¡HEY! ME DEBES UNA FOTO

MIS PADRES

Capítulo 4

—Mack ¿Te puedo preguntar algo? —Pegunta Shawn sentándose enseguida de ella.

—Si te digo que si ¿Me dejaras terminar mi libro? —Pregunta Mack viéndolo por encima de sus lentes, cierra su libro y lo coloca con cuidado en la mesa de centro y se voltea a Shawn.

—Graciosa, será rápido. —Mack asiente dejándolo continuar. — ¿Por qué estás en tu octavo semestre de psicología y tienes veinte años apenas?

—En realidad cumpliré veintiuno pero en fin...este...digamos que en preparatoria adelante varias materias, tengo una conocida en las oficinas donde modulan todo eso y bueno, hizo algunos ajustes para que mis materias previamente hechas fueran contadas para cuando yo entrara y así en vez de entrar a primer semestre como todos yo entre en el tercer semestre. —se encoje de hombros al ver la cara de impresión de Shawn.

—Entonces ¿Eres una pequeña genio o algo parecido? —le pregunta con diversión.

—Si algo parecido. —Niega sonriendo y tomando de nuevo su libro.

— ¿Puedo hacerte otra pregunta? —Pregunta acercándose un poco más a ella, Mack hace una mueca de nerviosismo que oculta con sus chinos negros, y solo asiente dejando nuevamente el libro sobre la mesa de centro.

— ¿Tus padres dónde están? ¿Viven solo tú y Charlie?

—Andas muy preguntón Mendes. —Lo mira con cierto enojo pero se calma al verlo con cara de perro regañado, Mackenna sabía que él no tenía la culpa y era simple curiosidad, además había pasado hace un tiempo, ya no era doloroso, pero no era algo que le gustara comentar.

—Mis padres...mi madre, Elizabeth y mi padre Alejando, murieron en un accidente automovilístico hace dos años, cuando yo tenía 18 años y Charlie 21 años, ellos se fueron de viaje por su aniversario y cuando volvieron un hombre ebrio se salió de su carril, chocando de frente con mis padres, los tres murieron, dicen que no sintieron nada, que por la velocidad fue instantáneo, pido desde los más profundo de mi ser que haya sido así, ya que me dolería que hayan sufrido por lo menos un segundo, porque...porque ellos eran...eran...—siente como sus lágrimas caen en sus manos entrelazadas y las mira, se limpia la cara sentándola hinchada y muy mojada por las lágrimas.

—Perdón, no debí preguntar, no fue apropiado. —Le dice Shawn al mismo tiempo que la toma y la pone sobre su pecho para abrazarla. Mackenna siente una paz dentro de sí misma que la hace que después de mucho tiempo llore como hace años no lo hacía, sintiéndose protegida.

Cuando por fin se calma le dan unas inmensas ganas de dormir y sin siquiera pedir permiso cae rendida en los brazos de Shawn.

Shawn se da cuenta de que Mack se quedó dormida y la observa dormir, limpia los restos de lágrimas y aparta uno par de chinos para que le dé el aire del abanico de techo, le comenzó a acariciar su brazo para relajarla más aunque estuviera dormida.

Se sentía bien teniéndola sobre él, la sentía tan vulnerable, tan pequeña, que le daba ansiedad no poder hacer nada por ella. Se siente tan cómodo en esa posición que poco a poco también le gana el sueño.

—Ejem... ¡EJEM! —Shawn y Mack despiertan de golpe y se sientan recto en el sillón viendo a Charlie. —Explíquense. —Pone sus brazos en forma de jarra y Mackenna se tiñe de rojo.

—Es que hablábamos de papá y mamá y bueno, después de llorar me dio sueño y me quede dormida encima de Shawn ya que me estaba abrazando y así. —Toma su libro y coloca correctamente sus lentes para después salir de la sala dejando a los dos chicos sorprendidos. A Shawn porque pensó que pondría alguna excusa o mentiría acerca del tema y a Charlie porque por primera vez Mack hablaba sobre lo de sus padres con alguien que no fuera él o Kalep.