"D e s d e q u e t e v i" [VKook/TaeKook]

Capítulo 19

"Rápidamente corrió hasta la habitación del difunto rey. Todavía recordaba bien aquella habitación, la habitación en donde su amor nació. La habitación en donde su mundo dio un giro y en donde ambos encontraron lo que les hacía falta. Amor."

Jungkook se encontraba acostado en su cama con los ojos cerrados y unas increíbles ganas de desaparecer en ese mismísimo momento, la cabeza le dolía debido al efecto de la resaca, consecuencia de los tragos de más que consumió la noche anterior.

Con pereza se levantó de la cama y a pasos largos y desganados se dirigió hasta la cocina. Por suerte era sábado y no tendría que preocuparse del trabajo. –Finalmente despiertas.-

El pelinegro dio un brinco al escuchar la voz de su mejor amigo. Asustado llevo una mano hasta su pecho debido a la repentina sorpresa, realmente se había olvidado de la presencia de su amigo. –Diablos JiMin, me asustaste.- Apenas hablo. Por otra parte el nombrado se limitó a reír por lo bajo al ver el aspecto demacrado de su mejor amigo.

-Luces terrible.- Dijo el pelirrojo señalándolo con la espátula. –Muchas gracias, yo igual te amo.- Exclamo Jungkook sentándose a un lado de su amigo,

-Lo sé, soy Park JiMin ¿Quién no me amaría?- Se burló. El pelinegro suspiro divertido. JiMin no tenía remedio.

-Me duele la cabeza.- Se quejó Jeon. –¿Entonces qué esperas para tomar una pastilla? Apresúrate, pronto estará el desayuno.- Ordeno el pelirrojo para después ver a su amigo levantarse con pereza. -¡Animo hombre! ¡Hoy será un día genial!- Exclamo JiMin entusiasmado.

-¿Por qué?- Pregunto el pelinegro tomando un vaso de agua para pasarse la pastilla que le ayudaría con su resaca.

-¿Disculpa?- JiMin exclamo indignado. A veces no podía creer lo idiota y olvidadizo que podía llegar a ser Jungkook. –Hoy es día de omegas, ¿Recuerdas? Tú, yo, ropa, comida, alcohol. –Dijo mientras colocaba los platos con el respectivo desayuno en la barra de mármol.

-Oh.- Fue lo único que salió de la boca del pelinegro. JungKook no mentiría si dijera que en ese preciso momento él estaba totalmente perdido, ya era demasiada ganancia saber con exactitud qué día de la semana era.

Últimamente se sentía muy distraído, demasiado fuera de su lugar. También se sentía extraño, su cuerpo no se sentía normal y mucho menos su lobo, el cual parecía estar en las nubes y gracias a eso sus instintos estaban hechos un desastre. Pero nadie más que el exclamaba "desastre" en esos momentos.

¡Oh! Pero si bien era cierto que no eran los mejores días para el azabache, por lo menos tenía una pequeña pista de aquello causante de que su lobo estuviera tan fuera de lugar, o más bien quien.

JungKook sabía muy bien que desde la llegada de su nuevo compañero de oficina su vida había dado un total giro de 360º y ante eso él realmente no sabía cómo reaccionar.

Realmente quería sentirse molesto con ese alfa, quería gritarle y decirle lo malditamente mal que estaba simplemente llegar y robarle el corazón de esa forma tan irrespetuosa, pero solo bastaba con una sonrisa deslumbrante por parte de ese estúpido alfa de cabellos castaños para que el omega quisiera inmediatamente tirar todo a la mierda y querer aventarle una acta de matrimonio.

Llamarse así mismo exagerado sería demasiado.

-¿Estas bien?- Pregunto el pelirrojo con un tono de burla tan característico de su parte, lo cual hizo que JungKook volviera de organizar su increíble (pero sobretodo desastroso) plan para enterrar el cadáver de TaeHyung sin ser descubierto por la policía. -¿Yo? ¡Claro! Estoy de maravilla.- Exclamo el azabache forzando una sonrisa.

-Ese alfa realmente te tiene en la luna...- El pelirrojo se limitó a ver a su amigo con una cara maquiavélica, pero sobretodo picarona.

