Una batalla sin final:

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Ambos caminaron a la sala principal, donde un se mantenía de pie mirando todo con algo de pánico un individuo; Con una chaqueta naranja con capucha la cual llevaba puesta, unos pantalones algo rotos, una máscara de gas, y un par de pistolas Desert Eagle's en las manos. Al notar la presencia de Dante y Neur, apuntó sus pistolas, una a cada uno, dando pocos pasos hacia atrás.

-Si piensan acercarse y atacar, señor toga y... Medieval, preparemse para recibir plomo.. ¡Diganme cómo salir de aquí y pensaré en no matarlos!

Neur soltó una leve risa y se acercó. El individuo jaló ambos gatillos repetidas veces, apuntando simplemente a Neur, pero no salía ninguna bala. Intentó recargar rápidamente a un cargador que sabría que tenía balas. Guardó una de las pistolas para poner ese único cargador en una de las pistolas. Nuevamente jaló el gatillo repetidas veces, pero no se disparaba. Este se gruñó al ver que sus intentos eran en vano. Guardó sus pistolas y miró a quien se le acercaba.

-¿Puedes decirme qué hago aquí? ¿O cómo irme? Acababa de.. –Neur lo interrumpió.

-Perdón pero... Eres Damian, ¿no? Yo te traje aquí por que vi algo que poseías que los demás no tenían.. –Fue interrumpido por el pistolero.

-¿Mis pistolas? No mi hermano, consigue las tuyas.

-No... No son tus pistolas. Quedatelas, hasta mejoralas si es que quieres. Te traje por tu gran valor y apego por tus creencias, tanto que llegaste a sacrificarte, siendo influenciado por un fuerte sentimiento de... Venganza, ¿no?

-Tú qué sabes, no estuviste ahí, o estarías en pedazos. Todo fue destruido en segundos... Y fue increíble verlo explotar.

Dante se adelantó para hablar, mirando directamente a Damian.

-Eres un malvado, ¡un lunático! ¿Cómo llegaste aquí? En este lugar sólo los mejores merecen estar, tú no eres ni una pizca de eso.

Neur le dio un zape, aprovechando que este iba sin casco. Lo miró con algo de enojo al interrumpir su charla, y luego de dar un suspiro siguió charlando, no sin antes responder y callar a Dante.

-Nunca dije que aquí es solamente bondad. Te dije que por estar apegado a tus creencias estás aquí, no por ser bueno o malo. –Volvio a mirar al pistolero– Damian, te llamé aquí para que tu esencia prevalezca, pues tanto como tú, muchas vidas pasadas tuyas no han tenido suerte...

Neur siguió dando la misma charla y explicación a Damian, llevándolo a la sala donde Dante habría sentido conexión vital con un conejo. El guerrero fue a ver la esfera que le habría asignado el creador, viendo que la pequeña criatura que había creado estaba creciendo, progresando...

En un futuro post-apocaliptico, donde todo es envuelto por un sol abrasador

Damian se encontraba con un grupo que llevaba el mismo uniforme que él, una chaqueta naranja y unas boinas del mismo color. Armados todos con unos rifles semejantes a una M-4, pero con mirillas y cargadores extendidos. Damian, llevaba solamente un par de pistolas y una mochila que parecía estar casi llena de cargadores. Estos caminaban con el objetivo de encontrarse con una base, la cual daba energía eléctrica a una ciudadela de supervivientes.

-Chicos, ya se hace tarde, plantaremos un campamento aquí. Mañana a las 500 iremos por la zona irradiada, así que preparen sus máscaras.. ¿Para qué, gente? –Miró a su grupo alzando el puño, esperando una respuesta.

El grupo gritó en coro en tono grave “¡¡Para morir por balas, no radiación!!”

-Muy bien... Comiencen a armar, que se está escondiendo el sol y no queremos que nos atrapen desprevenidos.

EthernalDonde viven las historias. Descúbrelo ahora