Un verano con el pie izquierdo

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Parece que todo esta bien, todo absolutamnete todo tiene que salir perfecto este verano, no me puedo equivocar en nada nada nada, pero bueno, en que me puedo equivocar, ya esta todo friamente calculado.

Ya estoy totalmente anciosa de que porfin las vacaciones puedan comenzar, empezaremos por escojer una buena playa... a cual podrá ser... mmm que tal si vamos a... ¡Cancún! a ecepción de que  esta en otro país, y no cuento con el presupuesto suficiente para pagar el viaje, no existe nada que me lo impida, además la gente pude ser amistosa... ¡Oh tonta! no se su idioma, ok ok Cancún queda descartado, que tal las Islas Marie...

-Cariño ¿en qué estas tan concentrada?

Y si, mi mamá acaba de interrumpir mis pensamientos de ir a las Islas Marietas. Rayos.

-Mamá, ¿a donde vamos ir a estas vacaciones?- Le pregunto ya que me desconcentre de lo que andaba.

-Eso es una sorpresa, para ti más que nada.- Me respondió con una sonrisa en su cara, quisiera saber que es lo que está planeando, no es que mi madre sea tan buena planeadora de viajes, por eso mismo tengo que averiguarlo yo, para poder ayudarle a escoger la playa perfecta, y poder presumirles a Mar y Sara a donde voy a ir y tomar muchas fotos con la cámara profesional que compraré, solo tengo que pedirles prestado un poquitín a mis papás y todo saldrá perfecto, me endeudare un par de años con ellos pero quizá se les olvide después del mes los 1000 dólares, ok quizá se les olvide o lo dejen pasar en un año pero por unas fotos bonitas del asombroso mar cristaslino, puedo hacer todo, al fin y al cabo seré fotógrafa algún día.

-Mamá,¿ me comprarías una cámara profesional antes del viernes?- le digo con una enorme sonrisa en mi rostro, eso seguro la comvencerá.

-Claro que no Deborah, tu ya tienes la tuya, ¿recuerdas? tienes a tu cámara de hello kitty que te compré hace un poco tiempo.- me responde sin darle tanta importancia y con los ojos en el camino.

-¡Mamá! ¡me la compraste cuando tenía siete! ya tengo 16, ¿no conoces las tecnologías de hoy cierto? son asombrosas, deberías conocerlas, así me comprarías la cámara.- Respongo fingiendo estar molesta, bueno si estaba un poco pero no podía enojarme con mamá, bien y se enoja ella también y me deja a medio camino a la escuela y Dios sabe cuantos días tardaría llegar hasta ahí caminando, capaz que llego cuando se terminen las vacaciones. Pero bueno, es por lo lejos que vivo, si estubiera aún en mi vieja casa, llegaría caminando en tan solo cinco minutos, pero como no me quería cambiar de escuela, porque ¿cuando podría encontrar a otras Mar y Sara tan buenas amigas como ellas? los maestros y la escuela es lo que menos importa pero ¿Mar y Sara? sin duda no podría vivir sin ellas.

-No esta tan mal un par de añitos, además tienes el celular, es uno de los más nuevos y no me vas a decir que no tiene cámara, tu papá dice que no te vamos a comprar nada hasta que subas tus notas o te enseñes a hacer algo útil en la casa, minimo debería tener una chacha ¿no crees?- Responde bastante divertida.

-No te pases mamá, a Ed el feo le compras todo.- Respondí, su comentario no me había dado risa en lo absoluto, en lo absoluto.

-Pues minimo Ed tiene buenas notas, no como otra niña igual de fea que él con la cual estoy hablando.-Le estaba dando gracia toda esta conversación cuando es seria.

-Mamá eso eso... me dolió. Esta bien, esta bien, olvidalo, ahora se que no cuento con mi propia madre.- dije un tanto dramatica.

-Ya  calla miss drama, estamos por llegar a la escuela.- hizo una pequeña pausa como que si se lo pensara.- te daré una pista de tus vacaciones, es... en cabañas. Te cuidas adiós mi vida.- se despidió cuando me había bajado del carro, ni siquiera me dejó pregutarle nada.

Dios mamá, no estará planeando llevarme a las montañas ¿cierto? por que lo que yo quiero ver es el mar y un sol desplandeciente. Me dirijo  a mi salón cuando me encuentro con Sara, hoy no es su día sin duda alguna, su largo cabello se encuentra agarrado de un chongo tan mal hecho que me dan ganas de peinarla yo, eso no es un estilo un poco despeinado, eso es parecerse a un vagabundo, además su cuerpo tan bien formado, parece una bola rechoncha con una sudadera gris tan gruesa como los sueters que me da mi abuelita en navidad, y con un pans igual de rechoncho color azul marino. La saludo con un gesto de mano y ella me lo devuelve muy desganada, su cara tampoco luce bien, sus ojeras se notan y hoy no lleva maquillaje, lo que es raro, muy raro.

-Hola, ¿qué ocurre? luces pésima.-le digo un tanto preocupada.

-Gracias por tu sinceridad Deb.- dice siendo sarcastica.- hoy me enteré de una terrible noticia, eso es todo. Después se me quitaron las ganas de arreglarme.

-¿y cuál es la terrible noticia? ¿acaso David Benson  se golpeo la cara y se combirtió en alguien feo? por que para mi esa es una terrible noticia.- dije bromeando.

-Mmm no, David sigue siendo tan guapo como siempre, lo que pasa es que no tendré un verano de sol, mis padres me llevaran a un campamento de verano, y Dios te juro que quiero que me den un balazo en la cabeza.-Dice siendo dramatica, aunque me siento mal por ella, pobresilla, yo también estaría así si me pasara algo como eso, que suerte que no es el caso, Sara también había planeado su verano perfecto al igual que Mar y que yo. 

-Uy pues no te preocupes tanto linda, mi madre quiere llevarme a  las montañas.

-¿Quién irá a las montañas?.- llega Mar. Ella luce normal pero hay algo que me dice que todo no va bien, su cabello corto, sus tenis, los pantalones, todo va igual- Para que me lleve con ellos, yo iré a un estupido campamento de verano, oh ¿qué te pasó Sara?

-Así que tu también irás eh?- le dice Sara

-Espera, ¿tu también irás?, creí que eras tú la que va a las montañas.- dijo Mar un poco confundida

-No, yo iré.-Dije bastante obia.

-Pero porsupuesto que no, mi mamá y tu mamá acordaron llevarnos como premio de nuestras calificaciones, ¿no te lo a dicho?

-Espera....¡¿¿¿QUÉ???!.- ESTO NO PODIA ESTAR PASANDO, NO EN MI VERANO NO DIOS!

-Bueno alparecer iremos las tres.-contestó Sara resignada.

No yo no puedo ir ahí, yo quiero sol, no quiero un verano con el pie izquierdo ¡no demonios!

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