Crónicas de una espada Sin Memoria

Introducción

mucho se habla del progreso que ha tenido la humanidad desde su comienzo, independientemente de lo que piensen algunos sobre su origen, es indiscutible que ha ido progresando a pasos agigantados, nacieron épocas donde el orden y el honor era esencial para una persona, algo con lo que si llegaban a fallar, no podían vivir tal es el caso de esta tierra casi mítica de la cual apenas se conocen pequeños fragmentos dispersos de su historia, pero fue real, está impregnada en cada pequeña piedra que existió en esos rumbos y hoy llego el momento de desempolvarla:

desde los inicios de estas civilizaciones han existido personas capaces de desarrollar distintas sinergias ante la naturaleza, como a la arena, al viento, al agua o al fuego, entre otras menos comunes

gracias a esto dichas civilizaciones formaron clanes y grupos con la esperanza de poder perfeccionar a aquellos miembros que poseían atracción natural hacia estos elementos, a los cuales denominaron como "atrayentes"

esto fue así por décadas, en las cuales los castillos, dueños de diferentes clanes peleaban en sangrientas guerras para poder controlar la información sobre el manejo y entrenamiento de sus atrayentes, como era de esperarse esto no condujo a nada bueno puesto que al contrario, el número de atrayentes (que eran los principales guerreros enviados a luchar en estas sanguinarias batallas) se vieron afectados en su cantidad, disminuyendo muy considerablemente, tal es el caso de uno de los clanes con atrayentes de tierra: el clan "shinta" al cual después de casi 100 años de lucha decidieron ocultarse para no sufrir más perdidas de atrayentes puesto que solo sobrevivieron 3 de los más de 10 mil que tenían al inicio de la guerra

no se supo de este clan por más de dos décadas, mientras que los demás castillos seguían en su aparente eterna lucha, todos se preguntaban que habría sido del clan shinta y su misteriosa desaparición...