One-shots Leorai

Ella

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-¿cuánto falta? - pregunto el adolescente ya aburrido por estar dentro del auto por más de cinco horas.

- pareces un niño Leonardo - alegó su padre - falta poco

- bien - contestó fastidiado.

Leonardo pasaba por una etapa de la adolescencia.  mientras su padre y él  se dirigían a su nuevo hogar, su padre había sido ascendido a un nuevo puesto pero para eso debían mudarse a la ciudad de New York.

- llegamos - anunció su padre.

Leonardo observó el lugar era un barrio concurrido y los niños jugaban felices.

- vamos veremos nuestro nuevo hogar -

quito sus auriculares  y siguió a su padre al interior del condominio por fuera se veía muy bien. esperaba que por dentro fuera mejor.

- buenos días  Señores Hamato - saludo una mujer que al aparecer era una agente inmobiliaria asignada por la empresa para la que trabaja su padre

siguieron a la señorita Leo iba distraído observando todo a su alrededor mientras su padre escuchaba las instrucciones que daba la mujer.

- y aquí es - anunció llamando la atención de Leonardo 

abrió la puesta dejando ver un buen y espacioso apartamento. minutos después  se adentraron solos a su nuevo hogar.

- no está mal - dijo a su padre - iré a ver mi habitación 

Hamato Yoshi sólo negó divertido viendo a su único hijo.

horas después cenaban pizza.

- mañana empiezas clases - anunció su padre.

- ¿tan pronto? - si había algo que le gustaba aparte de el Karate era estudiar.

- si, tus cosas están en la caja que deje en tu habitación -

A la mañana siguiente se levantó y ducho. se vistió para asistir a su primer día en una nueva escuela. se encontró con su padre y un desayuno ya servido.

- date prisa te llevaré -

- ya no soy un niñito - recordó.

- se que no lo eres pero es sólo para enseñarte la ubicación  así que no discutas y date prisa - dijo serio.

- ire a conocer el lugar después de clases - anunció saliendo del auto

- bien ten cuidado - leo asintió y entro.

ya en su nueva escuela captaba la mirada de varias chicas a lo que el las miraba fastidiado, deseaba recorer el nuevo lugar donde vivían asi  que deseaba que las clases terminarán.

su día no fue tan mal como creyó conoció nuevas personas entre ellos un grupo de chicos que de inmediato le cayeron bien.
se despidió de ellos a la salida y emprendió su camino observaba todo a su alrededor su padre no se había equivocado al hablar maravillas de la ciudad.

cansado decidió descansar en el parque  que anteriormente  había visto cerca de su casa.

vio a los niños jugando felices, siguió su recorrido por el parque y vio a lo lejos una zona del parque con un  par de  columpios pero no fue eso lo que llamo su atención sino quien estaba ahí.

una chica que aparentaba su edad, tenía la mirada baja, sonrió la necesidad de acercarse más no quería ser imprudente y ser tachado de metiche.