madre con el entrecejo fruncido

—Ah, si, está es nueva —Dijo Erick nervioso, mamá no le tomo interés y se dirigió a la cocina, Erick, papá y yo nos quedamos en la sala, mientras yo vigilaba cada movimiento de mi madre

—______, necesito usar tu computadora, por favor —Dijo mamá, el miedo comenzó a correr por todo mi sistema nervioso

—¿Que? ¿Para que? Usa la tuya o la de la oficina —Dije rápidamente, mi mamá negó

—Necesito una computadora de escritorio, la de la oficina está descompuesta y la mía es laptop, solo serán unos minutos —Dijo mamá mientras se secaba las manos —Vamos, en lo que termina de cocinarse la cena —Dijo mamá antes de comenzar a subir las escaleras, mire a Erick y el se miraba tenso, le di una mirada cómplice y comencé a subir las escaleras tras de ella

Ella entró a mi habitación y vio las piezas del monopoly, me miró extrañada

—¿Con quién jugabas? —Dijo mi madre

—Ah, con Erick —Dije tratando de sonar convincente

—Donde... —Dijo pero entonces se quedó callada, comenzó a olfatear más profundo y me miró con el entrecejo fruncido, comenzó a pasar toda su mirada por mi habitación, fue entonces cuando se agachó a ver debajo de mi cama

—¿Que-ee haces? —Dije nerviosa, mi mamá se miraba molesta

—¿Quien estuvo aquí? —Dijo mi mamá con voz recia, mis nervios se alteraron

—¿Que? Nadie, mamá, solo hemos estado Erick y yo —Dije nerviosa, mi mamá se dirigió al closet y abrió la puerta, cerré mis ojos y me sentí muerta

—¡¿Qué haces en mi casa?! ¡Fuera de aquí! ¡Cómo se atreve a entrar a mi casa de esa manera! ¡Largo! —Escuche como mi mamá gritaba, a los segundos mi padre y Erick entraron a mi habitación, mi mamá empujaba a Chris fuera de la habitación —¡Hablaré con la policía! ¡Estas invadiendo propiedad privada! ¡No te quiero volver a ver cerca de mi casa! ¡Ni siquiera te atrevas a mirar a mi hija! —Dijo mi madre mientras lo empujaba, me acerque a ella y trate de que lo dejara

—¡Mamá! ¡Ya basta! ¡Déjalo en paz! —Dije mientras trataba de que lo soltará

—¡Vete a tu habitación ahora! —Dijo en un grito mi madre, ví como mi padre se acercaba a mi y comenzaba a meterme de nuevo a la habitación

Escuché la puerta abrirse y por mi ventana ví a Christopher salir de casa, mi mamá seguía gritándole

Mis ojos se cristalizaron, la poca felicidad que había adquirido, me sería arrebatada

A los segundos mi madre volvió a subir, estaba hecha una fiera

—¡¿Que diablos hacia el vecino en tu habitación?! —Dijo mi madre, pero me quedé callada —¡Sabes lo peligroso que pudo haber sido que el estuviera aquí! ¡Pudiste haber muerto! —Grito mi madre con desesperación, comencé a soltar las pequeñas lágrimas que se habían acumulado —¡Quien sabe que estuvieron haciendo! ¡Estoy segura de que el se quiere aprovechar de ti! ¡No quiero que vuelvas a hablar con el! —Dijo mi mamá y enseguida la mire a los ojos negando —¡Está prohibido que alguien más pise está casa! ¡Incluso Margoth! —Dijo mi madre enojada, ¿Que? ¡¿A Margoth?!

—¡No! ¡No puedes hacer eso! ¡Margoth no tiene nada que ver! —Dije a la defensiva

—¡No me interesa si Margoth tuvo o no que ver! ¡Yo te lo estoy prohibiendo como un castigo! —Dijo mamá enojada, pero sentí demasiada impotencia

—¡¿Acaso quieres amargarme la vida?! ¡Me quieres tener toda la vida infeliz! ¡Te odio! —Grite, entonces ví como alzó su mano y la dirigió a mi mejilla, el ardor creció al instante

—¡No me hables así! —Dijo mi madre

—¡¿Que?! ¡¿Acaso no es la verdad?! ¡Perdón por querer vivir mi vida como una persona más! ¡Perdón por tratan de sentirme bien o como una adolescente! ¡Eres la peor mamá! —Grite furiosa...