¿Han escuchado sobre el hilo rojo del destino?
Pues yo no creía en él hasta que volví a Tailandia y mi herma se iba a casar.
La vida perfecta cambia y se vuelve un desastre de emociones que se me van de las manos, solo por que lo conocí...
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#19 en...
Salimos de casa, Bonne no me quería decir a donde íbamos. –Bonne...Vamos de compras–Sonreí
–¿Por que tienes que arruinar esto?–rodó los ojos–Quiero comprarte todo lo que quieras–Tomo mi mano y le dio un beso–Y lo siento si venimos caminando, es que...Quería tomar tu mano–
–Como cuando iniciamos a salir–asintió–Me gusta esto–
–Aparte mi auto se averió– el camino a la plaza fue largo, pero me gustó mucho ir caminando por muchos lados y ver cosas que hace mucho no veía, recordar fechas y lo mejor era la compañía Llegamos a mi paraíso, las tiendas como ya regresaba a Tailandia compraría un poco de ropa ya que sería la última vez que compraría aquí Entramos a la primer tienda donde encontré bastantes camisas y algunas sudaderas que compre –¿Cómo se ve?–Salí del probador con un pantalón negro
–Bien–Alce una ceja, Bonne ya estaba aburrido por tener que acompañarme
–Bueno lo llevaré, ¿Quieres ir a comer?–Me volví a meter
–Si, tengo que cagar–
–Yo igual, Bueno vamos pagamos y vamos a cagar que me dio diarrea, y no puedo aguantar mas–se río un poco
–Normal en ti–Tomo todas las bolsas del suelo y salimos de la tienda
Birbbirb
–Mi teléfono–Busque en mi bolsas–Potter–sonreí
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–hermanito¿Cómo estás?–
–Bien, de hecho iba a comer con Bonne –gire la cámara y lo mostré caminando–Venimos de compras–
–Oh...que bueno–Sonrío–Espero verte pronto, Hermano te extraño–
–Yo igual, me encanta verte toda sudada por el gimnasio–Me senté en la mesa de un quiosco en lo que Bonne iba al baño
–jajaQue gracioso, por cierto, Hablaste con Bonne, ya sabes en dos días más te vienes a vivir a Tailandia–asentí–y ¿Que paso?–
–Bueno pues...– Inicie a contarle todo lo que hablamos desde el desayuno en la cama hasta los anillos, Bonne llegó con dos bandejas de pizza y se sentó a la mesa
–Plan, tengo un plan para mañana–hice un puchero–Perdon no es mi culpa que te llames Plan–
–Potter, ¿Hablamos cuando vuelva a casa? Es que quiero ir al baño y también voy a comer–
–Si, Ai Plan dile a tu novio que yo pensé el nombre–hizo un puchero– me esforcé en pensar un nombre, bueno ya los dejo en paz adiós– Colgó el teléfono, Bonne sonreía de forma burlona
