Disciplina ||LS

Capítulo 14

Harry se giró sobre su espalda y gruñó. Le ardía el culo y en esos momentos recordó la razón.

Louis entró al dormitorio y abrió las cortinas, dejó que la luz de la tarde entrara. Harry trató de mirarlo.

—¿Por qué me duele cada músculo de mi cuerpo? ―preguntó.

—Te aferraste a la mesa como si un tsunami te fuera a golpear ―respondió alegremente Louis, girándolo sobre su estómago y acariciando la línea enrojecida sobre su trasero—. Esta marca sí se volverá un cardenal. Lo lamento, cariño. Jamás debí haber hecho eso.

Harry se sentía terriblemente culpable.

—Fue culpa mía, Louis. Nunca habrías hecho eso si yo no hubiese actuado tan...

—¿Estúpidamente?

—Bueno, sí —admitió Harry reacio.

Louis tomó el tubo de gel y comenzó a aplicárselo. Harry suspiró lleno de alivio.

—Escucha, Harry. Soy un activo, un dominante. Me gusta jugar con un sumiso, —comenzó a explicarle— jugar es la palabra clave. —Esparció el exceso de la crema de sus manos sobre el colchón y se recostó sobre su espalda. Harry se subió sobre él y recostó su cabeza sobre su pecho, quería sentir sus brazos alrededor del cuerpo.

—Eres un sumiso, no un esclavo —continuó Louis—. Podría requerir que estés desnudo en mi presencia, que te arrodilles y que no vuelvas a hablar sin mi permiso, pero no me gusta jugar así. También te he dicho que no tolero a un sumiso que me diga qué hacer con él. ¿Está claro?

—Sí, señor —dijo Harry suavemente, acurrucándose entre los brazos de Louis.

—Jamás he golpeado a alguien cuando estoy furioso, pero casi lo hago hoy —admitió Louis— . Eso no es seguro. Te he dicho que no conozco tus límites. Esto no es un concurso donde compites con otros sumisos para obtener mi atención. Quiero enseñarte lo que necesitas saber, y así jamás te meterás en problemas.

Al escuchar eso, Harry se deprimió. Obviamente Louis no quería estar con él mucho tiempo, se sentía responsable por enseñarle lo básico de este estilo de vida, seguramente después de que eso ocurriera, lo dejaría.

Louis sintió que algo estaba molestando a Harry y deseó que el joven le hablara. Pasó sus manos lentamente por su espalda.

—Tienes una hermosa marca en el trasero —dijo en forma de consuelo.

—¿Puedo verla?

—Después. No sedesvanecerá. Incluso haré una fotografía de ella porque es la única querecibirás así de mí —dijo Louis acariciando la oreja de su chico. Escuchó unlento suspiro que anunciaba la llegada de su lujuria.

—¿Puedo...? —Harry preguntó, deslizando su mano debajo de la camisa de Louis.

—Parece que ya te estás recuperando, cariño —Louis rio al sentir la erección de su amante.

Harry abrió la camisa del hombre mayor, descubriendo su pecho. Se acercó a succionar un rosáceo pezón, complacido al escuchar el suspiro de deseo que escapó de los labios de Louis. Sus manos descendieron, abrió los tejanos del fotógrafo y se los quitó. El hombre mayor levantó las caderas con gusto, ayudó a Harry a descubrirle el bóxer con el frente húmedo.

Louis colocó a Harry sobre él y el hombre joven frotó sus caderas contra las suyas con movimientos suaves. El sentir la piel desnuda del chico contra la suya le hizo desear poder follarlo en ese momento. Pero ya había lastimado lo suficiente a Harry por un día y no podía pensar en una posición que no hiciera presión sobre el lastimado trasero del chico.