Capítulo 1.

701 17 2
                                    

Isabela

Lluvia... Fuertes gotas de lluvia caen golpeando mis mejillas rojas y mis nudillos rotos, la lluvia empapa mi ropa resaltando mi cuerpo delgado. Mi baja estatura es ventaja para que logré escapar y entrar a un callejón oscuro e intimidante.

Todo pasó tan rápido, recuerdo que estaba jugando fútbol con unos amigos en un campo libre. Luego llegaron una bandas de chicos que querían jugar, mis amigos se negaron y los otros no dudaron en golpearlos, incluso a mi.

Corrí lo más rápido que pude pero no fue suficiente, un chico tomó con mucha fuerza el gorro de mi suéter y me jaló hacia el, luego llegaron cuatro chicos más y cada uno me tomó de un lado, uno tomó mis dos brazos y los movió tras de mí y dos más me tomaron de las piernas dejándome totalmente inmóvil, no había nadie que me ayudará, mis amigos escaparon luego de que les dieran unos buenos golpes.

Trataba de gritar para que alguien me oyera pero un chico tapó mi boca y tomó con una mano mi mejilla y yo cada vez me asustaba más.

-No hay dónde ir pequeña- quita su mano de mi boca y se acerca cada vez más. Intento alejarme pero no lo logro, vencida , cierro mis ojos porque sé que lo que sea que pase no será algo bueno.

Sus labios rozan los míos y nuestras respiraciones se combinan, es la peor sensación que he sentido.

Cuando sus labios hacen contacto con los míos sentí una sensación horrible, mi primer beso no fue como lo imaginé.

Cuando se aleja pensé que todo iba a termina ahí, pero no, retrocede uno pasos y me da una sonrisa que no quiero volver a ver jamás.

-Veamos que mas tienes aquí- se acerca nuevamente a mi pero está vez me quita el sueter, se que es lo que quiere y de ninguna manera se lo daré.

Le doy una patada donde no brilla el sol y se aleja haciendo muecas de dolor, los demás van a revisarlo y logró escapar, pero un chico muy alto se cruza frente a mi impidiendo que pase. El intenta agarrarme pero no pudo y le doy un golpe con el puño en la cara, no pensé que golpeara tan duro que me herí hasta a mi, mis nudillos empiezan a sangrar pero no los siento ya que empiezan a caer pequeñas gotas de lluvias.

Finalmente siento un ardor en mis nudillos así que los reviso, al verme distraída el chico me da una cachetada muy dura que hizo eco por todo el campo, fue tan dura que consiguió que me callera , vi de reojo que los demás van corriendo hacia mí y no me importó si estaba golpeada o que, yo salí corriendo.

Me siento en la esquina del callejón con mis brazos alrededor de mis piernas dobladas y comienzo a llorar, hace mucho que no lloro, nunca me había pasado algo como esto, es un sentimiento tan feo, mi mente repite una y otra vez lo que acaba de pasar, todas esas escenas se han vuelto en mi peor pesadilla.

Me siento como una tonta, fui tan tonta, ¿Cómo se me ocurrió haber escapado de casa?, todo por un estúpido partido, Me siento tan usada, jamás había besado a alguien, nunca, y pensaba hacerlo cuando tuviera un novio, si mi madre se da cuenta de esto me matará, pero lo correcto es buscar ayuda.

Cuando la lluvia se calmó un poco busco en mi mochila mi celular.
Busco por todos lados pero no lo encuentro, seguramente unos de esos chicos me lo robo mientras estaba como miserable ahí.

Empiezo a sentir hambre y muchísimo dolor, me duele mi mejilla y mis nudillos, mi ropa está muy mojada que mi cuerpo de resalta, cosa que no es muy conveniente en este momento.

Luego de estar debatiendo con mi mente sobre si debería irme o no me levanto y me dirijo a casa, camino como un zombie, pensé que solo me dolían ciertas partes de la cara y mis nudillos pero me equivoqué, me duele mucho la pierna y la cabeza.

Paso calle tras calle recordando una y otra vez esas escenas, si le hubiera hecho caso a mis padres todo hubiera salido bien.

Intento olvidar eso y me concentro en algo lindo, mi abuela aparece en mi mente y si no hubiera llorado en el callejón en este momento lo haría, sus palabras de ánimo aparecen cada vez en mi cabeza, necesito ir a verla, necesito llegar a casa.

Mucha gente me ve como si fuera una completa extraña pero ninguno se digna a ayudarme, me siento cada vez más débil pero estoy cerca de llegar, por suerte mi casa queda un poco cerca porque si no fuera así ya hubiera caído rendida.

Muchas chicos pasan y se me quedan viendo como idiotas, no sabía a qué se debía pero recordé que mi ropa está empapa por lo que mi cuerpo se resalta. Que asco...

Mi mente es un desastre, ya se que es lo que siente mi teléfono cada vez que estoy viendo vídeos en YouTube con tan solo 3% de carga, mi pobre teléfono, no lo puedo creer, lo perdí.

Es cierto que las cosas materiales se recuperan pero, ahí tengo todo, mi música, mis chats, números de teléfonos, mis videos favoritos, mis fotos de Coutinho... ¡MIS FOTOS DE COUTINHO LAS HE PERDIDO!, Si antes me sentía desafortunada ahora me siento peor.

Estaba apunto de sentarme a llorar por mis fotos pero mis ojos llegaron a aquella casa de dos plantas color marrón, mi boca formó una gran sonrisa, nunca pensé que me iba a sentir tan alegre por ver mi casa.

Llegó al portón, tocó el timbre y espero un tiempo pero nadie sale, entonces me voy al intercomunicador y tocó el botón, escucho la voz de mi madre contestar, ella no es la persona más comprensiva del planeta, ella nunca fue fan de que yo jugará fútbol, me apoya pero no está convencida de que jugar en Boca Juniors es un sueño para mi ya que empecé  cuando a penas tenia 17 años.

-¿Quien?- la voz de mi mamá suena y yo quiero responde pero no puedo, ninguna palabra sale de mi boca. -¿Hola?, ¿Quien es?-

Un chillido sale de mi boca y mi madre alcanza a escucharla para saber que soy yo.

Rápidamente ella sale de la casa y abre el portón, al verme digamos que no se lo esperaba.

~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~

𝐀𝐝𝐢𝐜𝐭𝐚 𝐚 𝐭𝐢 💘𝐏𝐡𝐢𝐥𝐢𝐩𝐩𝐞 𝐂𝐨𝐮𝐭𝐢𝐧𝐡𝐨💘Donde viven las historias. Descúbrelo ahora