El gran día ha llegado, de entrar a la universidad, estoy muy nerviosa, mis manos sudan demasiado, pienso en cómo serán mis compañeros, en cómo me tratarán, pero también estoy emocionada, me emociona conocer más personas, es algo increíble, en fin, allá vamos.
Voy en camino a la prepa en mi auto de último modelo, sí, soy una chica de alta sociedad, pero aún así no soy como todos piensan, que presumo lo que tengo, no, no me gusta ser así, yo ayudo a un asilo de ancianitos regalandoles cosas, en fin...
Estoy por llegar, veo muchos chicos que van rumbo ahí la uni, todos vestidos elegantemente.
Voy llegando, me bajo de mi auto y todos me miran, se codean y se susurran uno al otro, esto es poco incómodo pero sabía que pasaría, así que mejor seguiré caminando hasta donde tengo que llegar, la mayoría de los chicos me sonríen, se me empieza a quitar los nervios.
Suena el toque y comienzan las clases, voy hacia mi salón de clases y me siento a esperar que den la clase.
-buenos días jóvenes, soy su maestro de química y espero que trabajemos muy bien y que soporten mi carácter - dijo el maestro, creo que será el maestro más estricto, siento que sí, en eso un chico se sentó a mi lado, era lindo pero no de mi tipo, así que era imposible que me enamorara como las típicas historias donde se enamoran a primera vista, para nada.
Me saludó y ahí comenzamos a conversar.
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AUNQUE NO TE PUEDA VER
AléatoireEsta es la historia de Lua, la chica con 19 años que para ella lo más importante era que las personas que quería estuvieran con ella, como su familia, y algunos amigos, después irán integrándose más personas a su lista. Pero como todos en la vida no...