ÁNGEL DE LA NOCHE/ Kai y Tú [EXO]

Capítulo 4.

Amaneciendo con Kai

Me había quedado dormida en segundos, no sabía lo que pasó la anterior noche.
Me desperté en una habitación, sola, ¿Dónde estaba? No recordaba si había dormido con él o solamente me dejó ahí sin más.

Me levanté y decidí darme una ducha, la necesitaba urgentemente, mi pelo estaba sucio.

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Al salir de la ducha, me peine primero el cabello y me puse la ropa que había traído la anterior noche, si supiese que dormiría aquí traería una ropa por lo menos para cambiarme. Noté cómo alguien habría la puerta.

-Buenos días, ¿Qué tal amaneciste?- Era Kai,  estaba arreglado y tenía una bandeja con tostadas, zumo, café y una rosa.

-Buenos días, daddy, amanecí bien-.

-No me digas Daddy, llámame Kai, acordamos que solo me llamarías daddy en lo sexual, por el resto del día me puedes llamar Kai, por cierto... te he traído el desayuno me imagino que tendrás hambre-.

-Muchas gracias, tiene muy buena pinta- Comencé a desayunar, nunca me habían traído el desayuno a cama, no estaba acostumbrada a estas cosas.

-Me he levantado y he pensado que después de estas vacaciones no querrías otra vez estudiar... ya está todo pagado y ya tienes una plaza asegurada después de estas vacaciones en la mejor universidad-.

-Dios que gran noticia, y puedo saber... que universidad será donde estudie-.

-Iras a  Harvard, una universidad de prestigio, no quiero que desperdicies tus estudios-.

-¡¡¡Qué!!! No me lo puedo creer-.

Estaba sorprendida de que alguien se preocupase tanto por mis estudios, no es cualquier universidad, ¡¡es Harvard!! Desde pequeña siempre quise ir a una universidad de prestigio, y al acabar el verano iría a una.  Nunca pensé decir esto pero... ojalá ya se acabe el verano y comenzar en mis estudios de nuevo.

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Se puso su colonia, peinó su pelo y suspiró.

-Tengo que ir a hacer algunos negocios en KIA, ¿Quieres acompañarme?- Dijo Kai pensativo.

-Si usted quiere... ¿No sería una molestia?-

-¿Molestia? ¿Usted? Jajajaj- Kai empezó a reírse como si fuera un chiste lo que acababa de decir.

-¿Qué es lo que le hace gracia?-.

-Lo que has dicho, no eres una molestia- Me miró y me acarició la cara.

Íbamos hacia la puerta hasta que alguien timbro. Estaban timbrando seguido y petando a la puerta sin parar.

-¡Abreme ahora mismo! ¿Crees que me puedes hacer esperar? ¡Maldita niñata!-.

Kai abrió la puerta y miró a la persona como si lo fuera a matar. Kai suspiró y mantuvo la calma.

-¿Quién es usted? Y a que viene tantos gritos-.

-S-soy el encargado del piso, busco a _____ para que me pague si no se larga, y ¿usted quién es?-.

-No me tutee, no le he dado permiso a hacerlo. Soy Kim Kim Jong-in el...-

-Si, si... si pretendes quedarte de gratis, estás equivocado, o pagas o te largas-.

Kai ajustó su chaqueta, miró al encargado y suspiró. ¿Acaso el encargado no se había dado cuenta de su traje de marca?

-Ja... que gracioso, no me quedaría en este lugar ni aunque fuera lo último que hiciera- Sacó su billetera, cogió un cheque y poniendo la cantidad exacta para el encargado. -Aquí tiene, todo el dinero que le debe y el último día que estará en este basurero-.

Kai cerró la puerta en todo el morro del encargado. Saco toda la ropa del armario y los apuntes.

Me quedé perpleja.

-¿Qué haces?-.

-Salvarte- Cogió dos cajas y puso toda la ropa y los apuntes en ellas. -No consentiré que viva así y con estas condiciones del piso, no se cae todo de milagro-.

-Eso me parece genial, pero... ¿¿A DÓNDE VOY A IR AHORA??-.

-Como ya hablamos del contrato, dije que yo le iba a cuidar, así que vivirás conmigo-.

-Esperabame aquí, voy a dejar las cajas en el coche-.

Mientras Kai dejaba todas las cosas en el coche, me estaba cuestionando lo de vivir con él, a ver, por una parte me gustaría pero por otra no sé...

-Ya estoy aquí, una chica no debe pasar por ese tipo de esfuerzos, por eso debo ayudarte, no me gusta ver a la gente así-.

Cuando salimos de ese piso mugriento, todos nos observaban, estaban todos murmurando y diciendo ¿Qué hace esta chico con una chica como esa? ¿Por qué se va con él? Envidia eso es lo que tienen, puro cotilleo para saber a dónde voy y quien es mi acompañante...

Subimos a su coche y nos dirigimos a su mansión, estaba emocionada por vivir aquí y por otra nerviosa por vivir con él.