Parte 18

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Louis estaba cansado, su directora estaba comenzando a ponerse algo exigente con los trabajos que debía entregarle, los avances de sus alumnos y las calificaciones de los exámenes, eso y que las cosas con Harry no iban tan bien como creía que irían después de ese "juntos en esto".

Fue hacía la dirección para firmar la salida, ya quería llegar a casa y recostarse, dormir, no pensar, no sentir.

Rachel: ¿Louis? -Al escuchar la voz de su jefa cerró los ojos y suspiró discretamente.

Louis: ¿Si dire? -Volteo a verle con una sonrisa fingida.

Rachel: Ven a mi oficina, necesito hablar contigo. -La mujer entró a su dirección y Louis trono su espalda al estirarse, dio un bostezo y se encaminó hacia la directora. -Pasa, siéntate querido.

Sin decir nada tomo asiento frente a la mujer, no sabía que pensar, tal vez las calificaciones de sus alumnos no eran las esperadas, o las actividades para sus clases eran incorrectas, no sabía que estaba pasando, ¿debía ser regañado?

Rachel: Tranquilo, quita esa cara de angustia. -Sonrió con calidez, y es que Rachel era una mujer mayor y estaba en su sangre ser maternal, eso no quería decir que les hablaba a sus maestros como niños, sino que se preocupaba por ellos.

Louis: ¿Por qué estoy aquí? -Intento no sonar desesperado, pero fue justo como sonó.

Rachel: Escucha Louis, a pasado ya un mes desde que regresamos de vacaciones y te siento muy desconectado de todo y todos, me preocupas querido, inclusive tus alumnos han venido aquí a decirme que haga algo porque tus clases no son iguales a las de antes, compañeros maestros te han notado distante.

Louis: ¿Mis alumnos han venido? -Dijo levemente sorprendido.

Rachel: Están bastante preocupados, si.

Louis: -Suspiró, ellos no merecían pagar por los platos rotos en casa. -Entiendo, lo lamento, todo estará bien, una disculpa sincera, he estado pasando malos ratos pero no se preocupe por ello, mi rendimiento en el aula seguirá. -Se levantó dispuesto a salir, pero Rachel le tomó la mano impidiendo su caminar.

Rachel: Louis, entiendes que lo principal para mi como directora es que mis maestros estén bien de salud tanto física como mental, si necesitas un tiempo con gusto te lo daré y conseguiremos a un maestro para que te cubra.

El ojiazul lo necesitaba, un descanso para poder acomodar todas las piezas en su vida y poder continuar con su trabajo, pero sabía que no podía darse el lujo de no trabajar y no ganar dinero a pesar de los ahorros de su vida.

Louis: Lo tomaré en cuenta. -Se acercó a su jefa y le dio un fuerte abrazo. -Gracias por el apoyo y la preocupación, estaré bien.

***

Subió a su auto y recargo su frente contra el volante, las lagrimas salieron sin su permiso corriendo con velocidad por sus mejillas, mordía con furia su labio para no sollozar, estaba pasándola mal, eso no le gustaba para nada, ya no era feliz, sentía un hueco en su pecho la mayor parte del tiempo, sabía que las cosas con Harry se iban deteriorando poco a poco a pesar de las palabras que endulzaban sus oídos después de las peleas o las charlas incomodas, estaba claro que ya no era lo mismo, y no sabía que hacer al respecto, pero lo que si sabía era que ya no quería sentirse así no era sano, estaba afectando todos los aspectos de su vida, y lo peor de todo era que sus compañeros y alumnos en la escuela comenzaban a notarlo.

Estornudo, agradecía que las calles estaban completamente solas, o eso creía hasta que una mano todo la ventanilla, levanto su rostro con rapidez y seco las lagrimas con el dorso de la mano. Volteo para ver a la persona que estaba tocando y noto a cierto pelinegro con ojos grandes y marrones mirándolo con angustia, aún desde fuera apuntó hacia el lado del copiloto, Louis asintió y quito el seguro de las puertas, segundos mas tarde Zayn estaba colocándose a su lado. No dijo nada, solo estaba ahí sentado, mirada hacia el frente, saco su termo y dio un sorbo, Louis sabía que ahí no había café.

Dreamer. //Larry Stylinson//Donde viven las historias. Descúbrelo ahora