El omega de cabellos azabache juraría que si no fuese por su malestar de espalda él ya se hubiera abalanzado contra su "mejor amigo". –Vuelve a hacer un comentario así y me encargare personalmente de quitarte cada uno de esos asquerosos cabellos color rojo de tu cabeza.- Sentencio el omega pelinegro con la mirada más furiosa que JiMin había visto en toda su vida.

El pelirrojo se sintió aterrorizando ante la cruel mirada que él azabache le brindaba, pero eso cambio cuando se dio cuenta de cómo la cara de su amigo se descomponía con rapidez, dando lugar al comienzo de un mar de lágrimas, las cuales salían del rostro de aquel joven omega cuyo miedo se podía oler en toda la habitación. -¿JungKookie..?- Musito levemente preocupado. El pecho de JiMin comenzaba a pesar conforme este veía como cada lagrima se deslizaba por el frágil rostro de JungKook. ¿Realmente se había pasado de la línea?

-Ya... yo, lo siento.- Logro decir el azabache entre hipidos y sollozos. –Es solo que tengo...- Fue lo único que pudo decir antes de ver como JiMin se acercaba a él, rodeándolo en un fuerte y reconfortante abrazo.

-Lo siento, no debí haber dicho eso.- JiMin se concentró en apoyar a su amigo con otro fuerte abrazo y un beso en la frente. –JiMin tengo miedo... ¿Qué tal si es como el resto?- Los sollozos se volvieron más pronunciados, lo cual llevo al pelirrojo a apretar al azabache con muchas fuerzas. –No, no, no digas eso.-

-Mírame.- Le dijo JiMin, obligando al pelinegro a hacer contacto visual con él. – Kookie, no todos son como el ¿entiendes? No todos te harán daño.-

-P-pero..-

-No lo hará, ni él ni nadie más. Porque yo te protegeré ¿Me oíste?- Exclamo el pelirrojo. Entre ambos hubo un pequeño momento de silencio, el cual termino con la tierna y tímida risa del omega de cabellos azabaches. –Pero eres muy pequeño.- Exclamo JungKook para luego ser atacado por el omega pelirrojo.

-¡Yah! ¡Deja de decir que soy pequeño! ¡Respétame!-

Las lágrimas terminaron siendo reemplazadas por un montón de risas y carcajadas por parte de ambos y JungKook no pudo haber estado más agradecido de haber tenido a alguien como JiMin por tanto tiempo. Realmente ambos sabían cómo apoyarse mutuamente y salir adelante.

-Bueno, ahora que veo que estas mejor ¿El día de omegas sigue en pie?- Pregunta el pelirrojo con una gran sonrisa. JungKook finge pensarlo por un par de segundos para luego dar su respuesta.

-Bien, pero solo si me invitas el almuerzo.-

-Aish.. está bien, es un trato.- El pelirrojo accede y ambos no pierden tiempo en comenzar a alistarse para un gran día.

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Wow... realmente somos 5k ¡No lo puedo creer! 

¡Muchas gracias! Realmente estoy muy feliz, jamás me espere esto.

Espero les haya gustado el capítulo de hoy, lamento la tardanza, espero actualizar un poco más seguido.

Ahora, volviendo a la historia, solo quería aclarar un par de cosas para aquellos que se quedaron con la duda de porque JungKook se desmayo tan de repente. 

El Omegaverse como tal depende del autor, en este caso he alterado cosas muy leves, las cuales se irán explicando con el tiempo en la historia. Por ahora solo aclarare las dudas del repentino desmayo. 

Esto se debe gracias a la presencia de una nueva e imponente imagen en la vida de nuestro omega, como lo es TaeHyung. JungKook siempre ha sido un omega respetable y muy difícil de tratar debido a que no suele mostrar esa conducta de sumisión característica de un omega, por lo que al estar en presencia de una posible pareja la cual es aceptada por sus instintos hace que su lobo entre en un shock repentino y es por esto que se debe el desmayo. Esto en omegas no es tan común pero llega a pasar y no es nada que ponga en peligro al omega, simplemente es por la sorpresa que le causa al lobo de JungKook el por fin poder encontrar una potencial pareja.

También porque tanto JungKook como su lobo son muy selectivos lol.

¡Bueno, ya que aclare esto me piro vampiro xd!