Ceguera ||Tsukiyama||°Haikyuu° *One-Shot*

°Cap único°

Mi vista se acababa poco a poco, los doctores no podían hacer nada, a este punto era mas que inevitable. Me quedaría completamente ciego.

Miraba al rededor con desespero, una parte de mi quería aprovechar lo mas que pudiera la vista y la otra sentía que daba igual, de todas formas con el paso del tiempo olvidaría hasta las cosas que solía ver a menudo.

- Ya ni siquiera podre jugar voleibol...-Musite.

Estaba sentado en una de las tantas bancas del parque, escuche mi nombre, sabia quien era, la persona con la que llevaba años de amistad. 

- Yamaguchi...¿Estas bien?

- Sonreí forzosamente- Si...es inevitable.

Él se sentó a mi lado dejando caer un suspiro.

-Lo siento.

- No es tu culpa, Tsukki.

- Eramos compañeros en el salón de química, debí estar mas al pendiente de la cantidad de liquido que vertimos.

- Fui yo el que no tenia los lentes especiales puestos.

- Aun así... dejare de jugar volleybol.

-¡¿Que?! - Gire mi cuerpo hacia donde estaba Tsukishima- ¿Por que?

- Ya no sera...como antes.

- ¿De que hablas?

- No seria justo.

- Tsukki...estoy bien, tú sigue jugando. 

- ¿A donde iras cuando estés completamente ciego?

- Supongo que me iré a un instituto especial, podría quedarme aquí...los maestros dijeron que se me podrían proporcionar libros especiales en Braille pero moverme por los pasillos seria difícil sin ayuda de alguien.

- Quédate. Yo te ayudare.

- No quiero ser una molestia, Tsukki. Seria solo una carga para ti...mañana empezare con las clases para leer Braille.

- No seras una carga, es mas, aprenderé Braille contigo.

- Tsukki...no me trates así...se que lo dices porque sientes pena por mi, pero créeme no es necesario.

- Tal vez, pero igual quiero hacerlo.

- Si te la pasas pegado conmigo...no podrás vivir una vida normal...ni siquiera podrás tener una novia por culpa de  estar cuidando de mi.

- No quiero una novia.

-Ahora puede que no, pero algún día, si la quedras.

- Solo te quiero a ti Yamaguchi.

No entendía que era lo que acababa de escuchar, ¿Ademas de ciego me estaba quedando sordo?, mi mente no procesaba las palabras que acababa de escuchar y el rosto sereno de Tsukki no ayudaba a aclarar las cosas, mi cara se tornaba cada vez mas a un color carmesí. Estaba tan ruborizado que mi cara dolia.

- ¿Q-que dijiste?

- No pensaba decírtelo aun, pero era la única forma en la que te pudiera convencer, no quiero que te alejes de mi, aunque te quedes ciego me gustaría estar siempre presente en tu mente. Quiero ser tu guía, es toxico decirlo así pero, me gustaría que dependas de mi, porque si te vas dependerás de una mujer y no quiero eso, te quiero para mi.

Es tan directo en lo que piensa- No pienso depender de ti, aun ciego quiero mantener independencia...pero también quiero estar a tu lado, quiero que me complementes pero no que me trates como si fuera solo un objeto que quieres tener.

-¿ Así de mal sonaron mis palabras?

- Tsukki, me quedare aquí solo si no dejas el voley.

- Es la única manera, ¿Cierto?

- Si, lo es.

- Esta bien, pero hasta que aprendas a guiarte bien con el bastón yo seré tus ojos en los pasillos.

- Es un buen trato.

Bese ligeramente la mejilla del Tsukki, me puse de pie ante él- Bien, vamonos, mañana tendré que ir temprano al hospital. Realmente extrañare ver...te.

- ¿Que dijiste en lo ultimo?

- Que extrañare ver este paisaje.

- Oh, supongo que lo harás.

-Oh, una ultima cosa.

-¿Que?

- Te quiero, Tsukki.

- Si, yo también, te quiero.

°

°

°

Perder la vista, para muchos la pero tragedia que podría pasarte mientras estés vivo, ya que no podrás ver todas aquellas maravillas que el mundo te ofrece, pero cuando lo vives con la o las personas indicadas hasta la ceguera puede disfrutarse y yo ya encontré con quien la pasare felizmente.

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Fin.