KINGDOM COME! ( one shots )

wanda maximoff

Había dos cosas que a Aurora siempre le habían gustado desde que era una niña.

1. Escuchar música.

Era una elección obvia, a todos les gusta escuchar música, pero aun así ella pensó que valía la pena incluirla en la lista.

2. Jugar a videojuegos.

Desde que era una niña a Aurora le gustaba irrumpir en la habitación de su hermano mayor y jugar en su computadora cuando él no estaba. Cuando comenzó la escuela secundaria, no fue una sorpresa que tuviera su propia computadora con sus videojuegos. Lamentablemente después de una desgracia en su último año en el que fue lo suficientemente inteligente como para descubrir algo sobre el director de su escuela que no debería haber descubierto, la llevaron a una habitación oscura y espeluznante donde pasó dos meses, aunque no está realmente segura si fueron dos meses, pero eso es lo que le dijeron, ahí fue donde usaron a Aurora como un experimento con una especie de súper suero. Durante el tiempo que estuvo encarcelada, el recuerdo de su descubrimiento se había olvidado, pero volvió a aflorar cuando finalmente un grupo de personas con trajes la encontró y la llevó a un lugar al que pronto aprendió a llamar hogar.

Abrirse a los extraños y acostumbrarse a su nueva fuerza fue un poco complicado al principio, pero una vez que se rompió el hielo inicial, fue fácil y agradable estar cerca de los demás. A pesar de esto, los juegos seguían siendo el escape de la realidad de la joven, siempre que necesitaba relajarse o simplemente por diversión, por lo que era fácil deducir que esta era la razón por la que el mejor amigo de Aurora en el complejo era Pietro Maximoff. El chico era un adicto a los juegos como la rubia, por lo que su cercanía creció considerablemente debido a las horas que pasaban jugando juntos.

Por supuesto, como se había ganado la confianza y la amistad de Pietro, Aurora se ganó la confianza y la amistad de su gemela, Wanda Maximoff. A pesar de ser gemelos, no tenían nada en común. Pero esto no fue un problema para la joven, ya que ella y Wanda crearon lazos tan fuertes como con su hermano. La chica siempre fue paciente y amable Aurora. Wanda hizo que aprendiera a que le gustaran más cosas que solo los juegos, por extraño que parezca, logró que le gustara ver comedias, algo que a la rubia nunca le había gustado en toda su vida, y también le hizo sentir cosas que nunca antes había experimentado.

No pasó mucho tiempo para que se dieran cuenta de que estaba enamorada de la hechicera, y después de muchas burlas de Pietro al respecto, finalmente tuvieron el coraje de asumir sus sentimientos la una por la otra. Entonces, cuando meses después comenzaron a salir, no fue una sorpresa para nadie. Todos vieron lo cómodas que se sentían ambas. Y así continuaron las cosas, Aurora y Wanda eran una gran pareja y aún mejor cuando estaban juntas en la batalla, el miedo a perderse la una a la otra era suficiente para que fuera raro que alguna de las misiones en las que participaron fallara.

Pero, lamentablemente, Aurora resultó herida en la última misión. Se distrajo rápidamente, pero fue suficiente para dejarla noqueada. Cuando se despertaste en la enfermería con moretones en el hombro, Steve dijo que le ahorrarían la próxima misión para descansar. Sin embargo, Wanda tenía que irse. Y, lamentablemente para las dos, la misión duró más de unos días.a Aurora se le asignaban pequeñas misiones que podía resolver en cuestión de horas, y luego su aburrimiento la consumiría y hacia lo que mejor sabe hacer: Jugar.

Cuando Wanda finalmente regresó al complejo después de tres semanas de ausencia, lo primero que hizo, bueno, después de tomar una ducha para relajarse un poco, fue ver cómo estaba su novia en su habitación. No hace falta decir que el anhelo de ambas se expresó en la noche que pasaron juntos en su cama.

Aurora estaba en paz y la alegría llenaba su corazón mientras su novia yacía sobre su pecho, vistiendo solo una blusa grande que le pertenecía a ella: Wanda siempre le robaba la ropa para dormir o simplemente para usarla durante el día, y sin embargo, la imagen aún la mareaba de amor.