𝐀𝐝𝐢𝐜𝐭𝐚 𝐚 𝐭𝐢 💘𝐏𝐡𝐢𝐥𝐢𝐩𝐩𝐞 𝐂𝐨𝐮𝐭𝐢𝐧𝐡𝐨💘

Capitulo 4.

Han pasado 2 meses desde que llegué a aquí, decir que me ha ido mal queda pequeño a comparación con todo lo que he lideado estando aquí.

No he recibido ningún minuto, ni siquiera un segundo ¿Que iba a esperar?, Soy solamente una chica pero había algo en mi que me hacía pensar que lo mejor estaba aquí, que todo lo que he sufrido aquí es por algo.

Lo se, suena muy estúpido, pero esa es la palabra que definiría mi vida perfectamente. Deje el River para jugar en el Boca y aunque muchos pensaran "Wow que fidelidad" me siento muy satisfecha por haber estado en esos dos equipos.

Había algo que me motivaba a jugar fútbol y ese algo tiene nombre y apellido.

Philippe Coutinho.

Cómo ya lo he dicho suena estúpido pero estar en el mismo club de él hace ponerme los pelos de punta.

En mi estancia aquí, no nos hemos tratado, ni siquiera visto. Estoy segura que el no ha notado mi presencia aquí pero ¿Quien lo haría considerando que no he tocado el balón?.

Mi mente está en el espacio literalmente, siento como si estuviera desconectada aunque ya se perfectamente que estoy en un café comiendo con Carol, sé muy bien que está hablandome y aunque no le estoy presentando atención se tambien que habla acerca de su obsesión con Munir El Haddadi.

¿Que puedo decir? Cada quien tiene sus gustos así que no la juzgaré. Ella ha hablado por horas sobre el y eso no es de sorprender ella siempre ha sido muy sentimental, capaz de hacer lo que sea por el aunque no lo conoce, entregar todo lo que tiene a su disposición solo por tener una foto con el y no es que yo no tenga sentimientos o así por el estilo, simplemente no me gusta demostrarlo.

Nunca me ha gustado la idea de tener novio, obviamente me han gustado chicos pero no sé los he dicho a nadie porque se que me arrepentiré luego.  Cada vez que alguien me pregunta sobre ello uso mi típica escusa de que estoy enamorada del fútbol y que prefiero concentrarme en el.

Empecé usando a Coutinho para no fijarme en nadie más y de esa manera distraerme de los chicos, ¿Ha funcionado? Más de lo que debería, mi plan tomó otro rumbo y sin querer terminé teniendo una pequeña-gran obsesión con el.

Nadie lo sabe y no quiero que nadie lo sepa, estoy bien en mi burbuja donde según yo todo es perfecto, aunque la realidad sea un desastre.

El café queda dentro de un centro comercial así que podemos ver a la gente que pasa.
-¿Puedes creerlo?- pregunta Carol sacándome de mis pensamientos.

-Si lo sé- hago una pausa -La vida no es siempre lo que creemos- le dije ya que estaba casi segura que había cambiado de tema y hablado acerca de lo injusto que era estar aquí.

-Se que no me escuchabas-

Diablos, me descubrió...

No respondo y ella sigue -No es la primera vez que lo haces, eso es de siempre, yo pienso en desahogarme y tú te quedas como tonta ignorandome.-

Me quedé impactada, lo que dijo era cierto pero no pensé que le afectará tanto, no sabía que ella lo hacía para que la escuchara.

¿Para qué más crees que lo hacía? Mis pensamientos me preguntaron sarcásticamente, hubieron días en el que Carol sé necesitaba desahogar y yo la escuché, no hablé pero si la escuché.

-Lo siento, tu no eres ningún tipo de psicólogo no tengo que tratarte como tal- dijo mi amiga rompiendo el silencio, y yo estaba decidida en hacer algo: no hablar.

Cuando le pasaba algo malo, cuando tenía pesadillas, cuando se lesionaba, cuando algo salía mal... Siempre fue esa mi forma de consolarla, no le encuentro chiste dar palabras de consuelo cuando se que se irán a la mierd... Perdón me prometi no usar malas palabras pero no pude evitarlo, lo mío siempre fue escuchar mientras ella se deshagoba y abrazarla cuando haya terminado.

-Tu eres mi amiga y no es mentira que eso me molesta, lo hace y mucho pero...- ella quedo hasta ahí y no siguió, supe que ya había terminado así que me levanté y la abrace, ella me devolvió el abrazo y cuando nos separamos le di una sonrisa honesta.

-¡Oh por dios acabas de sonreír!- lo dijo como si fuera una noticia buena pero nadie en el mall le tiró un pedo.

Pensé que la gente se quedaba callada después del acto de inmadurez por parte de mi amiga, hasta que sentí que el ambiente cambio, mi cuerpo empezó a tentarse y los nervios en mis manos se notaba a kilómetros.

Finalmente mis ojos caen en aquel par de ojos oscuros, trae puesta una gorra Gucci, una camiseta negra y unos jeans ajustados rotos; pero su manera vestir es lo que menos me importa ahora.

Veo su cara, lo perfecta que es, cada lunar, grano, espinilla o cualquier tipo de imperfección me gusta, tiene un aspecto serio; se le ve seriedad que cualquiera diría que no se ríe, pero no, sus ojos caen en su amigo, no logré distinguir quien era ya que estaba de espaldas pero por el estilo de su peinado me hizo deducir que es nada más y nada menos que Firmino.

Ambos traen puestas gorras para evitar que la gente lo distinga pero a una fan-girl como yo no la podrán engañar, no tan fácilmente.

Mi respiración se acelera, mi pecho subiendo y bajando por cada respiración que doy, mis manos sudorosas, mi mente a punto de colapsar.

Tenía que levantarme y pedirle una foto, tenía..., Quisiera decir que lo hice, que junte el valor  necesario y me dirigí hacia el , que me tome una foto con mi ídolo, que sonreí junto a él, que le dije que jugaba en Liverpool, que por fin intercambie palabra con el.

Pero no...

No lo hice porque aún no podía creerlo, tenía a centímetros a mi amor platónico y no fui a él, entré en pánico, mis ojos no se despegaban de el, parpadee varias veces para comprobar si era real, si era el en verdad, si todo esto no era un simple sueño.

Verlo ahí tan ... Perfecto me dejó en las nubes, completamente impactada, congelada, olvidé por completo que todo lo bueno tiene su final.

Lo vi moverse junto a Firmino hacia lo que creo que es el ascensor y es así como quede retratada como una estúpida, deje pasar la oportunidad de mi vida.

¿Que has hecho para que me dejes sin aire Philippe Coutinho?.

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*Nota de autora: 5mentarios.