Al llegar, Jungkook notó que ya no estaba María, algo extraño para él.
– Amor –
– Dime bebé – musitó Taehyung
– ¿Y María? ¿Donde está? –
– Oh...– bajó su mirada triste – Ella falleció hace dos semanas, por su edad
Jungkook no podía creerlo, estaba en shock.
– Ey.. no llores cariño, era una persona muy gentil que lamentablemente no pudiste conocer cómo se debía, pero créeme que te ama, cuándo te fuiste... Ahh... Me regaño, sabía que había hecho algo mal. Y más porque no te despediste. –
– Me odio – en lágrimas salió de ahí y se dirigió al sanitario.
– ¡Jungkook! – grito mientras corría detrás de él.
Al llegar notó que Jungkook estaba cabizbajo llorando.
– No lo eres cariño, ella también dijo que pasé lo que pase jamás te odiaria por eso, entendía – Taehyung se dirigió hacía el menor para abrazarlo para que así de refugiara.
– Te amo – en lágrimas Jungkook abrazo al mayor para así juntar sus labios suavemente. Al compás de estos, Taehyung interrumpió.
– Tenemos que ir a trabajar amor, pero prométeme que ya no estarás triste – tomó su mentón
– ¿Qué me darás? –
– Sexo salvaje –
– ¡Taehyung! ¡Basta! – éste se cubrió de nuevo en su pecho ya que estaba más rojo que un tomate.
