Primer y último día en el reformatorio

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Al despertar note que alguien me cargaba en sus hombros, como si de una bolsa de basura se tratará, entro a una habitación, me tiro en una camilla y de inmediato me desperté del todo.

-Sientate quieto. -Dijo una señora con mala cara-

Boxter~¿Que mierda hago aquí? -dije limpiando mi nariz la cual tenia sangre seca-

Una bofetada por parte de un hombre gordo alto con aspecto sucio y olor a vodka, me tiro en la cama y habló.

-Aprenderás a respetar o aprenderás a soportar el dolor. -dijo sentándome en la camilla nuevamente-

Obvio que no respetaría a alguien que me golpea y no seria la primera vez que alguien me golpeé, solo guarde silencio y deje que la señora con cara de limón me curara.

-Al final del pasillo esta el comedor, si te apuras tal vez puedas comer de la basura. -Dijo al terminar de curar mis golpes y heridas-

Mire directamente al maldito idiota que me golpeo, ese gordo asqueroso, me repugnaba tanto, me recordaba a mi padre y incluso golpeaba como él, al salir de la habitación vi a varios chicos y chicas dirigiese hacia el final del pasillo hasta unas grandes puertas, al entrar note que era el comedor "que suerte, estoy muriendo de hambre" pensé y tome una bandeja, cubiertos, deje que me sirvieran comida y me senté en el ultimo banco lejos de todos, comencé a comer rápido, en el momento que me descuide vi que un chico con lentes se acerco a mi y con gran timidez habló.

Tomás~¿P-puedo sentarme aquí? -dijo cabizbajo y sin mirarme-

Boxter~¿Eres tartamudo o ciego?

Tomás~¿Qué? -respondió confundido-

Boxter~Eres estúpido al parecer, largo de mi vista. -dije comiendo-

Ángela~No deberías hablarle así. -dijo una voz suave y tierna-

Boxter~¿Y a ti que mierda te importa? Nadie pidió tu maldita opinión de como tratar a las personas. -dije sin quitar los ojos de mi comida-

Ángela~Hola, Tomás ¿Estas bien? Ven sientate. -Dijo con una sonrisa la cual alcance a ver de reojo-

Tomás~Hola, Ángela, estoy bien. Gracias -Se sentó al frente mío y la chica a mi lado-

Ángela~¿Eres el nuevo? -pregunto sonriente-

Boxter~No te importa, no los quiero a mi lado, no quiero amigos. -dije molesto-

Ángela~¿Como te llamas? -pregunto feliz-

Me di vuelva y la mire de frente, su sonrisa era blanca y linda, su cara era muy bonita y sus ojos eran del color más claro que vi en toda mi vida. (celeste) Eran profundos y muy lindos, su pelo castaño casi con ondas brillaba, por un momento me quede callado contemplando lo bonita que era.

Boxter~¿Qué quieres?

Ángela~ Se que eres al que llaman... Boxter, que le robaste a alguien importante y te trajeron aquí porque eres malo. -poco a poco acercándose con los ojos brillante sobre mi-

Boxter~ No te acerques más. -dije serio- Si soy yo. ¿Es todo?

Ángela~ Hnmm no creó que te llames Boxter. -dijo pensativa-

Boxter~ Ya, largo. No estaré en este lugar tanto como para que seamos amigos, no quiero amigos. -me di vuelta hacia mi comida sin darle atención-

Ángela~¿¡Vas a huir!? -me miró emocionada-

Boxter~ No grites.

Ángela~ ¿Cómo lo harás?

Tomás~ Shhh Ángela, sabes que no podemos huir de este lugar. Es imposible y aún así, si lo hacemos estamos muy lejos de la sociedad. -hablo acomodando sus lentes-

Boxter~ No tengo un plan, pero se que me voy a ir -termine la conversación mirando al chico de lentes-

Ángela~ ¿Me harías un favor? -me miro con esos ojos muy tierna-

Boxter~ No.

Ángela~ Nos llevarlas contigo, por favor -puso algo de sentimiento en las ultimas palabras y resalto la "R"-

Boxter~ Serian una carga y aun no se como salir de aquí.

Ángela miró a Tomás y sonrió.

Tomás~ No me mires así, no lo haré, no seré cómplice de esto. -negó rotundamente-

Ángela~ Él nos puede sacar de aquí, estoy segura de que él nos puede sacar. -hablo en modo de suplica-

Tomás~ Hay un riesgo grandísimo y podemos incluso morir.

Ángela~ Prefiero morir afuera antes de morir aquí.

Tomás~... Okey, lo haré -sacudiendo su cabeza en negación-

Boxter~ ¿Quién les dijo que yo los llevaría?

Tomás~ Si quieres salir de aquí antes del próximo mes, te sugiero que nos lleves.

Boxter~ ¿Qué hay el próximo mes?

Ángela~ Tomás se entero de que pondrán chicos más grandes en la escuela, eso significa que nos golpearan y nos usaran... Además... A las chicas se las llevan al cumplir 13 y yo cumpliré 13 necesito salir de aquí. -dijo suplicando-

Boxter~ ¿Saben lo complicado que sera salir de este lugar nosotros 3?

Tomás~ No somos 3... somos 4

Boxter~ ¿Por qué 4?

Ángela~ Aun falta Marisa, ella nos abrirá las puertas -tomo aire como si estuviese desanimada-

Boxter~ Okey. Maldición, saldremos de aquí....-mire hacia delante y vi un grupo de chicos acercándose entre la multitud- genial es hora de la bienvenida. -tome la bandeja de comida con firmeza y me levante-

Un chico de unos 15 años se paro frente a mi y me miro fijo.

-¿Eres el pequeño Boxter? -su voz se escucho fuerte y alto, me miro y cerro su puño-

Boxter~ Si ¿y que? -al terminar la oración el adolescente intento golpearme, logre evitar el golpe con la bandeja para luego con fuerza golpear el rostro del chico, acto seguido de recibir un golpe por uno de sus colegas-

-¡Sobre él! -grito el adolescente con la cara lastimada por el impacto de la bandeja-

Tome distancia y me posicione de forma defensiva, jamás aprendí a pelear pero esto sería bueno para aprender.
Uno de los chicos golpeo mi rostro y caí de espaldas de inmediato "esto no funciona" pensé y me levante rápido, pensé durante unos segundos en la forma que me pego y hice lo mismo con un resultado aun mayor acto seguido de ponerme en posición y esperar el siguiente contrincante, lo cual no paso como creí, 4 chicos se acercaron y me agarraron de piernas y brazos un 5to comenzó a golpearme y luego me soltaron.

-Bienvenido a "Refugió" maldito estúpido -patio mi rostro y se fueron lentamente-

Por mi parte quede en el suelo tirado sangrando pero aun consciente, vi a Tomás de un lado y a Ángela del otro, me llevaban arrastrando hasta una habitación, cerraron la puerta y empezaron a curar mi rostro.

Boxter~ Sera hoy.

Tomás~ Estas loco, ¿sabias? Eres un loco.

Boxter~ Saldremos de aquí esta misma noche -me senté y los mire fijo-

Ángela~ ¿Enserio? -pregunto casi emocionada Ángela-

Boxter~ Si -logre levantarme entre quejidos- llamen a Marisa, ahora empezaremos a planear todo.

Demon y ÁngelaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora