Cláudio se encontraba con el corazón roto después del rechazo de Emilia, sin imaginar que un fuerte sentimiento por ella Fuera mover tanto con él, dejándole completamente apasionado haciendo su corazón latir fuerte Por ella. Cláudio será capaz de c...
- Donde él está? - sus ojos estaban suplicante y mareados de lágrimas.
Lo doctor que los acompañaba pidió la palabra y dice:
- señorita Ruiz, su novio, bien és que el coche lo cual él manejaba chocó con un camión temprano alrededor de las siete y media de la mañana - dije el doctor a Emília.
Emília sintió sus piernas debilitarse y su corazón vacilar un latido.
- Que quiere decir con eso? - la desesperación llegada a sus ojos lentamente - elle está bien, no está? - pregunto Emília.
Jessica agarro la mano de ella nuevamente y de esa vez ella no se alejor necesitaba del apoyo de la cuñada para mantenerse de pie delante do que estaba apunto de oir.
- Emília el coche que él manejaba quedo destrozado en medio de la calle. Y elle está muy mal en el hospital - dije Kevin.
- Él va quedar bien, yo se que va - dije Emília - mientras lágrimas mojaban su rostro.
- lo siento mucho señorita Ruiz, más es probable que él pueda morir o no despierte del coma en que se encuentra - dijo el doctor a Emília.
Allí en el pasillo de acceso a los cuartos, una niña estaba paralizada, usando un pijama de animales y pantufa de oso.
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Kevin la vio, sus ojitos verdes estaban asustados. Con el corazóncito latiendo fuerte en el pecho, ella salió corriendo para su cuarto.
- Martina! - Emília dije asi que escucho la puerta del cuarto de la hija cerrar con fuerza.
- creo que ella escucho todo - hablo Kevin, preocupado.
Emília ya no lograba segura las lágrimas, el miedo de pierde a su novio y padre de sus hijas la apavoraban. Eso no podria está pasando, mucho menos tan cerca de su boda.
- señorita las visitas hoy estarán liberadas para ustedes se quisieren ir verlo - puede llevar la niña, más ella no podra quedar con vos en el hospital - dijo el doctor a Emília.
- está bien ahora por favor, pare de hablar - Emília pidió - él va sobrevivir. Claudio nunca dejara a mi y las niñas jess - dije ella con los ojos llenos de lágrimas.
- yo voy hablar con ella - dije Jessica yendo haste el cuarto de la sobriña.
Jessica abrió la puerta lentamente miro en vuelta y la encuentro acostada en su cama, con el rostro escondido en la almohada. Su llorito y su sollozo eran notados de lejos.
Ella se a cerco sentandose en el borde de la cama.
- Amorcito - dije Jessica, acariciando la espalda de la sobriña. Al oir la voz de su tia, la pequeña lloro aun más - su papá está bien - aseguro intentando tranquilizarla, más ni ella misma tenia certeza - él solo tuve un problema con el coche, más él va a está bien - siguió reconfortandola.
La niña viro, quedando de barriga para arriba.
- titia - sus ojitos estaban llenos de lágrimas y la boca projectaba un punchero - yo no me despidi de él - dije sintiendose cupable - cuando yo desperte papá ya tenia salído - su barriga temblaba por cuenta de los sollozos y de su lloro - aquelle señor dije que mi papá va morir - entonces el lloro la domino otra vez.
- Desesperada, Jéssica la abrazo trayendola para su colo - eh, eh mi amor, no queda asi, su papá no va morir. - hablo a sobriña.
Martina miro para la tia, aun protegida en sus brazos.
- No quiero que papá muera titia, no quiero quedar sin el amor de mi papá - hablo sollozando.
- Jessica beso la frente de la sobriña reconfortandola - más su papá no va te dejar, mi bonequita. - hablo a Martina.
- Martina sorbió - tu promete titia.
Jessica no sabia se debia promete algo que no estaba en sus manos, más era solamente una niña, y al fin y al cabo la esperanza aun vivia en sus corazones. Era posible, si que Claudio despertará del coma por amor a su hija.
Pasando las manos en el rostro mojado de la sobriña, Jéssica la invito a salieren del cuarto.
- ven, mi bonequita, su mamá necesita de ti ahora. Ustedes necesitan ser fuertes para que su hermanita no sufra viendolas llorar - hablo a sobriña.
Martina balanzo la cabeza positivamente. Jessica la puso de pie en el suelo, y juntas fueron de manos dadas haste la sala. Asi que vio su mamá llorando, Martina corrió para su colo en un intento de reconfortarla.
- Él va despertar mamá - dije en el momento en que secaba las lágrimas de su madre - faltan pocos dias para mi cumplañeos, y yo voy a pedir para dioscito que mi papá despierte. No quiero gana regalo ninguno mamá, ninguno mismo mamá, solo quiero que mi papá despierte y vuelva para nosotras - sonrio otra vez.
Emília esbozo una leve sonrisa delante de la esperanza inocente de su hija.
- No llore mamá - Martina pidió a Emília.
El doctor estaba de pie al lado del sofá, y le dice a Emília.
- las vamos a esperar en el hospital dentro de poco señorita Ruiz, con licencia! - dije el doctor, yendo en dirección a puerta.
[...]
Algunas horas después...
En el Hospital
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El doctor acompaño Emília haste lo cuarto donde estaba Claudio.
- Buenas noches! - hablo él a mi.
- Buenas noches! - conteste a elle.
En el cuarto
- Mi amor, voy a estar contigo - mal acabe de decir la frase y adormeci sobre su pecho agarrando la mano de clau.
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