Fragmentos Eróticos

Christopher & Axel I

Sinopsis:  Un amigos con beneficios que terminó con ambos enamorados, tras varios intentos de parte de Axel por evitar a Christopher, este termina confrontándolo y ciertas verdades salen a la luz.  

Tags: lencería, daddy kink, fluff. 

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Axel

—Axel, van a venir amigos a la casa por lo que te pido, por favor no vayas a incomodar como la vez pasada. —dijo Rachelle volteando a ver su reloj cada dos minutos.

—No te preocupes Rach, hace mucho que no tengo un "ataque", como tú les dices.

—Bueno —Suspiró—. Confío en ti.

En cuanto Rachelle terminó de hablar el timbre de la casa sonó. Lo primero que se me vino a la mente fue que debería irme a mi habitación a esperar que ellos terminaran con lo que tuvieran que hacer, para después volverlo a pensar y darme cuenta de que era algo demasiado grosero, me levanté del sillón en el que estaba sentado para ir a abrir la puerta. En cuanto la abrí me llegó el olor de la colonia que tanto conocía.

Christopher.

—Hola princesa. —dijo con su típica sonrisa pícara.

Salí corriendo rumbo a mi habitación, en este momento no quería encontrarme con él después del incidente que había ocurrido esta mañana. Lo único que quería hacer era encerrarme en mi cuarto a olvidar todo que pasó esta semana lo de esta semana. Todo lo que pasó con Christopher esta semana.

Unos fuertes golpes en mi puerta me hicieron salir de mi ensoñación, lo más seguro es que fuera Rachelle para regañarme por cómo reaccioné con Christopher. Abrí la puerta mientras empezaba a excusarme con Rachelle por lo que había pasado.

—Rachelle, perdón. No quería reaccionar así... —para mi sorpresa no era Rachelle quien estaba al otro lado de la puerta, sino Christopher—. ¿Qué haces aquí? ¿No se supone que deberías estar haciendo un trabajo con Rachelle?

—Se supone, pero llegó su novio, que también está en nuestro equipo, fui al baño y cuando regresé los vi dandose amor. Así que pensé ¿por qué no hacerlo yo también, pero con Axel?

—¡¿Estás loco?! —le grité.

—Tranquilo cariño, que solo era una broma. —dijo ensanchando su sonrisa. ¿Qué no se cansa de sonreír? —¿Puedo pasar?

—Como quieras. —dije alejándome de la puerta.

Decidí dejar de prestarle atención y ponerme a trabajar en otra cosa. Y es difícil no prestarle atención al inmenso cuerpo de Christopher. Conforme rondaba por mi habitación, lo escuchaba dar jadeos de sorpresa.

—Princesa, —jadeó sorprendido —no sabía que te gustara el heavy metal. — dijo, la sorpresa aún presente en su voz.

—Amor, hay muchas cosas que no sabes de mí. —me sonrojé al haberme dado cuenta del apodo que le había puesto. —Haz como si no hubieras escuchado eso. —le murmure aun avergonzado.

—¿Cómo quieres que lo olvide? —dijo Christopher, que se había acercado hacia el escritorio sin haberme dado cuenta, y me susurraba al oído. —Si es como he querido que me llames desde que regresaste.

Tercera persona

El morocho recargó la cabeza en el hombro de Axel, recibiendo un estremecimiento del rubio.