Un Estudiante De Secundario (Hiei x Kurama) ♡

capitulo 5. Sospechoso

Golpeó la puerta con aire ansioso. Era viernes. Kurama abrió, sonriendo.

-Hola Hiei, pasa…- El pelirrojo se le había adelantado, y lo había invitado él a cenar a su casa. Hiei insistió en ayudarle a cocinar, aunque no tuviera mucha idea de cómo.

-¿Quieres que empecemos ahora?- Colgó la campera en el perchero.

-Si, ven- Kurama lo llevó a la cocina- Tú corta las verduras, yo soy algo torpe con el cuchillo-

-¿En serio? Debes tener cuidado…-

-Ni que me hubiera cortado un dedo-

-Aún no- Sonrió.

-¡Hiei!- Rio el pelirrojo.

Cenaron con una música suave de fondo. Hiei había estado toda la noche, buscando el momento perfecto, pero aún no lo había encontrado.

-Hiei ¿Qué pasa? Estás como distraído-

-No es nada-

-Hiei, dime que te pasa-

-Bueno… es que, no sé cómo decirlo-

-¿Qué cosa? ¿De qué hablas?-

-Es que- Hiei suspiró con la mirada baja- Llevamos un mes saliendo y…-

-¿Quieres dejarme?- Los ojitos tristes, una punzada en el corazón.

-¿Qué? ¡No! No, Kurama, no es eso, tranquilo-

-¿Entonces que es? Dímelo, no me asustes así-

Hiei se puso de pie, caminó hasta quedar junto a él- No sé cómo empezar, asique… te lo diré directamente- Kurama tragó saliva, él se arrodilló- Kurama ¿Quieres ser mi novio?- Llevó una mano a su boca, sorprendido, soltando un sollozo de alegría.

-Hiei…-

-¿Qué decides? ¿Serás mi novio?-

-Si… si- Dijo emocionado. Hiei le colocó el anillo y lo besó.

-Te amo- Le susurró al oído.

-Yo también te amo- Dijo aferrado a su camisa.

-Kurama…- Se besaron, yendo hacia la cama, dejando las camisas en el suelo del pasillo.

Hiei encendió la lámpara y dejó desnudo a su amante, entre besos, caricias y dulces palabras de amor.

-H-hiei…- Kurama suspiró. Hiei se quitó la ropa y le hizo el amor. No era sólo una entrega del cuerpo. Entregaban también el alma y el corazón, demostrándose amor por primera vez.

Kurama se sentó en sus caderas, loco de lujuria, moviéndose sobre el miembro erecto, introduciéndolo y sacándolo de su interior. Hiei, debajo, admiraba el delicioso espectáculo, del rostro sonrojado, los labios rojos, los ojos entrecerrados y el cabello ondeándose con el movimiento.

-Ah-ah haaa- Jadeó mientras Hiei le acariciaba las caderas y lo ayudaba con el ángulo- ¡Ah, Ah!-

Hiei se sentó en la cama, con el pelirrojo en sus caderas. Se abrazaron, entregándose al placer.

Hiei lo masturbaba y lo ayudaba a moverse, cada vez más rápido, hasta el final.

-haaa- Kurama suspiró recostado en su pecho.

-Te amo- Lo besó con pasión, con deseo, con lujuria.

Lo hicieron de nuevo. Kurama se recostó en el borde de la cama, con las rodillas apoyadas en el suelo y Hiei lo penetró desde atrás.

-¡Ah!! ¡¡Dios Hiei!!- Los nudillos blancos sobre las sábanas.

-Ku-Kurama ¡Ah! T-te a-amo-

-Yo… tamm- también… ¡Aa-ah! Haaa-