Hasta que llegaste tú

CAPÍTULO 42 : Nunca acabó para ninguno

SAGA II: Y un laberinto por ti

Nunca acabó para ninguno

Apariciones: [SungMin/KyuHyun/YeHae/Hyukjae]

Días después, ellos siguieron en contacto... gracias a que esa misma noche Liu le escribió por mensaje.

— "No me esperaba que fueras tan respetuoso". –le mandó Sungmin a la 1:14–.

— "Creí que fui una total decepción para ti... no lo entiendo".

— "No sabes lo tenso que estoy... y deseé más agresividad de tu parte". "No pienses que esto termina aquí". –respondió seguido–.

Pero qué...— "¿Acaso fue como una prueba?". –se mantuvo esperando pegado al celular, los 5 minutos por su respuesta, hasta que la recibió–

— "Sí... y fallaste".

[...]

Jongwoon desde el día que fue contratado para presentarse cada semana en distintos lugares, ha estado tan entregado y concentrado en su trabajo que apenas y le quedaba momentos en el día para verse con su novio. Cada día hacía el sacrificio de poder verle a diario y darle pequeños regalos de vez en cuando. Estaba más que agradecido con él que aún si le diera el mundo entero, no se sentiría del todo solvente.

Una noche, Jong no pudo volver a casa de Hae. Esto no fue de gran impacto, Hae le entendía, así que se conformó con llamarle esa noche, antes de salir de casa para comprar algunos productos en el abasto cerca de su casa. Pero en cambio Jongwoon se sentía culpable por no haber cumplido su promesa de visitarle esa noche, pues Donghae había pegado un resfriado desde ayer, aunque ya le haya cuidado el día anterior, hoy quería estar con él nuevamente.

Donghae abrió la puerta de cristal haciendo sonar la campanita sobre esta, entró bajando su tapabocas, saludando al cajero de turno y se fue a la zona de limpieza. Unos segundos después alguien más entró detrás de él, con la intención de conseguirse con este finalmente se detuviera a leer uno de los productos.

— Para cerámica, vidri... –tuvo una inesperada comezón, entrecerró sus ojos, listo para estornudar sobre un muy conveniente pañuelo puesto en su boca–.

— Sabía que eras tú...

Donghae miró el pañuelo frente a él como era alejado y giró a ver a la persona que amablemente detuvo la expansión de gérmenes por el aire.

— Estás más hermoso... Hae-sshi.

— "Hae-sshi..." –al darse cuenta de quien estaba hablándole a escasos centímetros de él, su corazón comenzó a latir rápidamente dejando el producto donde estaba provocando que torpemente este tropezara con los demás y como efecto de dominó cada uno fuera cayendo dentro del estante, Hae reaccionó tarde viendo al chico apresurarse a acomodar el desastre que este había hecho–.

— Hyuk... tú... te ves igual. –dijo algo insípido enseriándose–.

— Qué cruel... –volteó a verle una vez acomodó las cosas. — Hola... –dijo con una sonrisa en sus labios como si apreciara un diamante precioso muy cerca de él–.

— Hola. –respondió desviando la mirada. — No imaginé que volverías... ¿cuándo llegaste?

— Hace unos días... ¿Hae-sshi? –suavemente tomó la barbilla del más bajo haciendo que este le mirara. — ¿Estás molesto conmigo?

–Un notorio sonrojo se hizo presente en las mejillas de Donghae y alejó su barbilla de sus manos girando su cabeza así como su cuerpo comenzando a caminar por el lugar. — ¿Qué esperas que diga? Fui abandonado por ti, aun cuando prometiste estar a mi lado hasta la universidad, en cambio me dejaste solo con ese demente.

— Yo... realmente lo siento Hae-sshi... ¿me darías una oportunidad para disculparme...?

Donghae elevó la vista hacia Hyuk una vez que este se interpuso en su camino esperando su respuesta.

Historia original de carthancer.